Lo voltee a ver detrás de mí, su rostro fruncido me decía que estaba enojado, conteniéndose.
—¿Qué te pasa Ethan? Una niña te está ganando— le grite y note una sonrisa siniestra en su rostro y comenzó a correr mucho más rápido, voltee y seguí corriendo, pero en cuestión de segundos el me rebasa.
No había duda corrió tan rápido que el aire peino mi cabello al pasar al lado mío dejándome boca abierta. Lo vi perderse en una curva y no dude en seguirlo. Al llegar lo vi sentado sobre el césped mirando sus manos con un ceño fruncido. Me senté a su lado sin querer interrumpir su silencio.
—¿Lo sabes verdad? — pregunta el sin voltearme a ver.
—Si
—¿Y.... en qué piensas? — dice el esta vez volteando a verme con miedo en los ojos como si esperara una reacción asustada de mi parte.
—Que somos iguales— el me miro confundido e sorprendido. Dejé salir una risita luego cerré mis ojos por un momento y los abrí dejando ver mis ojos ahora color amarillo brillante, él sonrió y cerró los ojos luego los abrió dejando ver sus lindos ojos ahora color amarillo brillante como los míos. No sé por qué, pero sentía la necesidad de besarlo, descarte esa idea de mi mente concentrándome en el amarillo de sus ojos.
(...)
Caminamos devuelta y durante el trayecto nos informamos que él y sus hermanos son hombres lobo de nacimiento y llegaron aquí al querer estudiar en otro lado. Y por mi parte le dije que yo, Megan y Tracy somos mujer lobos igual de nacimiento y que conocimos a Megan aquí al querer mostrar que somos independientes a nuestros padres.
Al llegar Noah y Jacob se nos acercaron preocupados.
—¿Porqué tardaron tanto? — pregunto Jacob.
—Ella lo sabe — les informa Ethan.
—¿Saber qué? — pregunta Noah intrigado viéndome con detenimiento.
—Que son hombres lobo — dije mostrándoles mis otros ojos y dejándolos atónitos.
Llegue a la par de Tracy y le conté todo ella sonrió de asombro como si le contara algo que ella de algún modo esperaba.
(...)
Luego de tan grande descubrimiento nos encaminamos de vuelta hacia nuestras casas.
— ¡Tengo hambre! — chille.
—Cuando no — susurra mi hermana ganándose una mirada asesina de mi parte.
—Compremos comida — sugerido Noah.
—¡Sí! — dije muy emocionada pero como que a Jacob no le gusta la idea.
—Jacob por favor, solo es comida— rogué viéndolo con suplica.
—Está bien— hice gesto de victoria eso nunca falla siempre lo hago con Tracy, abrace a Jacob de felicidad.
—Yo quiero un abrazo— dice Noah abriendo sus brazos y le hago la cara de "Nunca".
—Hey, yo tuve la idea— tenía razón así que lo abrace, no puedo ser tan mala.
Fuimos a mi casa y yo y Ethan ordenamos unas cajas de pizza, detrás Tracy y Jacob se encargaban de bajar el televisor y conectar Netflix y Noah se dedicaba a ordenar la sala para estar más cómodos.
Llego la pizza y todos corrimos a la sala, comenzamos con una película de comedia y todos íbamos de reír, los mire con detenimiento la forma en que Noah se le acercaba a Megan se me hacía tierna, como Jacob acomodaba su brazo con gentileza sobre los hombros de Tracy y claro que a ella no le molesto. Ethan estaba aún lado mío mirando la película sonriente como si fuera la primera vez que la estuviese viendo.
La primera caja solo le quedaba una sola pizza, yo y Noah intercambiamos miradas y nuestras manos salieron disparadas a la pizza, el la tenía, pero saqué mis colmillos y ojos de mujer lobo gruñendo que la soltara.
—Suéltala o te arranco la cabeza— mi tono de amenaza parecía a verlo asustado así que la soltó irritado, yo comí mi pizza y Tracy dijo.
—Esa es mi hermana— ambas chocamos las manos.
Pasamos el resto de la tarde viendo películas de cualquier clase y cuando vimos película de terror nadie gritó, los únicos que gritaron fueron Tracy y a veces Noah que no deje de molestarlo y no planeo dejar de molestarlo.
Ya como a las once los Woods se retiraron y Tracy y yo quedamos limpiando el desastre.
Todo parecía terminar bien.