CAPITULO 24 (PREMIUM BONUS)

La noche sagrada era tan serena y tranquila que, mientras la nieve caía sobre la ciudad, parecía que todos los sonidos habían desaparecido. Tal vez por eso quería que él escuchara cómo me sentía, todos los sentimientos que había guardado en mi corazón. Extendí mis brazos y lo abracé suavemente, vertiendo todo mi amor en él.

MC- Lamento haber tardado tanto, Vlad. Pero... finalmente te encontré.

VLAD- ......

Escuché a Vlad jadear. Mis ojos ardían con lágrimas.

(Pasamos tanto tiempo juntos desde aquel primer día nevado en que nos conocimos. Y aun así...)

MC- Lo siento mucho, no me di cuenta a pesar de que pasaste tanto tiempo conmigo. Te lastimé tanto.

Él sacudió la cabeza, su sedoso cabello plateado acariciando mi mejilla helada.

VLAD- No tardaste mucho. Me encontraste ese día, hace tanto tiempo. Y... Podría esperar una eternidad por ti.

MC- ¡......!

VLAD- Pero tal vez solo fuiste manipulada por el destino que yo creé, MC.

MC- ¿Qué?

VLAD- Tal vez conocerme desvió tu propio destino, y esa es la única razón por la que me encontraste en el pasado.

Tuve una extraña sensación desde que me di cuenta de que la mujer en el retrato sin rostro era yo. ¿Por qué no me dijo la verdad cuando me conoció por primera vez?

(¿Tal vez tenía miedo de que al decirme la verdad, alterara mi destino y lo dirigiera hacia donde él quería?)

Él tenía grandes ambiciones de cambiar el futuro, pero dudaba en cambiar el destino de una sola persona. El amor de Vlad era increíblemente retorcido y moralista, pero siempre era tan honesto y genuino que me hacía querer llorar. Vlad vivía con una inocencia infantil aún en su corazón, y yo adoraba eso de él.

MC- No, Vlad. Tu pasado estaba muy lejos en el futuro para mí.

VLAD- ......

MC- Elegí regresar al pasado para encontrarte. Elegí mi propio destino, y por eso estoy aquí ahora mismo.

Sus largas pestañas estaban cubiertas de nieve, temblando ligeramente.

VLAD- Hay algo que he querido preguntarte desde que te perdí de vista aquel día.

MC- ¿Qué es?

VLAD-Estabas a punto de decir algo antes de que los gritos afuera te interrumpieran. Siempre he querido saber qué era.

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MC- ...Voy a decir algo un poco extraño. ¿Me escucharás?

VLAD- ¿Hm? Claro. ¿Qué es?

MC- ...Pronto vas a experimentar algo muy, muy triste. Y estoy segura de que muchas otras cosas tristes sucederán en el futuro. Desearía poder quitarte toda tu tristeza. Pero no puedo, por más que lo desee.

VLAD- ¿....?

MC- Pero... No estás solo.

VLAD- ......

MC- Te esperaré, dentro de mucho tiempo... más allá de la eternidad. Así que cuando llegue ese momento...

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Desde mi perspectiva, lo había dicho hace menos de una hora. Pero para Vlad, había esperado tanto tiempo que prácticamente era una eternidad. Había esperado tanto por mí que incluso había olvidado mi rostro. Así de mucho tiempo había estado esperando este momento.

(Finalmente encontré las palabras que quería decirte. Así que por favor, déjame contarte todo lo que siento.)

Me alejé suavemente y lo miré a los ojos mientras sujetaba sus manos ensangrentadas.

MC- Te estaré esperando por mucho tiempo a partir de ahora, más allá de la eternidad. Así que, cuando llegue ese momento... cuando nos hayamos reencontrado, busquemos juntos la manera de superar tu tristeza.

(No voy a dejar que sufras solo en tu dolor nunca más.)

MC- Vamos a encontrar una forma de proteger el futuro del mundo juntos, ¿de acuerdo?

(No quiero que cargues con la responsabilidad de proteger el mundo tú solo.)

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¡Tienes la sangre de los Originales en ti! Eso significa que eres especial, como un dios que puede gobernar el mundo.

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A Vlad se le había dicho eso desde que nació, y recibió un trato especial durante toda su vida. El mundo había sido cruel con Vlad y lo había obligado despiadadamente a tomar decisiones. ¿Castigaría a los humanos que mataron a su familia, o los perdonaría? ¿Cómo guiaría a los humanos que habían arruinado el mundo? Ser llamado un niño divino parecía predeterminar su destino.

(Pero Vlad, tú no eres un dios.)

Llevaba el peso del mundo sobre sus hombros, ocultando su tristeza en su bondadoso corazón, y trataba de ser un dios. Veía a los humanos y a los vampiros como las mismas criaturas, y deseaba que se amaran entre sí. Ese era su verdadero deseo, pero seguía siendo pisoteado, una y otra vez.

(No dejaré que vuelva a suceder. Me quedaré a tu lado y te protegeré con todo lo que tengo.)

MC- Vivamos uno al lado del otro, juntos. ¿De acuerdo?

VLAD- Juntos...?

MC- Sí. No podemos cambiar el pasado. Pero creo que cambiar el presente puede cambiar el futuro. Así que, por favor... busquemos una manera de cambiar el futuro sin tener que lastimar a nadie

Sabía que era optimista. Porque, honestamente, no tenía idea de cómo podríamos hacerlo.

(Pero lo digo con todo mi corazón, y tengo esperanza.)

MC- Sé que puedo encontrar el futuro que deseas. Incluso si pierdes la esperanza, iré y lo encontraré una y otra vez. ¡Deberías saber mejor que nadie que soy experta en encontrar cosas!