CAPÍTULO 26

Eli POV 

¡Le gustaba! ¡Le gustaba! ¡Le gustaba!

 Mi mente repetía una y otra vez, mientras sentía sus labios sobre los míos. 

¡No podía creerlo! 

Después de unos largos minutos saboreando de su boca, no separamos. Observé su rostro y una hermosa sonrisa se dibujó en el. 

— Eres hermosa— Dijo, mientras acariciaba una de mis mejillas con su mano. Al instante, sentí como me sonrojaba. No estaba acostumbrada a sus cumplidos. —  Y más aún cuando te sonrojas. 

Me sentí avergonzada, no podía soportar tanta ternura. Me giré para darle la espalda — No digas esas cosas Liam, me sonrojas aún mas. 

Liam río y fue como escuchar una perfecta melodía de Beethoven. Tiró de mi mano que hizo que quedara cerca de su rostro. 

— Tú me gustas, yo te gusto y ¿Ahora qué Liam?— Porque la verdad no sabía ¿Que iba a pasar? Esto ya había sucedió antes y para Liam solo era un juego. No quería eso de nuevo, así que lo mejor era aclarar las cosas. 

— Pues lo que sucede cuando dos chicos se gustan — Liam se sentó en su cama, mientras se colocaba más cerca. Tomó mi rostro entre sus manos — Elizabeth Anfield — ni siquiera me imaginaba que supiera mi nombre — ¿Quieres ser mi novia? 
 

¡Un paro cardíaco! Eso sentí al escuchar sus palabras, mi corazón se detuvo. Sus labios chocaron con los míos y fue como si un desfibrilador revivía mi corazón. — No se supone que debo de constestar antes la pregunta. — Dije mientras me separaba de él, sonrío y nuevamente me atrajo hacia él, Me abrazó por la cintura. Estaba a punto de responder cuando la puerta de su habitación nos anunció que alguien entraría. Me separé de Liam rápidamente. 

— Eli, me alegras que aún estes aqui. — Ross entró por la puerta — Solo querá agradecerte y decirte lo feliz que me siento que nos acompañes al viaje junto a Liam. 

— No hay nada que agracer Ross, además creo que fue fundamental que hablaras con mi padre. 

Ross estaba tan contenta cuando le di la respuesta positiva ante su propuesta. Me sacó de la habitación para seguir platicando del viaje, ni siquiera sabía a que lugar iriamos. Además ya no pude despedirme de Liam ni darle una respuesta. 

Mi madre pasó a recogerme a casa de Liam, ya que necesitaba que lo acompañara para hacer unas compras. 

— ¿Qué tal va todo con las terapias? 

— ¡Muy bien mamá! Liam al fin pudo estar de pie como cinco segundos. Me sentí realmente feliz por el y no te maginas lo feliz que el estaba. 

— Aaaa! ya veo y ¿Qué tal tu relación con él? 

No iba a contarle a mi madre lo que estaba pasando con Liam, ya que si se lo contaba iba a prohibirme seguir con el tratamiento de Liam. Mis padres siempre eran sobreprotectores y en esos casos eran muy estrictos e incluso podía prohibirme ir al viaje. 

— Mejor que nunca, creo que ya somos amigos. 

— mmmm Espero que solo sea eso. 

— Si mamá solo es eso. 

Después de las compras en el supermercado, llegamos a la casa y preparamos juntas la cena. Mi madre me contó sobre su día y estuvimos charlando sobre mi avance en la escuela y mi solicitud a la universidad. Queria ser una terapeuta profesional, así que iria a la universidad del Estado la cual solo esta a dos horas de casa. 

Sandy y Samuel también irian a la misma universidad, por lo que estabamos viendo la posibilidad de rentar un apartamento para los tres, eramos cuatro con la idea original, pero creo que Angy ya no estaría tomada en cuenta. 

Después de una cena en familia, subí a mi habitación y avance en las tareas. Quería tener mi mente ocupada y no pensar en los besos con Liam, además sobre la pregunta de la cual aún no le daba respuesta. 

Mi móvil sonó con un nuevo mensaje

Liam, 

Mañana paso por ti preciosa, iremos junto a la escuela 

Mis alarmas se encendieron. Estaba nerviosa, nunca me habia sentido así ante un chico. Todo esto era nuevo para mi, estos sentimientos nunca los había sentido por nadie y de cierta forma me preocupaba. Además aún dudaba de mi respuesta. Moría por decirle que si, pero también tenía temor de cómo fuera a resulatar todo esto. 

(...) 

Al día siguiente, agradecí que mis padres salieran temprano, no queria dar explicaciones del porqué Liam pasaría a traerme. No sabía como vestirme, quería verme linda para él. Pero en mi armario no tenía muchas elecciones. Estaba por la ventana observado, cuan al fin ví llegar el auto de auto de Liam. Salí rápidamente y vi como Agustin me abría la puerta para que pudiera entrar 

— Buenos días Agustin y gracias — Fue lo primero que dije. 

Entré al auto y lo ví. Estaba realmente guapo y la sonrisa que adornaba en su rostro, me hacía derretir. sus ojos brillaban y espera que fuera por mi. 

— Hola — saludé 

— Hola — respondió sin dejar de sonreír

Agustín arrancó el auto y empezamos nuestro recorrido. Liam pasó su mano por mi mejilla, sin dejar de mirarme. Se acercó a mi y me beso. No podía creer lo que me estaba pasando. 

— Liam, esto no es correcto — Dije entre besos, me separé de él — Agustin nos está viendo, además creo que ni siquiera te he dado respuesta.

— Agustin va atento al camino no a nosotros y espero que tu respuesta sea positiva, de lo contrario no se como voy a vivir sin tus besos.

— ¡Liam! No digas esas cosas, haces que me sonroje — No estaba acostumbrada a los cumplidos, mis novios anteriores no Lo hacían tan seguido. 

— ¿Vas a darme la respuesta? 

—  Si ya te tengo una respuesta... Liam “Acepto ser tú novia” — Se lanzó hacia mi, besandome nuevamente. Y aunque me encantaban sus besos no me gustaba cuando alguien mas nos veia. En este caso Agustin. — ¡Liam ya! Que va a decir Agustin. Además hay ciertas cosas que debemos dejar claras en esta relación.