Y Entonces Me Enamoré - Jeon Jungkook

Capítulo 21

 Inhalo profundamente una y otra vez para retener los sollozos incontrolables que no me dejan. Siento movimiento a mi lado, por lo que aguanto la respiración en un intento de ser invisible. El brazo de Jungkook me rodea de la cintura y me atrae más hacia su cuerpo, oigo un pesado suspiro de su parte y luego silencio.

 Dejo escapar el aire cuando noto que está totalmente dormido, y me acomodo sobre mi almohada, sintiendo mi labio inferior temblar por el sentimiento de terror y rabia que me abrasa. Hace unas horas que descubrí lo oculto en la habitación misteriosa y desde allí no he dejado de temblar.

 Taehyung está vivo. Está aquí, y vivo. No murió… Y Jungkook me mintió.

 << Mi mano inmediatamente tapa un gemido de impresión, mis ojos humedeciéndose.

  —P-peleona…

 —Taehyung. –solté en un sollozo escandaloso.

 Importándome un demonio quien me haya oído, corro hacia la cama donde se encontraba postrado. Su tez estaba totalmente pálida, suero intravenoso en uno de sus brazos, una mascarilla de oxígeno colgando a un lado de su rostro. Tomo sus mejillas con manos temblorosas, temiendo herirlo de alguna forma, mientras mis lágrimas empapan mi rostro.

 Sus labios levemente resecos y púrpuras me sonríen débilmente, abre la boca para decir algo, pero solo salen quejidos torturados. Desesperada, busco la forma de ayudarle, y al verle ahogarse solo coloco la mascarilla de oxígeno, consiguiendo que su respiración se regulara poco a poco.

 —Taehyung… –sollozo cubriendo mi boca para no gritar–. Estás vivo… ¿Cómo…? Es decir, ¿por qué? Tu caíste… moriste. ¿Qué diablos ocurre?

 Él agita su cabeza en una negativa y levanta su mano en un gesto que pide silencio de mi parte. Toma profundas respiraciones con la mascarilla antes de quitarla y mirarme con cansancio.

 —No sabes… no sabes cuánto… te extrañé, peleona –susurró con una sonrisa enternecida, tomándose su tiempo–. Pensé… que ya te habías… ido de aquí.

 —Ya basta –regresé la mascarilla al verlo tan desesperado por decir algo sin trancarse–. Deja las bromas a un lado y háblame, Tae. Dime porqué estás aquí, ¿por qué te ocultaron de mí?

 Lo miré demandante, con la intención de que se pusiera serio y me contara la verdad de todo esto. Taehyung volvió a respirar con la ayuda de la máscara y volvió a mirarme, solo que esta vez más sereno.

 —El jefe no… no q-quería que me… acercara m-mucho a ti –tragó duro antes de continuar–. Podía sentir q-que éramos más… más cercanos t-tú y yo. Así que tomó… e-este accidente para a-alejarte de mí.

 —Es un idiota –exclamé haciendo mis manos puños–. ¿Cómo pudo hacerte esto?

 —Precisamente, p-porque es un idiota. –rió divertido después de eso, comenzando a toser.

 Lo miré fulminante para mostrar cuanto me molesta que bromee en su estado. Lo veo tomar más oxígeno y volver a mirarme, esta vez una sonrisa gigantesca decora su mirada.

 —Escucha, Karly –comienza más relajado–. Debes c-calmarte. Resiste u-un poco más, y… cuando t-tengas la oportunidad… escapa.

 —Taehyung…

 —No, Karly –le interrumpió–. Vete en c-cuanto puedas. Morirás si… sigues a-aquí.

 — ¿Qué hay de ti? –Quité las lágrimas de mi rostro con violencia–. También podrían matarte.

 —Por supuesto q-que no, cariño –su mano viajó lentamente a mi rostro para acariciarlo–. Ya me hubiera… d-dejado morir.

 —¿Dices que no te irás conmigo? –apreté su mano sobre mi mejilla. Negó levemente, manteniendo esa sonrisa que empezaba a molestarme.

 —Soy leal a… m-mi jefe, cielo –tragué duro nada más escucharlo–. Tuve hemorragias i-internas. Mis órganos… s-se movieron de su… lugar. Pude haber m-muerto, pero ellos… me s-salvaron. Debo q-quedarme

 Voy a protestar, cuando mi cabeza hace un clic al oír bien su oración completa. Mi corazón se detiene por unos segundos y mi garganta se seca.

 —¿Ellos? –susurro con voz temblorosa. Taehyng asiente, recargando sus pulmones con la mascarilla.

 —Todos están… i-involucrados. Kim Namjoon. Jung Hoseok… y Kim Jennie.

 Desvié mi mirada, sintiendo mis ojos picar y la respiración fallarme. No puede estar pasándome. De Jungkook ahora me lo creo, de Hoseok, del jefe Kim incluso. Pero Jennie… pensé que era mi amiga. ¿Cómo pudo ocultarme esto y mirarme a la cara? No puedo creer, cómo de un momento a otro, todo se sienta tan falso.

 La decepción quema en mi interior, convirtiéndose en un sentimiento de ira.

 —Huye, Karly… en cuanto puedas. >>

 Todo a lo que tuve que acostumbrarme, todas las cosas que tuve que hacer para sobrevivir, el peligro que tuve que pasar junto a Jeon Jungkook… Necesito irme de aquí. Necesito escapar ya. No puedo con tanto, siento que mi lado cuerdo toma el control de mi ser, inundándome de una profunda tristeza.

 ¿A qué se debe tu tristeza, cariño? Me susurra la estúpida voz que ahora odio.

 Aprieto mis ojos con fuerza, mis manos se hacen puños y las lágrimas vuelven a empapar mi almohada. No quiero pensar en eso. No pienso admitirlo sintiéndome iracunda. No lo diré, porque no es la verdadera razón.

 Sí lo es.

 Muerdo mi almohada para no gritarle a la voz insidiosa en mi cabeza, amortiguando mis sollozos. Es patético. No puedo soportar tanto dolor. No sé por qué duele tanto.

 Porque es Kookie. Y te duele que te haya mentido.

 Duela o no debo huir. No puede importarme, tengo que hallar una manera de regresar a casa. No importa. Mi mediocre vida no era tan mala comparada con esto, ir con mi padre adúltero y mi madre ya no parece tan malo. Pero ya no lo soportaré más.



#3856 en Fanfic
#14999 en Otros
#2416 en Acción

En el texto hay: bts jungkook, mafia amor odios, jungkook romance

Editado: 22.10.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.