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Me encontraba durmiendo tranquila hasta que suena esa molesta alarma, siempre eh sido muy floja para levantarme y para ir a la preparatoria no era la excepción. Me levanté sin ganas, es que quién en su santo juicio se levanta un lunes temprano, en fin, me di una ducha de aproximadamente 10 minutos, salí y me dirigí al closet por mi uniforme, era bonito la verdad, constaba de una falda gris tableada un tanto corta, una camisa blanca, con un saco y chaleco de un azul marino ah y también una corbata del mismo azul, peine mi cabello y lo deje suelto, después me puse un poco de maquillaje, revise que todo estuviere listo, agarre mi celular, mi mochila y salí de mi habitación para ir a desayunar.

Comúnmente siempre desayuno sola, mis padres siempre trabajan, mis padres son dueños de una agencia de modelaje, son muy conocidos, eso es algo que les admiro, pues han luchado por ser unos de los más reconocidos de Corea, pero también algo que les admiro es que a pesar de tener mucho trabajo siempre intentan darse un tiempo para mi, de echo me llevo muy bien con ellos. Gracias a mis padres a amo la moda y mi sueño es ser modelo, por eso quiero estudiar algo relacionado con la moda y el modelaje.

— Buenos días Minju, el desayuno está listo- dice mi nana 

— Buenos días, gracias por a la cocina- sonreí

Tome el desayuno y después lave mis dientes, aún era algo temprano así que decidí sentarme un rato a comer Instagram jaajkd. Después de unos minutos llega Soobin, mi mejor amigo

— Min, Soobin ya está afuera, anda que se hace tarde- dice mi nana sonriendo

— Se me pasó el tiempo rápido, parece que apenas me sente ahah- dije riendo— Nos vemos luego nana- dije saliendo de casa

— Buenos días Minju- dice con una sonrisa

— Buenos días joven Soobin- dije riendo 

— No me llames así, sabes que no me gusta- dijo con un puchero, realmente me gustaba molestarlo con eso

— ¿Cómo te sientes pequeña?, ¿Estás nerviosa?

— Yo nerviosa puff, claro que no- dije temblado de los nervios, realmente si me encontraba nerviosa— ¿Algún consejo? 

— Ajá si, tus manos dicen lo contrario, pero bueno Min, tranquila todo va estar bien, pero recuerda lo que siempre te decimos Kim- sonrió

— Si entiendo a que te refieres, yo no tengo la culpa de que me guste la moda y ver como los demás visten it's my passion y ya tu también sabes lo otro- le sonreí

— Entiendo, pero ten cuidado con las personas que conoces, sabes que muchas saben fingir muy bien y sabemos que muchos buscan algo en especial, solo cuídate, ¿Vale?- me dijo y tenía mucha razón 

Soobin era un gran amigo, el le prometió cuidar de mi siempre a mi padre, por eso casi siempre o mejor dicho siempre estamos juntos, muchos piensan que somos algo más que amigos pero la verdad es que solo nos llevamos muy bien.

— Llegamos- dijo Soobin regalandome una sonrisa

— AAH! que nervios, ¿Me llevas a mi salón?- dije haciendo un puchero

— Bien, vamos pequeña- dijo con una sonrisa y yo asentí, ambos bajamos del auto y nos dirigimos a la entrada, mientras caminábamos sentía muchas miradas puestas en nosotros y uno que otro rumor, lo sé, yo escucho todo porque tengo orejas de Dumbo, no es cierto pero si escucho muuy bien 

( Ahí viene la niña de papi)

(¿Soobin es su novio)

( Tenia que llegar esa)

Escuché esos y otros más, nunca me ha gustado que hablen de mi sin conocerme, bueno a nadie le gusta, ¿Verdad? Me choca que me vean solo por ser hija de los Kim, siempre eh echo todo para que me vean por lo que soy. Desde pequeña no tenía muchos amigos, nunca invite a mi casa a nadie porque una vez escuché a una chica decir: 

"Si Minju me invita a su casa no iría, seguro solo nos presumirá lo que tiene"

Estaba tan metida en mi mundo hasta que Soobin hablo 

— Kim llegamos, ahora te dejo, me tengo que ir a mi salón, cualquier cosa me mandas mensaje, nos vemos en el descanso- se fue dándome un beso en la frente

—Bien, tu también cuídate, Suertee!- dije sonriendo

Entre al salón y al instante sentí las miradas de los que ahí se encontraban, trate de ignorarlas y tome asiento junto a la ventana y me puse a ver Instagram, unos minutos después me llegó un mensaje de Soobin

—¿Todo bien?

—Si todo bien, ya sabes lo mismo de siempre

— Ignoralos pequeña, llegó el maestro, te veo luego

Ya no conteste porque igual ya había llegado el maestro

— Buenos días chicos, por favor empiezen a presentarse, empezamos por aqui- dijo indicando el orden 

Pasaron algunos chicos, había una mezcla de todo, algunas chicas tenían una voz muy chillona y era un molesto para mis oídos, cuando iba llegando mi turno me puse más nerviosa y las manos empezaban a temblarme, AAAAH, LLEGÓ MI TURNO, ¿QUE HAGOOOO? Me puse de pie y...