Volver a creer. #1

Capítulo 33.

Capítulo 33.

 

—Dime cuando y donde debo ir con mi bate de beisbol.

Comienzo a reír y empujo levemente a Ethan mientras seco mis lágrimas.

—En todo caso sería más divertido rayar su auto.

—O quemar su casa —Apunta él, se acerca para abrazarme por lo hombros—. Tranquila Raizel, ese idiota nunca te mereció. Mira el lado positivo, ahora tienes a tu sexy Jefe así que... Que Keith se joda.

¿Para qué necesito una mejor amiga si tengo a Ethan?

Dolida por las palabras y secretos de mi hermano llamé a Ethan para que me consuele, no quería ser una molestia para Cayden y quería desahogarme con mi confidente.

—Duele saber que nunca le importe, él se llevó todas mis primeras veces —Suelto un suspiro—. Odio el haber sido tan ciega.

—Cariño tú estabas enamorada, no ibas a imaginarte que la rata esa iba a ser tan rastrera.

—No es eso, si Dylan no hubiese mencionado nada por error yo seguiría comprometida con ese imbécil.

Y era la verdad, no iba a dejarlo sin una razón pero por un lado me alegro de haberme enterado de eso aunque me siento traicionada. Esto me abrió los ojos y también me hizo darme cuenta de mis verdaderos sentimientos hacia Cayden.

Se está volviendo demasiado tarde pero como que eso no nos importa ya que seguimos hablando. Ethan me pone al corriente de que conoció a un sexy hombre "según sus palabras" interesante en un Club pero que no era nada serio. Me alegraba ver a mi amigo con ese brillo en los ojos, se lo notaba ilusionado y solo esperaba que aquel sexy hombre no sea un idiota y juegue con mi amigo.

Cuando ya mis ojos comenzaban a pesar demasiado Ethan terminó yéndose para su casa. Yo realmente no tenía sueño por lo que llamé a mi hermana para contarle sobre el comportamiento de nuestro hermano menor. No le conté sobre las drogas pero sí de lo mal que estaba comportándose y ella me dijo que es debido a su edad ¡Pero no! Quise gritar. No sabía si hacía bien en cubrir a mi hermano pero algo dentro de mí me decía que lo dejaría pronto o al menos eso quiero creer yo.

Los días pasaron de manera rápida, Cayden se estaba comportando tan lindo conmigo que parecía irreal. Keith intentaba comunicarse conmigo pero yo no quería enfrentarlo no tenía las fuerzas para hacerlo.

Ayer llegó a mi trabajo haciendo un escándalo en la parte baja, no quise bajar y tampoco Cayden quería que lo hiciera así que los guardias le mostraron la salida y no fue para nada de manera amable.

Hoy día domingo, Cayen me invito a salir a almorzar. El día se prestó como nunca, y salir con él fue simplemente perfecto. Luego de eso me llevó hasta su casa que es donde me encuentro en estos momentos. Él salió por algo para preparar la cena ya que en su casa no había nada con lo cual él pudiera cocinar. Exacto, Cayden Harrison cocina, me contó que en Estados Unidos al vivir solo tuvo que aprender a cocinar ya que no podía vivir de comida enlatada. Me saque la lotería.

Estaba paseando por su habitación cuando una agenda en su mesita de luz me llamo la atención, sabía que no debía tocar sus cosas pero en verdad esa agenda roja llama la atención. Es demasiado femenina para Cayden.

Cogí la agenda abriéndola en la tercera página.

"Mamá volvió a dejar que aquellos hombres entraran en casa. No entiendo cómo puede acostarse con ellos siendo que papá acaba de morir hace poco..."

Abro los ojos sorprendida  ¿Qué mierda se supone que es esto? Confundida busco en otras hojas más.

"Él hombre de la moto volvió a venir en casa hoy, cerré la puerta de mi habitación con llave y hace unos minutos vino a golpear la puerta, quería entrar y yo desesperada me acerque hacia la ventana, si lograba abrir la puerta prefería mil veces saltar por la ventana que quedarme con ese drogadicto"

Mi pecho se contrajo al leer, tenía una idea de quien era la que escribía esto, busque otra página.

"Hoy comencé a cortarme las muñecas, dicen que es liberador, pero yo no sentí nada, ni dolor, ni placer. Los cortes fueron leves, nada de otro mundo pero por alguna razón lo quiero volver a hacer."

"No paro de llorar, Diana y sus amigas me hacen la vida imposible en la escuela, crean rumores sobre mí, nadie me habla, a nadie le importo, si no fuera por Cindy ya hubiese acabado con mi vida antes"

Jadeo y siento como las lágrimas caen por mi rostro, no soporto esto y voy al medio.

"Cayden, Cayden Harrison, así se llama. El nombre le va, tiene toda la pinta de mujeriego y no lo quiero cerca"

Abro los ojos sorprendida.

¿Cayden siendo mujeriego? No lo veo en esa faceta.

"¡Besé a Cayden! Estoy completamente loca, yo debía alejarme no besarlo. Estoy tan confundida. Pero no pude contenerme, no cuando él no me juzgo como los demás."

"Qué Cayden sea mi novio es lo mejor que me pudo haber pasado en el mundo, ser su muñeca me llena el alma de una manera que nunca creí posible. Lo quiero tanto y lo mejor es que él también me quiere, no hay nada mejor que esto"




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.