Worlds

Prólogo

 

Victoria es una joven de 19 años que se debate entre sus estudios y su trabajo como camarera en la cafetería de su universidad.

En su mundo interior, cuatro voces danzan al son de una melodía que ansía tiempos felices tras un pasado turbulento, compitiendo con la suya propia.

Jules, Julia, Foer y Donna pondrán sobre la mesa imaginación, garra, fe, sensualidad, responsabilidad y pragmatismo. Pero sobre todas esas cosas, todos ellos sentirán con fuerza la pasión de ansiar tiempos mejores.

 

Joel, por su parte, adolece a la edad de 23 de un trastorno maníaco depresivo de nacimiento.

Eso ha afectado ostensiblemente a una personalidad construida a base de capas, asemejándose a un laberinto oculto en las profundidades de un océano cambiante.

Porta una libreta en la que un personaje llamado Tylerskar ruge con la furia de quién se sabe más real de lo que todo parece indicar.

Solitario y meditabundo, Joel parece querer ganar una guerra etérea ayudándose de aliados invisibles. 

 

Ni Victoria ni Joel, protagonistas en la propia complejidad de sus mundos, verán venir el elemento que los fundirá.

Sobre la barra de la cafetería de Victoria, ésta irá preparando malteadas de fresa.

Paradójicamente, tanto el azul del mar al que tanto ama y teme ella, como el naranja del fuego que parece arder en el interior de Joel, encontrarán en el rosa de ese líquido un punto de encuentro.

Acompáñales en el fundirse de sus mundos.

Unas veces con dolor, otras con belleza. En la calma o en la tempestad.

Su amor por una pasión que apenas ya latía pondrá a prueba tanto sus sentidos como los del lector, mientras a cada trago de esta novela aflorará el miedo, la emoción y sobre todo… La esperanza por ver amanecer la felicidad.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.