Habían pasado unos días y Joe tenía su primera pelea.
La campana suena y Joe e Ice se enfrentan en el ring. Joe, conocido por su velocidad, intenta sorprender a Ice con una serie de movimientos rápidos. Ice, sin embargo, usa su fuerza para contrarrestar los ataques de Joe y lo lanza contra las cuerdas.
Ice conecta un poderoso clothesline que manda a Joe contra la lona. Joe se recupera rápidamente y responde con una ráfaga de patadas y golpes que Ice bloquea con su fuerza. Ice entonces aplica un bear hug intentando inmovilizar a Joe, pero Joe logra escapar con una serie de roll-ups evasivos.
En un momento clave, Joe intenta un diving crossbody desde la cuerda superior, pero Ice lo atrapa en el aire y lo estrella con un chokeslam contundente. Ice cubre a Joe y el árbitro cuenta hasta tres.
Ice gana la lucha con un chokeslam. La multitud reacciona con una mezcla de vítores y boinas, dependiendo de quién apoyaban.
Después de la lucha, Joe se dirigió a su camerino, donde empezó a beber una lata de Red Bull.
—Vi la lucha, con un poco más de técnica, habrías ganado.
Joe se volvió y vio a un tipo bajito, delgado y calvo.
—¿Quién eres? -preguntó Joe.
—Soy Lex, profesor de educasión física de la universidad.
—¿Como entraste?
—Tengo mis trucos, y en especial en la lucha ¿Te gustaría aprender?
—Supongo.
—El sábado, enseño lucha grecorromana a particulares en el gimnasio de la universidad.
Lex le entregó una propaganda a Joe, sobre la práctica de lucha grecorromana para particulares en la universidad, y luego abandonó el camerino.
—Aquí no me han enseñado nada -empezó a pensar Joe en silencio, mientras veía la propaganda- y solo me graban perdiendo, aunque me pagan bien.