Viví mucho tiempo en máscaras,
mostrando lo que otros querían ver,
ocultando lo que realmente era.
Creí que debía ser fuerte siempre,
feliz siempre,
perfecta siempre.
Pero eso no era real.
La perfección es una mentira,
y la fuerza no siempre significa ausencia de lágrimas.
Hoy elijo ser real.
Con mis días buenos y malos,
con mis risas y mis llantos,
con mis victorias y mis fracasos.
No necesito ser perfecto.
Solo necesito ser yo.
#4414 en Otros
#1225 en Relatos cortos
#8611 en Novela romántica
#1963 en Chick lit
poesia narrativa para jovenes y adultos, amor propio nuevo amor y esperanza, poesìa mujeres
Editado: 08.12.2024