Lo más importante en la novela...¡Los personajes!

Toda buena novela tiene buenos personajes, y si están bien escritos y desarrollados, harán que tu historia sea memorable y harán que el lector quiera quedarse a leer tu historia hasta el final. 

Ahora; y enganchando un poco con lo mencionado en el capítulo anterior; no cometas el error de describir al cien por ciento cada aspecto, ya sea físico o de personalidad, de tu personaje desde un principio. Permite que el lector vaya imaginando cómo son esos personajes y los vaya descubriendo y conociendo a medida que vaya leyendo la historia.

En una novela puedes encontrar al protagonista -o a la protagonista-, al villano, al antagonista -no, no son lo mismo- y a los personajes secundarios; que son igual de importantes para hacer que una historia sea memorable.

¿Cómo puedo desarrollar a un buen protagonista femenino? 

Bueno, desarrollar a un buen protagonista femenino es esencial para poder crear una historia interesante y que a la vez sea empoderadora y aquí te dejo algunos consejos sobre cómo hacerlo.

1. Construye una personalidad compleja: Asegúrate de que tu protagonista femenina sea un personaje tridimensional con una gama compleja de emociones, fortalezas y debilidades. Evita los estereotipos y permite que tu personaje tenga una voz propia.
2. Dales un trasfondo sólido: Desarrolla una historia de fondo detallada para tu protagonista femenina. Esto incluirá su historia familiar, experiencias pasadas y eventos significativos que han moldeado su personalidad y motivaciones. Ésto ayudará a que el personaje se sienta real y creíble.
3. Otorgarle metas y motivaciones claras: Asegúrate de que tu protagonista femenina tenga motivos y objetivos claros para perseguirlos. Ésto añadirá profundidad a su carácter y proporcionará un impulso narrativo para la historia.
4. Permite que tome decisiones: Da a tu protagonista femenina el poder de tomar decisiones que afecten a la trama de la historia. Esto le permitirá ser un agente de cambio en lugar de un mero espectador dentro del mundo que has creado.
5. Permíteles crecer y evolucionar: A medida que avanza la historia, asegúrate de que tu protagonista femenina experimente un crecimiento y evolución significativos. Esto puede incluir superar desafíos, aprender lecciones importantes y desarrollar nuevas habilidades o perspectivas.
6. Evita la objetificación: Trata a tu protagonista femenina como un ser humano completo en lugar de enfocarte únicamente en su apariencia física. Evita caer en la trampa de retratarla como un objeto sexual o una damisela en apuros, y asegúrate de que sea un personaje fuerte e independiente.
7. Crea relaciones significativas: Desarrolla relaciones significativas tanto con personajes masculinos como femeninos en la vida de tu personaje. Esto puede incluir amistades, alianzas, relaciones románticas o familiares. Estas interacciones ayudarán a profundizar en la historia y a enriquecer el crecimiento y el desarrollo del personaje.

¿Cómo desarrollar a un buen protagonista masculino?

Desarrollar a un buen protagonista masculino también puede ser crucial para crear una historia equilibrada y convincente. A continuación te dejo algunos consejos sobre cómo hacerlo.

1. Evita estereotipos de género: Al igual que las protagonistas femeninas, es importante evitar los estereotipos de género al desarrollar a tu protagonista masculino. Crea un personaje complejo y tridimensional que desafía los roles tradicionales y que tenga una variedad de cualidades, fortalezas y debilidades.
2. Dale un trasfondo y motivos sólidos: Al igual que con los personajes femeninos, dale a tu protagonista masculino un trasfondo detallado y significativo. Ésto incluirá su historia familiar, experiencias pasadas y eventos que hayan influido en su carácter. También es importante que tengan metas y motivaciones claras para que su viaje en la historia sea interesante para los lectores.
3. Muestrales vulnerabilidad: A menudo, los protagonistas masculinos son retratados como fuertes e invulnerables. Sin embargo, para poder crear a un personaje más realista y empático, es importante mostrar su vulnerabilidad y permitirles enfrentar y superar sus propias luchas internas. Esto también puede ayudar a desafiar los estereotipos de masculinidad tóxica.
4. Exhibe una diversidad de masculinidades: Al igual que las mujeres, los hombres también tienen una amplia gama de identidades y expresiones de género. Puedes desarrollar a un protagonista masculino que desafíe los estereotipos tradicionales de masculinidad y refleje una variedad de masculinidades. Esto puede crear personajes más interesantes y conectados con una audiencia diversa.
5. Crea relaciones significativas: Al igual que con los personajes femeninos, desarrolla relaciones significativas para el protagonista masculino. Estas pueden ser amistades, relaciones románticas o familiares. Éstas relaciones ayudarán a profundizar en la historia y a enriquecer el desarrollo del personaje.
6. Permiteles crecer y evolucionar: A medida que la historia avanza, asegúrate de que tu protagonista masculino experimente un crecimiento y una evolución significativos. Puede incluir aprender lecciones importantes, superar desafíos y desarrollar nuevas perspectivas y habilidades.
7. Evita la hipersexualización y la violencia sin sentido: Es importante evitar caer en la trampa de hipersexualizar a tu protagonista o tratarlo como un héroe de acción sin sentido. Procura crear un personaje más profundo y complejo que no se base únicamente en su atractivo físico o en su capacidad para resolver problemas a través de la violencia.