Un empujón

Después de aquella charla, Nico había empezado a dejar un poco más de espacio a Weru de tal forma que él ya se podía sentir un poco más augusto. Aunque esto no fuera lo suficiente como para poder revertir todas esas miradas que acosaban a Weru desde sus alrededores, él pensaba que esto no podría llegar a aumentar más de lo que era actualmente.

Conforme iba empezando a llegar casi finales de la tercera unidad y comienzo de la cuarta unidad, ya estaban viendo que el tiempo se había ido muy rápido y su primer año en el básico estaba por acabar muy pronto.

Durante el tiempo que había transcurrido, las demás agencias no habían hecho sus movimientos tan rápidamente, sino que habían estado en busca de poder conseguir una oportunidad para empezar a moverse entre las sombras. Cada una de estas se encontraban en un punto de sus preparativos en el cual podrían empezar a actuar en cuestión de muy poco tiempo.

Lo que Weru había llegado a sufrir tras el haberse encontrado con la agencia que lo secuestro, no se compraba con nada de lo que estaba por venir. En realidad, el motivo por el cual no habían hecho ni otro movimiento durante tanto tiempo se debía a que Nico los había dejado casi destrozado después de que Weru estuviera casi recuperado de todo lo que había pasado ese día. Nico, que los dejo casi eliminados por completo, les dejó una advertencia de que no tratasen de volver a intentar hacer algo como eso con alguno de los integrantes de su agencia, si ella volvía a llegar a encontrarlos secuestrando o haciéndoles imposible la vida a alguno de los integrantes, entonces ella misma se encargaría de que la agencia nunca más pudiera volver a juntarse y desaparecería del mapa por completo.

Todas las demás agencias, aunque sabían que esta agencia que había llegado casi a su destrucción por parte de Nico no era una de las más grandes, podían entender brevemente el poder que tenía ella y su potencial, por lo que no era tan fácil el poder ignorar algo como esto.

Durante un pequeño rincón, en el cual todos estaban al margen de hacer cualquier movimiento, ahora se estaba por empezar a movilizar la siguiente agencia. Aunque esta agencia también se encontraba entre las de bajo nivel, era más fuerte que contra la que se había enfrentado Nico anteriormente. En esta ocasión, el que esta agencia se movilizara no era otra cosa más que un intento de poder conocer hasta donde llegan los límites de toda la agencia WN por parte de las agencias con mayor fuerza.

Es por esta razón que no se podía ver con claridad quien era un aliado o un enemigo, al ser que en todo lugar donde se podían ver a varios estudiantes platicando placenteramente, había entre ellos una gran parte de genios de diferentes agencias que no estaban más que ocultando su presencia de los demás en busca de poder conseguir nueva información de sus contrincantes, así como en la espera de poder ser partícipe del entrenamiento que el gremio de agencias llegará a realizar en cualquier momento.

Sin siquiera poder compensar nada de lo que estaba en juego, todas las agencias tenían en la mira el poder llegar a ser uno de los elegidos para este entrenamiento. El precio que este llegara a conllevar consigo no podía ser superior a lo que serían los beneficios que traería consigo. Pero, lo que no podían llegar a pensar con claridad los más pequeños era el que podían terminar desapareciendo si cometían el más mínimo error.

En esta ocasión, la agencia que empezó a realizar su movimiento sin dudarlo en lo más mínimo. Desde las sombras, donde habían estado vigilándolos por un buen tiempo, sólo esperaban poder conseguir una forma de lograr hacerlos ir hacía la trampa que habían preparado con anticipación.

Alguien podría decir que era mucho más fácil si tan sólo los secuestraran en el momento en que ellos se encontraran vulnerables, pero para que esto sucediera sería casi un sueño al no hallar alguna posibilidad de poder debilitarlos ni mucho menos alguna apertura en la cual poder confiar el poder ir en su contra y aprovecharlo para lograr arrinconarlos más que el hecho de ser unos cuatro integrantes nada más. Aunque pareciera un objetivo fácil al  ser que casi no cuentan con integrantes, también podían ver que contenían con un cierto poder en el cual confiar. Al ser que vieron lo que les pasó a la agencia que los había atacado anteriormente, no podían decir que una simple agencia los podía dejar de una forma muy lamentable con muy pocos agentes como integrantes.

Estuvieron tratando de encontrar a más de sus integrantes, lo que podían estar escondidos de tal manera que no sería tan fácil el poder terminar encontrándolos. Pero, por más que estuvieron en busca de más integrantes de esta nueva agencia, no lograron encontrar a nadie más.

Como un pequeño cebo para poder atraerlos a la trampa, podían confiar en poder hacer que uno de los integrantes más débil de toda la agencia cayera en su trampa y este fuera quien los dirigiera hacía su trampa, lo único que les quedaba era encontrar una manera de poder hacer que este aceptara sin hacer tantas preguntas o siquiera sospechar sobre lo que sucedía a su alrededor hasta que ya fuera demasiado tarde.