-Despertaría un fennec en lo que parecía un cuarto con paredes de madera, a simple vista parecía que ya estaba atardeciendo; este se levantaría estando bastante confuso, habrían varias camas cerca de él, aunque todas estaban vacías, era el único dentro del cuarto, miraría su cuerpo notando que estaba vendado de sus brazos, él los tocaría por curiosidad resultando en que le arderían los brazos un poco, ‘’¿Qué me habrá pasado?’’, se preguntaría a si mismo mientras notaba que la vestimenta que tendría era diferente, una camisa y pantalón gris, este se alarmaba un poco empezando a buscar su ropa, encontrándola en el suelo cerca de su cama, se cambiaría rápidamente. Poco tiempo después se daba cuenta de que alguien entraba a la habitación, era un joven gato de pelaje blanco, vistiendo un kimono de color gris con copos de nieve cían que le decoraba, este se acercaba y en un tono calmado y amistoso le diría al fennec-*
Gato: Por fin despiertas, llevas inconsciente un tiempo, por suerte te traje a tiempo aquí
Fennec: ¿Gracias? -Diría en duda, mientras miraba con curiosidad a la persona que había entrado- ¿Quién eres?, ¿Y dónde estoy?
Caleb: Oh, je, que descortés de mi parte -Reía lentamente- Mi nombre es Caleb, yo fui el que te trajo aquí, al Santuario Meijer, ¿Y tú quién eres? *-Se mantendría mirando al frente, pensando que ahí estaba con el que estaba hablando-*
Jesse: El… ‘’ ¿Santuario Meijer?’’, curioso, y mi nombre es Jesse -Notaría que Caleb no haría contacto visual con él, con una vista más de cerca vería la razón, los ojos de Caleb tendrían cataratas- Oh, y gracias por el rescate, aunque no recuerdo muy bien lo que pasó
Caleb: -Su rostro cambiaba a uno más serio, y junto a eso su tono igual- Fuiste atacado por una entidad, y no sólo tú, venías con más gente, los demás pudieron huir, o eso creo, ¿Por qué pasaban por un lugar tan peligroso en medio de la noche?
Jesse: -Este se miraba más confundido, aunque logró descubrir el porqué de sus heridas, y lentamente recordaba lo que paso- Oh, ya lo recuerdo, venía a este Santuario para consultar algo con la señorita Kay
Caleb: ¿Qué era el tema del que venía a hablar? - El gato de blanco pelaje regresaba a un tono amable para no hacer incomoda la situación- Lo digo para ser yo quien le vaya a decir, ella pasa muy ocupada, jeje
Jesse: -De una forma más confiada le diría lo que trataba- Me gustaría unirme a este santuario, daré mi ‘’alma’’ a ello
-Jesse intentaría decirlo de una forma sería para mostrar respeto, aunque generaba una pequeña risilla en él. Caleb entendía lo que quiso dar a entender y asentía lentamente mientras pensaba un poco-
Caleb: Entendido, le aconsejo que se quede hasta el anochecer, a esa hora le atenderá la señora Kay -Este diría antes de irse, parecía que iba a avisarle a la persona de quien hablaban-* Por cierto, si requiere cualquier cosa puede avisarle a una de las Mikos, ellas vendrán cada tanto para ver como estas, es una hospitalidad del lugar -Saldría por la puerta, dejando sentir un frio aire venir por la puerta, este cerraba la puerta en silencio-
Jesse: Muchas gracias -Sentiría el frio que dejaba al irse, pareciéndole algo extraño, se sentaría en la cama para descansar un poco-* Bueno… aprovecharé a dormir
-Pasaban las horas hasta que llegaba la noche, el ruido era inexistente, solo se escuchaban grillos de afuera, Jesse se levantaría del pequeño descanso sintiendo nuevamente el aire frio, miraría a la puerta esperando para ver quién entraba. Entraba Caleb acompañado de una Dama Zorro Rojo que a simple vista parecía medir mucho-
Caleb: Jesse, esta es la Suma Sacerdotisa Kay, Señora este es la persona que le busca -Tomaría una reverencia frente de Kay-
Jesse: -Haría una reverencia antes de empezar a hablar con Kay- S-suma Sacerdotisa, creo que ya sabe por lo que estoy aquí *-Diría en un tono formal intentando ocultar un claro nerviosismo-
Kay: Claro, Caleb me conto todo lo que paso, jaja, solo quiero saber… ¿Cómo conoces la frase? -Por más amable que ella quería parecer, tendría una mirada bastante fría-
Jesse: Mi familia me dijo que viniera aquí, y c-conseguí un omikuji con esa frase -Diría mientras torpemente sacaba un papelillo para entregárselo a Kay-
-Kay miraba el papelillo para después quemarlo con sus palmas, del papelillo salía un juego azul, y se extinguía la llama al poco tiempo, Jesse miraba sorprendido a lo sucedido, se preguntaría como habría pasado, pero antes de que dijera cualquier cosa Kay decía-
Kay: Recuerdo que los escribimos, usamos magia para diferenciarlos de los demás, dejamos al destino que elija nuestros aliados -Diría de forma confiada-
Jesse: -Se quedaba pensando en lo que Kay decía, lo entendía de cierta forma, aunque estaba impactado de algunas cosas- ¿Para que necesitan aliados?, ¿Estamos en guerra con algo?
Caleb: Me sorprende que no preguntes por la existencia de magia… -Cerraba sus ojos esperando a lo que diría Kay-
Kay: Si, hace tiempo estábamos en guerra con las ‘’entidades’’, actualmente seguimos luchando, ellos intentan atacarnos, en respuesta a ello intentamos mantener a esos seres inmortales a raya para que no puedan interferir con la vida de los demás
Jesse: ¿Cómo es que nadie sabe de la existencia de ustedes?, digo, la mayoría de las personas dicen que tanto ustedes como las ‘’entidades’’ son leyendas -Diría en un tono sorprendido, con una mirada con bastante emoción-
Caleb: -Tomba un suave suspiro, abría los ojos mientras bajaba su cabeza- Usamos un horario nocturno, así que es imposible que alguien, aparte de viejos borrachos, nos miren; mantenemos un perfil bajo para no alterar a los demás, ¿Por qué crees que las entidades no son tratadas más haya de ser leyendas populares?
Kay: Usamos eso a nuestra ventaja, y creo que tenemos que avanzar, síguenos -Diría en un tono suave-
-Kay hablaba mientras se dirigía hacia la puerta, la habría y salía por ella, atrás de ella iba Caleb, Jesse se esperaba un momento antes de salir, al momento de salir era donde sentía algo raro, al pasar por el marco habría sentido un ligero desplazamiento, la sala principal era más oscura que el cuarto de donde salió, lo único que iluminaba adentro era la luz de la luna, el fennec asombrado por el cambio saldría a la parte central del templo, la luna estaba ubicada perfectamente en el centro iluminando todo el lugar exterior, habrían varias personas afuera en lo que parecía entrenando-