━━witch: Scarlett. →jasper Hale.

━chapter zero;

[00]
MEDIA SANGRE.

[00]MEDIA SANGRE        

【ANATASHA】

SAN PETERSBURGO, RUSIA.

residencia g.i

 

                  Ĥoy sería el, 
maldito, día.

Quiero cantar a todo pulmón: "LIBRE SOY, LIBRE SOY, ARRANQUEN PAL CARAJO PENDEJOOOOS" mientras camino por el extenso pasillo de la Mansión G.I, así Mamá se volviera a replantear contratar un psicólogo para mí.

Sin relajos.

Aunque, ¿qué esperaba? Después de todo lo que hago era natural que se me fundiera un poquitín el coco.

Cerre mi maleta, Versasefeliz como una fucking lombriz coño, ¡Al fin me libraría de mis odiosos hermanos de porquería por un delicioso tiempo!

Osea, los quiero y todo, pero ganas de matar a esos cabrones no faltaban nunca.

Como ocurría con todo aquél que tenía hermanos; lo quieres, pero lo odias.

I Hate You, I Love you, así de fácil.

—Esto será aburrido sin tí.

Volteé todo el cuerpo hasta quedar de cara con la entrada de mi habitación, viendo a mi hermano mayor Christian, aunque todos le decimos Niklaus, que era su segundo nombre, Ya que cuando uno de nuestros sobrinos fue nombrado Christian también, para evitar confusiones, preferimos hacer eso.

Además casi nadie lo llamaba Christian.

—Sé que les cuesta respirar sin mí. —me mofo con completa burla y egocentrismo.

Niklaus amplía su sonrisa.

—Oh sí —entra a la habitación formando un puchero—, moriremos, que mal.

Sonreí hasta que me dolieron las mejillas, Niklaus separó sus brazos de su cuerpo para poder envolver el mío, dándome un golpe de calor.

Obvio que le correspondí.

Es decir, es Niklaus, ¿quién no quiere rodear ése cuerpo británico?

Yo no apoyo el incesto pero... Jum.

Además no somos taaaaan hermanos.

—Procuren no morir mientras no estoy. —Pido alejándome del rubio.

Niklaus se llevó una mano al pecho, aparentemente ofendido.

—¿Qué gracia tiene cazar sin el excitante peligro de poder morir? —Preguntó indignado, mientras yo bajo de la cama la maleta— Se muere la gracia, loca.

—Ése es el problema, tú te arriesgas demasiado y Elijah siempre tiene que ir a salvarte el trasero. —sentencio alzando la manija de la maleta— Está vez no estoy para patear tú culo...

—Perfecto culo querrás decir. —interrumpe con prepotencia y una sonrisa cargada de ego.

Rodé los ojos mientras arrastro la maleta hacia afuera. Puto narcisista.

—Tú perfecto culo —reiteré con burla— al regresar. —concluyo satisfecha en el pasillo.

Miré la maleta fijamente y una niebla escarlata la rodeó para transportarla, con el movimiento de mi mano izquierda, hasta el segundo piso con éxito.

Cada día mejor, cada día mas queen, y si te pica; pos arrá'cate.

Sonrío y bajo las escaleras con tranquilidad.

—Bueno quizá no haga falta que lo hagas. —Comenta el idiota ampliando su sonrisa, fijé mi atención en lo que Niklaus veía y no pude evitar bufar al ver a la castaña que más detestaba en mi vida— ¡Lydia, cariño! —Exclama pasando a mi lado.

—Ella no va a patear tú culo perfecto, lo va a lamer. Como hizo con Mikael —Murmuro rodando los ojos al ver como Lydia abría sus brazos para recibir a Niklaus.

Lydia L'voir, la nueva híbrida de la familia; Nikolay la encontró en un bosque de Inglaterra a punto de morir y le dio una segunda oportunidad.

En menos de un maldito mes ya le había hecho la vida imposible a su rica protagonista.

Osea yo.

—¡Niklaus! —chilló cuando éste la alzó, como si molestara— Oh —fija sus ojos rojos en mí— ¿Ya te vas Anabelita?

Ésta perra siempre anda tentando su suerte.

—Llámame una vez más así, y te arrastraré al infierno, sarnosa. —escupí con frialdad, Lydia frunce el ceño y Niklaus la baja para verme con los labios entreabiertos.

—Anatasha no seas grosera. —pide Niklaus con cierta burla en su falso regaño elegante.

Pero mira a'queroso...

Volví a coger mi maleta y la arrastré por todo el living, con la cara de un Bull Dog.

No tengo paciencia para ésa tía.

—La elegancia le queda a Elijah, no a ti. —Contraataqué con malhumor, Niklaus sonrió reluciendo sus hoyuelos— Por cierto, despídeme de él, tengo urgencia por irme.

—Buen viaje. —deseó Lydia entre dientes, con sus manos colocadas sobre su cadera.

Volteé, caminando de espaldas.

—¿Ahora que hablaste? Quizá no tanto. —hice una mueca de incomodidad completamente falsa— Espero que el avión de se caiga.

—Muérete. —Espetó la castaña de malhumor.

Sonreí de lado, con sorna.

—Buena suerte con eso.

WASHINGTON, EEUUforks        

WASHINGTON, EEUU
forks

Sigo en la carretera buscándote —Canté en español, pasando mis ojos por cada parte del húmedo y tranquilo pueblo de Forks—, Al final del camino te encontraré; aceleré.

Acelero para ir de acuerdo a la canción de Julio Iglesias, ¿alguién más que ame a ése hombre? Porque yo aprendí español sólo para entenderlo y cantar sus canciones.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.