Venganza

Capítulo 9

—¿¡Qué!? —dice soltando mi mano y mirándome sorprendido. Okey, definitivamente no ha reaccionado bien. Tenía un presentimiento de que esta propuesta no iba a salir bien. Es decir, ¿quién se va a vivir con una persona que apenas conoce desde hace solo 2 días? Pero, no es mi culpa. 

En mi defensa, no podía soportar su tono burlón sobre mi falta de imaginación en las reglas. Sé que tiene razón, pero no quiero admitir que sí tiene la razón. Me niego a hacer eso. Soy la hija de mi padre, no voy a dejarme ganar tan fácilmente. 

Le sonrío tratando de disminuir la tensión—. ¿Hay algún problema con eso?

—¿Que si hay algún problema? Sophia, nos conocemos hace dos malditos días. No te había visto desde que éramos niños y ¿ahora quieres vivir conmigo? ¿Qué te sucede? ¿Es una broma? Porque si es una broma no me parece divertido. 

—¿Y por qué no?

—¿Así que sí es una broma? 

Vamos, Sophia, di que sí para que todo se acabe—. Dímelo tú. ¿Quieres que sea una broma? 

—¿Me estás dando a elegir si dejo que te vengas a vivir conmigo? ¿Quieres que tu idea se convierta en la mía? 

—Bueno…

—Te podría decir que sí, pero dame una razón. ¿Por qué quieres vivir conmigo? ¿Por qué no solo te quedas en tu residencia? 

Me encojo en mi silla. No puedo decirle la verdad, hay un presentimiento en mi interior que me avisa que no debería confiar tanto en este hombre. Tal vez sea lo que me dijo mi madre acerca de su familia o que solo le tengo un poco de recelo por pertenecer a la familia que debería de odiar. Solo sé que no debería ser tan sincera con él y eso es como una protección para mí—. Bueno, vivir en tu departamento sería mucho más cómodo que quedarme en una residencia. No puedo desaprovechar esta oportunidad.

—Espera, ¿dijiste en el departamento? —escucho como una carcajada sale de su boca y veo como su cara se ilumina—. Dios, eso es imposible. 

—¿Qué? 

—Creo que no me escuchaste bien anoche, Sophie. Mi padre está resentido conmigo porque me besé contigo. 

—Dijiste que casi te da la gerencia de la empresa familiar.

—Eso es cierto, pero no sabía que tenías tan mala memoria. Esta será la tercera vez que te digo que fue lo que me dijo mi padre después de las fotos. ¿Tienes algún problema de memoria? —dice con sarcasmos sin dejar de sonreír como para que no suene tan duro—. Sophie, tú eres mi enemiga. He nacido para odiarte por un problema que ni siquiera nos interesa, pero aquí me tienes. Cenando contigo en uno de los mejores restaurantes de Los Ángeles. Yo soy como mi padre. Mason Carpenter es un hombre muy voluble y aunque cuando vio las fotos no me dijo nada, después de eso, Nicholas me habló y me dijo que mi padre está dudando de mi lealtad por solo un beso. 

—¿Tanto así?

—Cuando te dije que estamos viviendo como Romeo y Julieta, no estaba hablando subjetivamente. 

—Vaya.

—Ahora imagínate que mi padre se enterara que he empezado a vivir contigo en el departamento que compró para mí. Joder, sería iniciar una guerra con mi padre por ti. 

Me quedo mirándolo atentamente esperando que dentro de mí empiece a criticarlo, pero es que lo entiendo. Mi papá, si no estuviera molesto conmigo, me mataría si es que se entera que vivo con el hijo de su peor enemigo. Yo no sé cómo es que empezó esta guerra entre nuestras familias, pero aquí estamos. 

—¿Osea que no voy a vivir contigo?

Veo como esboza una sonrisa quitándole la seriedad al problema—. Sophie, no puedes vivir conmigo. Anda, quita esa tontería de tu cabeza y pon otra regla, ¿o es que acaso ya no tienes ideas?

Me quedo callada y lo miro tratando de que cualquier tontería venga a mi cabeza, pero nada. Tengo la mente en blanco. La mirada penetrante de William me está dejando sin habla y sé por qué lo está haciendo. Yo sé que él sabe que no tengo ni puta idea sobre más reglas y lo está disfrutando. Quiero decirle que ya no hay más reglas, pero al mismo tiempo no quiero quedar como una total idiota en frente de él. Soy Sophia Lawrence y no puedo dejar que un Carpenter me vea caer en un estúpido juego de poder. 

—Bueno, no quiero una relación abierta.

—Espera, ¿relación? Anoche me dijiste que no querías una relación conmigo,

—No quiero una relación romántica, idiota. Pero no quiero que te acuestes con otras mientras lo haces conmigo. 

Sonríe—. ¿Relación cerrada, pero no romántica? Esa sí que es una verdadera regla porque va en contra de mi naturaleza.

—Lo sé —digo cruzándome de brazos y enarcando una ceja mostrando mi superioridad. Aunque la verdad es que dije cualquier tontería. No me interesa si se acuesta con 2 o 3 mientras lo hace conmigo; solo quiero conseguir donde vivir y sé que puedo conseguirlo con él solo que debo de pasar más tiempo, ganarme su confianza y aprovecharme de eso. 

—No sabía que eras celosa.

—No me conoces, Will. Tú mismo lo has dicho, no nos hemos visto desde que éramos niños. Y eso ha sido hace más de 10 años.

—Tu madre casi se desmaya cuando te encontró completamente sucia después de correr por los jardines de la casa de la abuela.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.