“Nunca esperé volver aquí tan pronto” no había pasado ni siquiera medio año, lejos de ser muchos meses… pero ahí estaba. No había cambiado nada obviamente. Todo siguió en su lugar… tampoco era que tuviera mucho tiempo para explorar la primera vez que llegué, aun así, superficialmente, no noté ningún cambio.
Allen me miró expectante. Buscaba que repitiera lo que tanto había asombrado a Dóminic y Geral… vaya combinación, claro que pedían que lo repitiera pero no sabía muy bien como lo había hecho, y más que nada no sabía si quería repetirlo frente a personas que no confiaba. No había manera de que me lastimaran si como pensaba el campo se activaba cuando estaba en peligro pero eso no le quitaba que temiera me dejaran encerrada en una jaula como rata de laboratorio.
-Verona. Necesitamos que repitas lo que sucedió.
Dóminic se había quedado en la mansión. Rose había llegado antes de irnos y aprovechó la oportunidad de regresar a la rama si eso significaba ver a Allen. Ella no estaba muy bien enterada del porqué estábamos ahí, aunque me alegraba que estuviera no me gustaba las miradas que me lanzaban.
Respire profundamente intentando pensar qué había sido lo que pasó para que reaccionara así. En todo el día varias cosas me habían afectado, incluso desde el anterior. El habernos encontrado en tanto peligro cuando atacaron el bar, el encuentro de Ágata, la confesión de mis sentimientos a Dóminic, su rechazo, el encuentro del reloj de mi padre y cómo de alguna manera me había transportado por la casa. Ninguna de las cuales les quería mencionar, aunque Rose me había visto llegar de la nada, hasta ahora no lo había comentado, así como el que supiera que Dóminic estaba perdido, lo pudiera encontrar, que haya buscado la oportunidad de hablar con Jackes, dejando a un lado el que Alisa se había descubierto psíquica también e igualmente esperaba que Rose lo contara, o tal vez guardaría el secreto como con Ethan, a parte del ataque de Jean, llegar a la casa y que por fin para hacerlo todo explotar Yeral me hubiera comentado que Jean me acusaba de haberlo atacado y a final de cuentas apareciera Dóminic para terminar y menospreciar.
Había sido la gota que derramó el vaso. Él no tenía palabra que decir y ahí estaba. Hubiera sido más fácil soportar su rechazo si tan solo hubiera desaparecido y me intentara evitar, pero ahora no solo parecía que me odiaba si no que a diferencia de antes buscaba una manera de hacérmelo saber. Se le había olvidado la razón por la que me evitó y a mí la razón por la que lo busqué, aunque pareció ya no importar de nada. Él salió de su camino para hacerme la vida imposible. Otra vez el jueguito de cazarnos. Ya me estaba cansando de tantas estupideces. “Si me dejara sola. Por favor que me deje en paz. Que ya no me hiciera sufrir ni me lastimara más de lo que ya estaba…”
El mismo líquido empezó a brotar de mí. Temí que mis dones se agitaran nuevamente, que reaccionaran, que tuvieran que encerrarme como antes para que no lastimara a nadie… en lugar de eso solo siguió saliendo de cada poro… y empezó a inflarse.
Me tranquilizó que no se alocara, pero tampoco había nada que me pudiera asegurar que estaría a salvo cualquier persona cercana a mí… de ninguna manera.
Rose tomó la iniciativa y se acercó. La energía reaccionó pero no le hizo daño. No era su intención protegerla tampoco pero se comportaba como su amiga. Ella vio como trepó por su brazo sin lastimarla y jugó en su cuello hasta que regresó a mi burbuja.
-interesante… parece ser que trabajarán aún más tiempo juntas- dijo Allen sin que realmente en su rostro pareciera que le importara.
Rose volteo a verlo entre emocionada porque no la harían regresar y expectante a qué más diría.
-parece ser que solo tú le agradas Rose y tanto puede ser porque ustedes se llevan bien como porque su poder es similar.
Nuestras miradas se mantuvieron saboreando el dulce secreto que compartimos. A mí me alegraba que ella se pudiera quedar en el coliseo con Allen, y yo ser incapaz de ver a Dóminic por algún tiempo, que la sublime confidente que tuviera en todo el asunto se fuera a quedar a mi lado por el mismo tiempo. Lo único que no me daba risa era que no podría ver a Jackes… y muy probablemente ya estaría preocupado por saber de mí.
-Allen, estoy de acuerdo que lo más seguro sería que me quedara aquí hasta saber qué es lo que sucede con mis poderes, pero necesito comunicarme con alguien para que no se preocupe.