Victoria lo dulce del dolor

Cap.: 19

Enseguida Keidan se alistó para salir y se escapó por la ventana como a las 3:00 A.M. Víctor le había dicho que se había mudado a las afueras de la ciudad a la casa del nuevo esposo de su madre, pero ¿Por qué ahí? ¿Acaso tenía Víctor algo que ver con eso?

Prefirió tomar un taxi, pues la moto hacia mucho ruido, no quería eso, quería llegar de sorpresa. Por lo cual se bajó uno metros antes de llegar a la casa y siguió a pie, claro, se ocultó en todo el camino. Al llegar se acercó a la casa con sigilo y no pudo contener la cara de sorpresa al ver allí a Nicolás.

- ¡¿Tu?! ¿Qué haces aquí? - preguntó con sospecha.

- No ¿Tú qué haces aquí? A mí me enviaron esta nota. - Le enseñó el papel en su mano.

Este decía casi lo mismo que le habían enviado a Keidan, esto era muy extraño ¿Cómo sabía que eso no era una trampa? En todo caso ¿Cómo llegó él a la casa de Víctor? O más importante ¿Cómo sabía él donde vivía Víctor? La casa incluso era nueva y Víctor se había mudado recientemente.

- ¿Y cómo sé que no estás detrás de todo esto? - empezó a sospechar.

Lo miro con sorpresa y alzó una ceja.

- Bravo Keidan. - su aspecto cambio a una sonrisa. - sabía que tenías algo de inteligencia, lástima que no te servirá de nada.

Lo miró con horror y furia, entonces si estaba detrás de todo esto, dio un paso hacia él para romperle la cara de un puñetazo, cuando de pronto sintió un golpe en la nuca y enseguida todo se volvió oscuro y cayó al suelo.

- Hay que llevarlo adentro, el show está a punto de comenzar. - dijo con una amplia sonrisa.

- Ella tiene la fiebre muy alta, deberíamos hacer algo o no la contará. - dijo el otro.

Suspiró.

- Ve y busca más toallas húmedas, yo llevaré a dentro a este desperdicio. - dijo refiriéndose a Keidan.

Y ambos se pusieron en marcha.

...

Al Keidan abrir los ojos lo primero que vio fue a Víctor y Javier tirados en una esquina amarrados de manos y pies, muy golpeados; lo siguiente fue a Ester también amarrada y muy golpeada. Le costaba mucho mantener los ojos abiertos y sentía un dolor agudo detrás de la cabeza que le impedía moverla demasiado, fue entonces cuando observó que salían gotas de sangre de su cabeza y estaba amarrado a las escuelas, seguramente gracias al golpe que le habían dado.

Siguió buscando desesperadamente por toda la sala tratando de ver a alguien más, pero no la veía a ella, no la veía por ninguna parte ¿Dónde rayos la tenía ese miserable? - se preguntó a si mismo con rabia.

- Víctor. - empezó a susurrar - ¡hey Víctor! ¿Estás despierto?

- ¿Keidan? ¿Eres tú? - levantó la cabeza y lo buscó con la mirada.

- Si ¿Están bien ustedes? - dijo señalando a Ester y Javier.

Enseguida está levantó la mirada.

- ¿Keidan? - preguntó extrañada.

- Escucha Keidan estamos bien, sólo son rasguños. - aseguró Víctor.

- Habla por ti Casanova de cuarta, yo estoy secuestrada y me golpearon ¿En qué mundo esa es la definición de bien? - se quejó Ester.

Entonces fue Javier quién levantó la mirada para fulminar a Ester.

- Si te hubieras callado, no, pero la muy... - respiró hondo. - tienes suerte de que no pueda desatar mis manos y golpear tu fea cara, no me importa que seas mujer. - la miró con furia, pues la mayoría de golpes se los habían dado por culpa de ella.

- Como dije, estamos bien, pero Victoria no, tiene la fiebre alta desde hace más de dos horas y no han podido bajarla. - Les interrumpe Víctor con preocupación.

- ¿Victoria? ¿Dónde está? - preguntó al instante.

- Esta en el sofá de allá - le señaló el sofá grande de la sala, claro que este era imposible de ver para Keidan pues estaba de espaldas al lado de las escaleras donde él estaba amarrado.

- Todo por ese maldito de Nicolás. - dijo con rabia e impotencia.

- Esos malditos, querrás decir. - rueda los ojos Ester.

- ¿Hay otros? - preguntó confundido, entonces recordó que alguien lo había golpeado por la cabeza, pero ¿Quién?

- Keidan ¿Escuchaste hablar del Karma? - se escuchó detrás de él. - dicen que llega tarde o temprano. - se escuchó una risa. - Eso es basura. - se escucharon pasos. - nada se hará por sí solo, tienes que darle un empujoncito.

Esa voz, era imposible para él no reconocerla, la reconocería donde fuera, tantos años juntos, tantos años de amistad. Andrés. Keidan volteo hacia él.

- ¿Tú? - lo miró con dolor. - ¿No te bastó con lo de la fiesta? - dijo enojado. - Eres la peor escoria de la humanidad.

- Quizás por eso fuimos amigos, dicen que las almas reconocen a sus iguales ¿No? jajaja. - se carcajeo. - No te preocupes, de todas formas. - se encogió de hombros. - nadie tiene el alma más negra que tú, aunque lo intentó "amigo" - se paró frente a él y sacó su pistola para luego apuntarme a Javier. - ¿Te gustaría que te lo compruebe?

- ¡Eres un maldito! - grito mientras forcejeaba para liberarse.

- Keidan, Keidan, no te malgastes nunca te vas a desatar. - río con una sonrisa perturbadora - y lo de tu "novia" - hizo comillas con los dedos. - Sólo fue diversión ¿No es cierto nena? - le guiño un ojo a Ester la cual lo miró con odio.

- ¡¡Éramos amigos!! Eres un maldito. - rechino los dientes de furia.

- ¿Amigos? No te engañes, nosotros éramos sólo tus secuaces, hacíamos lo que querías y nos dabas tus limosnas. - dijo con rabia. - Sólo eras un imbécil egoísta que no sabía ver más allá de sus propios problemas. - o ¿Acaso te gustaba ella? Sólo era tu juguete, a mi si me importaba y tú lo sabías, aun así decidiste andar con ella. - Lo dio una fuerte parada en las costillas. - Sólo podía comer de tus migajas, pero no soy como estos lambones a los que llamas amigos, eso se acabó.

- Eso no es cierto, te consideraba un hermano. - Keidan negó con la cabeza.

- Es muy tarde para tus intentos de reconciliación Keidan. - se escuchó la voz de Nicolás. - ya él abrió los ojos y se dio cuenta de la clase de persona que eras. Después de todo ¿no lo exiliaste cuando viste el vídeo? lo desechaste, a tu hermano y gran amigo, lo trataste como basura, vaya amigo.



#189 en Joven Adulto
#3115 en Novela romántica
#944 en Chick lit

En el texto hay: secretos, amor, odio

Editado: 15.01.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.