Cap.: 21

- ¿Nada más que decir? ¿Acaso te quedaste sin palabras? - dijo con burla. - ¿Creías que no lo sabía? El sucio secreto de la familia Justin.

- ¿De qué está hablando Keidan? - preguntó Ester al ver su cara.

- ¿No lo saben? - sonrió triunfante. - yo creí que ustedes eran amigos, no, hermanos, pero al parecer...

- Eso no es cierto. - negó Keidan enseguida.

- ¿Qué no es cierto Keidan? ¿Qué por culpa de tu familia él padre de Victoria está muerto? ¿Qué adoptaron a Victoria para vengarse de los Daniels? ¿Qué tu madre quemó todo un orfanato con una niña dentro para que no descubrieran lo que había hecho? - dijo dejando a Keidan sin palabras. - sí, lo sé todo. - ¿O acaso la mentira es que todo el tiempo supiste el nombre de la madre de Victoria y se lo ocultaste? ¿O que tú los encubriste todo este tiempo?

- ¿Crees que vamos a caer en eso? Sólo tratas de ponernos en su contra. - defendió Javier.

- Jajaja, vaya pensé que conocían la calaña de su "mejor amigo" - los miró con una sonrisa. - o al menos que eran más inteligentes que esto. - los miró con decepción. - me equivoqué.

- Eso fue un accidente, mi hermana también murió en él. - dijo Keidan dolido.

- ¡Es verdad, eso fue un accidente, no los puedes culpar, ni Keidan, ni su familia tuvieron la culpa! - defendió Víctor que si sabía esto.

- Claro, un accidente. - dijo con gracia. - y después de ese "accidente" la familia dio a la niña en adopción ¿No es así Keidan? - preguntó con una sonrisa maliciosa. - la niña que adoptaron los Justin por venganza... A la misma que le hiciste la vida imposible, a la misma que le ocultaron el hecho de que su madre la había buscado - empezó y al final todos quedan sin palabras, fríos como el hielo.

- Dices que esa chica es... - dijo Ester mirando hacia Keidan y al ver que no decía nada le empezó a doler el pecho, ella había contribuido con todo eso, y ¿aun así Vitoria la había ayudado?

- Esa chica es Victoria, a la que ustedes le hicieron la vida imposible. - dijo con una sonrisa, haciendo que todos en la sala se quedarán en silencio. - ¿Ya no tienen nada que decir? ¿Se quedan todas en silencio? ¿¡Ya no hay más defensores!? - grito con enojó. - ¿Aún es su amigo? Él sólo los utilizó a todos.

Esto hizo que todos mirarán a Keidan, quien a su vez miró a Nicolás con odio.

- ¿Por qué haces todo esto? - preguntó con el ceño fruncido.

- ¿Sabes por qué? - se pone serio. - Eso es porque había una familia más en ese accidente. - dijo sorprendiendo a todos. - mis padres iban a buscarnos ese día, pero nunca llegaron, nunca llegaron porque tu familia los mató también en ese accidente. - dijo dolido. - yo y mi hermana fuimos llevados a un orfanato, y después del tiempo una pareja despidió adaptarme a mí, pero no a mi hermana. - Eso le dolía y al mismo tiempo lo enfureció. - estaba bien, yo podía visitarla siempre y prometí sacarla de allí. - paso sus manos sobre su rostro - pero el orfanato se incendió y jamás la encontraron, pero sabes de lo que me di cuenta el mes pasado. - Lo miró con odio y rabia. - la niña que dicen murió en ese incendio. - una lágrima se deslizó por su rostro. - está viva y se llama Victoria Justin y mi hermana nunca estuvo desaparecida ¡¡¡Tú madre la uso como un maldito sebo para cubrir sus huellas!!!

Esta noticia dejo a todos atónitos.

- Sabes que es lo mejor de todo, es que yo venía sólo a vengarme por lo que me había hecho en durante mis años de escuela, pero me enamoré de una chica y ella me contó algo que me pareció muy anormal en su familia, por eso la investigué, porque quería ayudarla. - trago en seco. - quien diría que al ayudarla a ella me estaría ayudando a mí mismo. - limpió con rabia la lágrima en su mejilla.

- Yo no... -trató de decir Keidan.

- ¿Qué? ¿Me tienes lástima? es mejor que te la tengas a ti mismo, porque les hare pasar por lo mismo que pase yo. - Le dedicó una amplia sonrisa.

Keidan lo miró sin saber que decir.

- ¿Qué tu madre no te lo contó? - lo miró con los ojos muy abiertos. - ¿Qué a la niña que usó para que dejaran de busca a Victoria, la niña a la que cremó dentro de ese orfanato era mi hermana?

- Yo no sabía nada, te lo juro. - aseguró

- No entiendo de qué estás hablando - interrumpió Ester - ¡Yo no te conocía y siempre he estado en el mismo grado que Keidan! - definitivamente no recordaba haberlo visto nunca.

- ¡Eso es verdad! - dijeron Víctor y Javier al unísono.

- Quizás no recuerdes bien a Nicolás, tal vez recuerdas mejor a Jeison, el menos cero, al que todo le resta ¿No es así? - dijo haciendo que los ojos de Ester se abrieran con fuerza.

- ¿Jeison? - lo miró sorprendida y conmocionada, sin saber que decir ¿su Jeison?

- El mismo que viste y calza, sorpresa querida. - alzó una ceja. - ya volví. - Le dedicó una sonrisa. - Todos ustedes fueron quienes lo ayudaron a dañar mi vida y todos ustedes la van a pagar, fue lo que pensé cuando llegué aquí, pero no pensé que eran peor de lo que pensaba, claro, de tal palo tal astilla, era obvio que las matas de limones no podían dar manzanas, aunque parecían manzanas siempre serán agrias como el limón.

- ¿Ahora qué dicen de su súper amigo? ¿También darían la vida por él ahora? - pregunta Andrés con gracia.

- Yo... En verdad lo siento Jeison, nunca quince lastimarte, yo... - dijo con lágrimas en los ojos y la voz temblorosa Ester.

- ¡¡Tú cállate pe*ra!! - la interrumpe. - !!No eres mejor que estas escorias!! Tú eres peor, tu eres mucho peor, porque eras mi mejor amiga, yo siempre estuve para ti, pero ¿Qué? Cuando más te necesite te fuiste con este miserable, me diste la espalda. - dijo dolido. - Todos ustedes merecen una bala - sacó su pistola. - la única razón por la que aún no los he matado es porque quiero verlos sufrir antes, morir lentamente es lo que ambos merecen y sus padres sufrir por siempre.