Wallas
Los celos nunca fueron lo mío ¿Entonces porque me duele verte con él?
[…]
Tragué saliva otra vez. ¿Qué se suponía que venía a hacer? ¿Pedir una disculpa?
Nah, esas cosas no me van
Soy un Winston, entonces debo dar cara a las situaciones que voy a pasar.
Quise besarla, devorarle la boca en segundos, quise empotrarla contra el piano que vi en la esquina. Pero todo no se me fue posible porque su mejor amigo y amor platónico, Drake, interrumpió el momento preciso en donde iba besarla.
A veces el destino quiere que las cosas salgan todo el contario que uno imagina que pasará.
Miro los cuadros colgantes de la pared, con rostros que no he tenido el honor de conocer, y entre ellos visualizo el de Emma. Sus mejillas son mucho más redondas. Su cabello lo lleva corto y en su sonrisa figuro unos brackets. Era una auténtica snob.
Río.
- ¡Emma Foster! - escucho gritar
Inmediatamente reconozco que la voz pertenece a la hermana René.
- Dios me de paciencia - exclama una de las hermanas
- Hermana Victoria - llama la misma chica que estuve en la sala minutos antes - Emma ha saltado al árbol - ríe
- ¿Me acompañas jovencito? - me pregunta
Asiento.
- Emma es la niña de este orfanato - comienza a decir mientras me levanto del asiento y la acompaño a la puerta con una sonrisa vaga - pero siempre ha sido - abre la perilla con gracia y me muestra un árbol frente a nosostros - extremadamente dramática
Y la veo, su rubio cabello, su pijama sumamente holgada, unas piernas bronceadas se puden visualizar al igual que unos brazos abrazando con demasiada firmeza el tronco.
Suelto una carcajada y ella levanta la vista para verme.
¿Tanto detestaba hablar conmigo como para poner su vida en riesgo? De solo pensarlo me da más risa.
- ¡Baja de ahí Foster!- grita una voz masculina que para nada es mía
Volteo a mirar al sujeto, lleva una chaqueta marrón sobre una camiseta blanca y vaqueros rasgados. Su rostro. Sus lentes, y la forma en que ella lo mira. Deja decir que ese sujeto es el «amor platónico» de Emma, Drake.
- Drake - le llama la hermana René y él ríe mientras captura el momento en su cámara - dile a Emma que baje
- Hermana, es Emma - ríe
Él la conoce de hace tiempo, lo sé, y por ello meto mis manos al abrigo y salgo sin decir nada, solo doy media vuelta y silenciosamente me despido de la hermana Victoria.
Pero rápidamente regreso cuando me doy cuenta de algo.
¿Porque rayos me alejo? ¿Qué hay en ese lugar que tanto me afecta? Emma no es nadie para poder influir en mi vida de tal manera.
- ¡Drake, ayúdame a bajar! - grita Emma
¿Porque se subió a ese árbol? Miro la ventana y la rama que lo conecta con el tronco que está a escazos centímetros.
Qué astuta.
- Lo siento Emma - ríe su mejor amigo
- ¡Drake! - chilla
- Si tienes miedo a bajar de un árbol entonces ¿Porqué te subiste en primero lugar?
Ella se muerde el labio.
El árbol no tiene una altura de «Oh Dios, que alto» pero habrá dos metros de altura ente el árbol y el césped.
- No seas imbécil Drake
- ¡Emma! - le reprende la hermana René
Reprimo una carcajada.
<…>
El silencio es sumamente incómodo en la mesa, solo mamá se encarga de hablar para romper el hielo pero ni Hit, ni yo hablamos a no ser de unos cuántos monosílabos. Pero es Guilian que no ha ha abierto la boca en todo el rato.
- ¿Les parece que el paseo sea en la finca del abuelo? - pregunta mamá
No digo nada. Fue en la finca del abuelo cuando la inocencia de Guilian le fue arrebatada cruelmente.
- ¿Nadie hablará? - pregunta nuevamente
- Dónde quieras está bien - farfulla Hit y yo solo asiento
Mamá bufa y se levanta de su asiento, Guilian también lo hace como si estuviese esperando esta reacción por parte de mamá desde que comenzó a hablar.
Hit intenta levantarse pero lo detengo de la muñeca. Me levanto también para quedar a su tamaño.
- Quiero hablar contigo Hit - le digo
- Vale Wallas - se suelta de mi agarre cpn brusquedad - pero no soy un niño
Asiento. Tiene razón. Él ha dejado de ser el hermano menor temeroso a lo que pasaría si la oscuridad le envolvía.
- ¿De que deseas hablar, hermano?
Metí mis manos al bosillo de mi pantalón:- De Emma