—¿Estás segura de que quieres hacer esto? ¿No se supone que debes descansar?
Allyson ignoró la voz de Dave tras ella mientras bajaba las escaleras. No había palabra, cosa o acontecimiento que la hiciera cambiar de opinión respecto a lo que hacía.—Si no quieres venir lo entiendo, en serio. Si piensas que estoy loca también lo entiendo.
Escuchó a Dave tomar sus llaves. Terminó de colocarse la chaqueta y echó un vistazo a su celular antes de salir del departamento. Dave la siguió.—Querías hablar con ella, saber que estaba bien, ¿No? —insistió— Ya se puso en contacto, está bien y tu necesitas descanso.
Allyson no respondió. Se limitó a pulsar el botón del ascensor.no tenía ganas de explicarle que una conversación de diez segundos no estaba ni cerca de dejarla más tranquila. Penny no era una buena mentirosa, nunca lo sería, al menos no para ella.
Que la llamara para decirle que había estado fuera de la ciudad unas semanas y que había olvidado su celular, pero que ya estaba de vuelta y que lamentaba haberla preocupado, no sonaba como algo que ella diría aún estuviera exhausta, drogada o medio dormida.
Era problema de Dave si el no podía percibir que la actitud de su hermana no era normal. Allyson si podía verlo y pretendía hacer que Penny le explicara qué carajo estaba sucediendo.Aunque su amiga había llamado a Dave pocos segundos después de dejarla mirando la pantalla de su teléfono atónita, éste juraba no haber notado nada raro en ella. Al menos su conversación si había excedido los treinta segundos.
—Algo no está bien —explicó cuando el ascensor se abrió frente a ella y nuevamente Dave la siguió al interior.
Extendió una mano para que las puertas no se cerraran— No lo ves como yo lo veo, es mi mejor amiga y creo que es mejor que vaya sola. No creo que tu presencia la anime a contarme que sucede.
—Ni siquiera tienes forma de marcharte —replicó Dave, ignorando el gesto que lo invitaba a salir del ascensor.
—Para algo existen los taxis.—Yo te llevaré.
Allyson contuvo las ganas de maldecir. Sí, quería ver a Penny y conversar con ella a solas, pero tambíen pretendía tener sus pensamientos para sí misma por algunos minutos. Su mejor amiga la preocupaba, mucho, pero aun así no lograba sacarse las palabras de Dave de la cabeza y quería poder pensar en ello con calma.No le gustaba sentirse confundida, y así era exactamente como Dave la hacía sentir.
Al menos antes sabía que tipo de "relación" tenían, o qué era lo que sentían el uno por el otro: ella estaba obsesionada con él y él... bueno, él vendía su alma por tenerla lejos.Al principio solo era Dave huyendo de ella y luego Dave demasiado enamorado de Miranda como para prestarle atención. Unos meses atrás era Dave frustrado porque ella técnicamente lo estaba obligando a tener citas que para él no eran más que una molestia y en algún momento todo eso había cambiando para dar paso a un Dave que le lanzaba señales confusas y que le provocaba halarse el pelo.
Se sentía frustrada y estúpida, y al mismo tiempo recordaba las palabras que había escuchado unos minutos atrás y entonces no sabía si flotar o sonreir como idiota. Luego, como un cubo de agua fría, venía el recuerdo de apenas unas horas atrás y de cómo había despertado en medio de la madrugada mientras el hombre junto a ella llamaba a gritos a su ex.
La mezcla de todas esas sensaciones eran como una bomba a punto de explotar y necesitaba pensar en todo lo que estaba pasando para evitar explotar, pero no lo lograría encerrada en un auto con Dave.Por desgracia, para ese momento ya estaba acomodándose en el asiento del copiloto mientras él ponía el auto en marcha.
—No era necesario que me trajeras —dijo. Si, ¿Te digo otra cosa que no era necesaria? ¡Esas palabra! Le gritó una voz en su interior.
—No es nada, además, si algo anda tan mal con Penny como dices, me gustaría saber que es.
—No va a decirme que le pasa si estás curioseando alrededor—se quejó.
—De acuerdo.
Hicieron el resto del viaje en silencio. A Allyson nunca le había parecido que el departamento de Penny quedara tan lejos y aunque sabía que todo se debía a sus nervios, no podía evitar las ganas meter un pie y pisar el acelerador hasta al fondo.
—Tal vez sea cierto que no pasa nada y yo solo exagero... —algo debía estar funcionando mal en su cabeza, porque de repente sentía una ligera duda acerca de todo lo que había creído durante semanas.
Probablemente solo era el efecto de todas las veces que Dave o Jessica le habían dicho que estaba loca.
—Bueno, tal vez si está pasando algo y tu eres la única que lo ha nota.
Ella lo miró fijamente unos segundos. Era la primera vez en largo rato que se atrevía a mirarlo a los ojos, él le lanzó una breve mirada y le sonrió antes de volver a enfocar su atención en el camino.
Una idea en la que no había pensado cruzó su mente, ¿Qué haría si en realidad algo había pasado con Penny? Es decir, durante muchos días había estado tan enfrascada en que algo no iba bien que ni siquiera se había detenido a pensar en qué era ese