When You Were the One

Capitulo 30-T2E6:El Secreto del Proximo Baile

🌅 La mañana de Nicole

Las vacaciones de invierno habían terminado.
Nicole se peinaba frente al espejo, con el uniforme listo y Conejín sentado en la cama como espectador silencioso.

Su celular vibró. Era Alex.
—¿Vas hoy? —preguntó él.
—Sí, claro —respondió ella, sonriendo.
—¿Y si nos divertimos en el recreo?
Nicole soltó una risa suave.
—Obvio, me encanta la idea.

Guardó el celular en la mochila y salió de casa con paso ligero, sintiendo que el nuevo año traía algo distinto.

🤗 Encuentro con las amigas

Al llegar al colegio, apenas cruzó la entrada, Hengely y Michelle corrieron hacia ella.
La abrazaron fuerte, como si hubiera pasado más que una semana.

—¡Nicole! —dijo Hengely, con una sonrisa segura.
—¡Te extrañamos! —agregó Michelle.

Nicole las miró sorprendida.
Notó que ambas habían cambiado un poco: Hengely tenía una calma distinta, más firme, y Michelle irradiaba confianza, como si ya no dudara tanto de sí misma.
Las citas con Carlos y Camilo las habían dejado más seguras, más brillantes.

—Se ven diferentes… —dijo Nicole, con ternura.
—Es que ahora sabemos lo que queremos —respondió Hengely, guiñándole un ojo.
Michelle rió.
—Y lo que no queremos también.

Nicole se sonrojó, feliz de verlas así.

🏫 Perspectiva de Alex

En otra parte del colegio, Alex entraba a su aula.
Se sentó en su lugar, sacando sus cuadernos, cuando Leo se acercó con una sonrisa.

—¡Ey, Alex! —lo saludó, dándole un golpe amistoso en el hombro.
—Ey, Leo —respondió él, sonriendo.

—¿Cómo la pasaste en Año Nuevo? —preguntó Leo.
Alex se recostó en la silla, con aire confiado.
—Increíble. Fue… distinto.

Leo suspiró.
—El mío estuvo bien, pero no tan épico como el tuyo, el de Carlos y el de Camilo.

Alex se rió, burlón.
—Bueno, cada quien con su suerte.

Leo lo miró con complicidad.
—¿Y en el recreo? ¿Me acompañás?

Alex negó con la cabeza, sonriendo.
—Hoy quiero pasarlo con Nicole.

Leo levantó las manos, entendiendo.
—Está bien, hermano. Te dejo tu momento.

🎮 “Juego de novios”

El timbre sonó y los pasillos se llenaron de voces.
Alex fue directo al aula de Nicole, esperando en la puerta.
Ella todavía conversaba con Hengely y Michelle, pero apenas cruzó la salida y lo vio, corrió a abrazarlo fuerte.

—¡Alex! —dijo, con una sonrisa amplia.
Él le dio un besito rápido en el cachete.
—Vamos al patio.

Caminaron juntos, tomados de la mano, hasta encontrar un rincón tranquilo.
Nicole lo miró con picardía.
—Bueno… ¿qué vamos a hacer para divertirnos?

Alex pensó un segundo y sonrió.
—Un juego de novios.

—¿Juego de novios? —preguntó ella, curiosa.
—Sí. Yo te hago preguntas y vos respondés rápido. Si fallás, tenés que darme un beso.

Nicole se rió.
—¡Eso no es justo!
—Claro que sí. Es divertido.

Empezaron con preguntas simples:
—¿Cuál es mi color favorito? —preguntó Alex.
—Negro —respondió Nicole, segura.
—Correcto.

—¿Cuál fue la primera película que vimos juntos?
Nicole dudó un segundo.
—Eh… ¿la de acción?
—¡Fallaste! —dijo Alex, riendo.
Se inclinó y le dio un beso corto en la mejilla.

Nicole se sonrojó, pero también se rió.
—Está bien… ahora me toca a mí.

El juego siguió entre risas, preguntas tontas y besos de castigo.
Nicole se sentía feliz, ligera, como si el recreo fuera solo de ellos dos.

🐎 El caballito

En medio de la diversión, Nicole lo miró con una sonrisa traviesa.
—¿Me cargás a caballito?

Alex arqueó una ceja.
—¿Ahora?
—Sí, dale.

Él aceptó, se agachó y Nicole se subió a su espalda.
Caminaron unos metros, riendo, mientras ella lo apretaba con los brazos.

—¡Esto es genial! —dijo Nicole, feliz.
Alex también reía, pero después de unos segundos murmuró:
—Uf… pesás un poco.

Nicole se quedó quieta.
Se bajó de inmediato, con el rostro serio.
—¿Qué dijiste?

Alex la miró, confundido.
—Nada… solo que me cansé.

Pero Nicole lo entendió de otra manera.
Sintió que le estaba diciendo gorda.
Su sonrisa se borró, y con un gesto ofendido, se cruzó de brazos.

—No tenías que decir eso.

Alex intentó acercarse.
—Nicole, no quise…
—Ya está. —lo interrumpió ella, con voz cortante.

Se dio media vuelta y se fue, dejando a Alex parado en medio del patio, sorprendido por cómo un comentario inocente había cambiado todo en segundos.

🪑“El consejo de Dan”

Nicole se había sentado en un baquito apartado, con los cachetes inflados de enojo y los brazos cruzados.
Miraba al suelo, sin querer hablar con nadie.

Dan la vio desde lejos y se acercó, con su estilo despreocupado.
—Ey, ¿qué te pasa? —preguntó, inclinándose un poco para verla a los ojos.

Nicole suspiró.
—Alex me dijo gorda.

Dan abrió los ojos, sorprendido.
—¿Qué? Vos no estás gorda. Contame bien qué pasó.

Nicole bajó la mirada.
—Me subí a caballito de él… y en un momento se quejó de que pesaba.

Dan levantó la mano, interrumpiéndola.
—Eso no significa que te haya dicho gorda. Solo que se cansó.

Nicole lo miró, aún ofendida.
—Pero igual me dolió.

Dan se inclinó y, en voz baja, murmuró:
—Bueno… la verdad es que pesás un poquito.

Nicole lo empujó suavemente, con los cachetes más inflados todavía.
—¡Dan! ¿Ves? Eso es lo que sentimos las mujeres. Si nos dicen que pesamos, lo entendemos como que nos ven gordas.

Dan levantó las manos, riendo nervioso.
—Está bien, está bien. Pero mirá… lo que debería sentir Alex es que te hizo mal con ese comentario, aunque no fuera su intención. Él tiene que aprender que a veces las palabras pesan más que el cuerpo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.