Lucy
Sí, tal vez fui a detención durante una semana pero haberme ganado el apodo de "La ama de la venganza" por colocar mini bombas de polvo pica pica en los casilleros de todos los populares, valió la pena. Claro, mis hermanos me ayudaron a colocarlos mientras que yo casi solo me encargué de decir en cuales poner y en cuáles no. Ellos me odiaban desde entonces, sin embargo, se lo merecían y no me importaba si les agradaba o no. Al menos eso los hizo entender que no debían meterse conmigo.
Bueno, no fui la única en detención. Todos mis cómplices también lo estuvieron, que en este caso fueron Nicolás, Tere, Alex y Tomás. Derek y Rubén ayudaron pero, a ellos no podían hacerles nada. No puedo creer que justamente ese fin de semana que nos metimos de contrabando, las cámaras ya estaban en funcionamiento. Según papá cuando fue a reclamar con el director éste les dijo que no estarían encendidas hasta varios días después y nos cacharon. Al menos mientras estábamos solos en el salón escribiendo un ensayo diciendo las razones por las cuales la venganza es mala, mis hermanos mayores nos metieron comida por la ventana y nos disgustamos de ella a la vez que hablamos de cualquier cosa y nos reíamos. No entiendo por qué razón nos encerraron y nos dejaron solos. Ni siquiera nos pidieron ese bendito ensayo al final. No obstante, estar los cuatro ahí chisteando y burlándonos de todos fue de lo mejor y así fue durante toda esa semana.
Desde entonces ya ha pasado tres semanas. No ha ocurrido mucho, creo que lo más interesante que ocurrió es que los padres de Tere están oficialmente divorciados con la custodia compartida de mi mejor amiga hasta cumplir los dieciocho. También, ya se encontraran en casa de Lance. Gisele está muy feliz de ahora tener una compañera de cuarto y Chris dormía en la habitación que antes era de invitados ya que se negó a compartir espacio con Nicolás. No porque no le agradaba el chico, era porque quería su privacidad para... bueno, estar con chicas. Es un picaflor, aunque esto no le agradaba del todo a Lance así que le advirtió no llevar a nadie cuando él o Gisele se encontraban en casa.
Todos se habían acomodado muy bien y no sé si ahora me agradaba completamente visitar a mi mejor amiga y que Nicolás estuviese presente o cerca. Le tengo cierto grado de confianza al chico pero, a veces necesito hablar con Tere cosas chica a chica y no sabía si él podía escucharnos ya que su habitación se encontraba al lado de la de Gisele. Así que me daba algo de temor que escuchase. Ya después de eso, todo estaba bastante decente en mi vida.
Mi celular comenzó a vibrar mientras yo veía una película, le puse pausa y lo levanté "llamada entrante de Ojos Zafiro" leí en la pantalla. Sí, le cambié el "Nico el odioso" porque sí.
-hola, no esperaba llamada tuya. -dije en cuanto descolgué y coloqué el teléfono en mi oído.
-sí, lo sé es solo que... necesito tu ayuda.
-¿Qué necesitas? No prometo al cien por ciento ayudarte. -le dije mientras me recostaba en la cama.
-mira, Charlotte sigue en la oficina y no llegará hasta en la noche y Tere salió hace horas y necesito ayuda femenina... para Gisele. -habló rápidamente.
-¿qué pasa? ¿Qué tiene? -le pregunté preocupada.
-digamos que... está en una crisis y yo también estoy entrando en una.
-¿crisis de qué?
-¿cómo decírtelo? -comenzó a hablar y se quedó en silencio un par de segundos y pude imaginarlo rascándose la nuca. -pues... necesita toallas sanitarias. -finalizó de decir y llevé mi mano a la boca sorprendida.
-No me digas que le llegó su primer periodo.
-Sí y no sé qué hacer. Jamás he lidiado con algo así. Le duele el vientre y me está gritando desde el baño que haga algo. -habló con un tono desesperado.
-tienes que ir acostumbrándote a ello, es normal. Busca entre las cosas de Tere, creo que guarda sus toallas sanitarias en su mesita de noche. Sino, revisa en el primer cajón de su cómoda, más te vale no tocar su ropa interior. Llegaré en un rato y prepárale un té de manzanilla para que le reduzca el dolor. -le avisé mientras me paraba de mi cama en busca de un par de zapatos.
-Gracias Lucy, no tardes ¿sí? -me pidió aliviado por lo cual reí.
-Estoy allá en un momento, tú cálmate ¿sí? Bye. -dije y colgué la llamada.
Después de ponerme mis tenis, entré a mi baño y tomé mi cajita de pastillas para cólicos. Bajé las escaleras y corrí a la cocina en busca de chocolate negro y frituras. Sabía que las necesitaría.
-¡Derek! ¡No me importa si estás ocupado, te necesito ahora! -le grité. Es el único de mis hermanos mayores que se encuentra en casa, por lo cual es el que puede llevarme en su auto.
-¡¿qué quieres?! -gritó apareciendo.
-Necesito que me lleves a casa de Nicolás. Es una emergencia. -le dije y éste rodó los ojos.
-No puedo, necesito estudiar, tengo mi primera prueba esta semana y no debo desperdiciar ni un segundo. -me dijo cruzándose de brazos.
Habia olvidado que él ya había comenzado la universidad. Fue aceptado hace poco y decidió estudiar Biología, lo cual al principio me pareció extraño cuando lo anunció. Siempre creí que estudiaría algo que tuviera que ver con física o química ya que todos los años sobresalió en esas clases durante el colegio. Bueno, sobresalía en casi todas, sin embargo, su fuerte estaba centrado ahí. Sí, tal vez tiene cara de tonto y es perezoso, pero el tipo es muy inteligente a pesar de todo. Al final, se fue con Biología y según él le iba gustando mucho.
-Entonces préstame tu auto. Supongo que no vas a salir. -le dije y lo observé.
-no.
-¡Derek! ¡Esto es de vida o muerte! Debo de llevarle unas cosas a Gisele. -le dije y señalé la bolsa.
-dime que al menos has conducido una vez en el último año. -preguntó mientras apretaba el puente de su nariz con los dedos.