Capítulo 39 Mi Isabelle

Al dia siguiente el medico vino a primera hora, mire el reloj y eran las ocho de la mañana,me dijo que estaba bien, que en un rato me daria el alta, tengo unas ganas locas de marcharme que no veo el momento, el tener alli a Taylor, me agradaba haber dormido como un bebe toda la noche gacias a él, tengo que reconocer que Taylor me gusta, no lo puedo negar es muy atractivo como dice mi amiga Victoria es un bombomcito. Le miré para preguntarle.

—¿Pero no vas a ir a trabajar, sabes que hora es? Amelia se enfadará contigo, te puedes ir, estaré bien no te preocupes, tengo que esperar que me den el alta, y despues ire a trabajar.

—¿Tantas ganas tienes de que me vaya?¿Tal mal, has estado commigo? Por eso no te preocupes he estado hablando por telefono con Amelia, mientras el medico hablaba contigo,le dije que el tiempo que he perdido lo recuperaré, saldré más tarde de trabajar, y le ha parecido bien, me ha preguntado por ti, me ha dicho que te puedes tomar unos dias ,que no hay problema. Yo le contesté que tiene toda la razon, que ahora seria bueno que te tomarias unos dias de relax con tu hijo.

—No creo que sea buena idea Taylor, este proyecto lo enpezamos juntos y juntos lo terminaremos, no puedo estar sin hacer nada me da por pensar, y eso es precisamente lo que no quiero hacer, por eso prefiero trabajar.

Le miré sonriendo,

—He dormido muy bien a tu lado, y sabes que yo te quiero mucho. Se lo solte, con cariño.

Se levantó del sillon y se acerco a mi, yo estaba sentada encima de la cama, me cogio de las manos y...

Me dejo con la boca abierta.

—Sabes Isabelle, desde que nos presentaron, senti algo dentro de mi, no se como explicarme, una conexión especial .Es la primera vez que me pasa, no vayas a pensar que soy un atrevido, eres una chica como yo sencilla, una madre maravillosa y guapisima, yo tambien te quiero, por eso me gustaria que...

En ese momento entraron mis padres y Taylor se levantó corriendo.

Se nota que Taylor es timido, me salvé, por la campana pensé, para mí misma..

Ethan se tiro encima de la cama de golpe para abrazarme.

—Te he hechado de menos grandullón, anda dame un beso.¿Hoy no vas al cole, Ethan? ¡Mira que hora es, vais a llegar tarde!

Estaba segura, que era idea de mi padre.

—¡Hola buenos dias chicos!¿Que tal habeis, pasado la noche? He pensado hija ,que por un dia que falte al cole no pasa nada, ya sé,que tú, opinas todo lo contrario, llamé temprano al cole para decirles que se encontraba indispuesto , que mañana iría, es una mentira piadosa Isabelle, no es para enfadarse, tú tranquila.

—Bueno yo...ahora que han llegado ,tengo que irme, paso un momento por mi casa y voy a la oficina, y tú Isabelle, ya sabes lo que te he dicho, aprovecha ahora que puedes, yo te tendré informada, y cualquier cosa te llamo, o desde casa con el portatil puedes ,si quieres ayudarme, por que conociendote vas a querer ir, y no quiero, prometemelo Isabelle.

No tenia muchas ganas de ir al trabajo, y ver como me miraban todos.

—Esta bien, trabajaré desde casa, hablamos en un rato, ve con cuidado por favor, ¡adios Taylor!

Ethan se lanzó a sus brazos y Taylor lo cogio, la forma de tratar a mi hijo ,es una de las cosas que más me gusta de él.

—Hasta pronto Taylor, y muchas gracias por cuidar de mi princesa.

Me fije y mi padre le guiño un ojo a Taylor, él le sonrio, ¿Que se traia mi padre con Taylor?

Conociendo a mi padre ya lo estaria viendo como un futuro yerno, y si ,tengo que reconocer que es perfecto, yo tengo que hablar con mis padres, hay algo que les tengo que pedir pero... Me da muchisima verguenza, jamás les he pedido nada, y ahora...

Pero el miedo que siento es superior a mi, no puedo hablar delante de Ethan.

El médico tocó la puerta, y entró.

—Bueno Isabelle puedes irte, aqui tienes el papel del alta, te recomiendo, que despues de lo que has pasado tengas un tiempo de reposo y tranquilidad, seria bueno que irias a un psicólogo, puedes tener secuelas de ello, es un trauma y necesitarias ayuda y hablar te ayudará, a sobrellevarlo mejor, te lo aseguro. Bueno Isabelle, espero que te vaya bien.

La idea no me fascinaba, por ahora no iria, no soy de psicologos.

—Por supuesto doctor.

Lo único que queria era salir de alli cuanto antes mejor, y dandolé la razón, nos fuimos.

Montamos en el coche de mi padre, me acordé que no tenia telefono, la policia no dio con el. y entonces le pedi a mi padre, que me dejará, en el centro comercial para compar uno.

—Estamos cerca del centro comercial, podemos aprovechar en tomarnos un cafe calentito, hace un poco de frio, y tu Ethan un cola cao, asi te pondras fuerte como popeye, ¿Te acuerdas? Anoche vimos popeye, él se puso fuerte de comer tantas espinacas Ethan, ya sabes la verdura y el pescado son muy buenos ,asi te pondras más fuerte que él.

— Abuelo, ¿Si como muchas verduras, me voy a poner como popeye?

Me empece a reir, no podia, que gracioso es cuando quiere decir algunas palabras que no sabe pronunciar, me dolia el estomago al reir.

—Se dice popeye hijo,

— Eso, mamá pipoyo. Mami que no sabes decirlo.

Entramos en el centro comercial y directos fuimos a la primera tienda de móviles que hay, entre y empecé a mirar, los precios eran carisimos, entre en otra más adelante ,enfrente hay una cafeteria, que tiene unos columpios para los niños, le señalé a mi madre.

—Mira mamá , alli podemos sentarnos ,tiene una terraza y los colunmpios, podeis ir mientras yo compro el télefono. Vengo ahora.

—Richard ve tu, com el niño, yo me quedo con Isabelle, terminamos enseguida.

Mi padre cogio de la mano a Ethan y se lo llevó para la cafeteria, nos quedamos mi madre y yo solas.

—Dime Isabelle, ¿Qué es lo que te pasa? Te conozco muy bien y sé, que algo te pasa.

Yo no sabia por donde empezar.

—Mamá sabes que nunca os he pedido nada, siempre me he valido por mi misma pero... Ahora volver a esa casa...