«Ama sin medidas porque el amor no tiene fin», una muy buena invitación que nos trae los escritos de Jullianna. Es mágica en cada detalle, lo primero a destacar es la increíble manera en que la autora consigue describir los personajes, lugares, momentos para que podamos imaginarnos tal y como en la idea original. Y lo que más me llamó la atención fue que no hay palabras de más ni de menos. Yatziri, la princesa maya, es sin duda una representación ideal de Jullianna, quien es soñadora y valiente, y le encanta ayudar al prójimo.
Debemos amar hasta que duela, como lo demuestra Josefina, que decide nunca más pisar Tierra y olvidarse de sus hijos y el trabajo al cual era adicta para ver a su amado Francisco que ya no vive. Su decisión fue admirable por querer atravesar el portal sabiendo que nunca más volvería a la normalidad, cosa que no sería posible si ella no tuviera ese corazón noble, lleno de luz y amor.
Como ya había dicho Jullianna, cada uno de nosotros es único, todos tenemos una esencia que es imposible de imitar. Cada momento de nuestra vida pasa por algo, TODOS tenemos nuestros altos y bajos y cada uno actúa de una manera diferente. Por ejemplo, Yatziri se convirtió en una mujer loba para no casarse con un hombre que ella no amaba, porque cuando el corazón no quiere, no es para suceder. Y así, cada uno actúa de maneras diferentes y deberíamos empezar a respetar a los demás, cosa que en este mundo ya no ocurre.
Este libro te gustará muchísimo, una vez que empieces a leer ya no querrás parar porque está hecho con amor y dedicación, se nota en los más mínimos detalles. En este libro encontrarás partes emocionantes e interesantes, te hará sentir diversos sentimientos al mismo tiempo como amor, tristeza, decepción y preocupación.
Giovanna Ramirez