¿y si fuera ella?

Treinta y Cuatro

Micaela
 

Canción: I Don't Want to Miss a Thing / Aerosmith 
 


Había llovido toda la noche y podría estar segura de que el frío a fuera debía ser espantoso, pero yo me sentía bien con aquel cuerpo pegado a mi espalda, siento que se mueve, me quedo embelesada observándolo, me apego a él y coloco mi oído en su pecho, escuchó su corazón, tranquilo.

Trato levantarme con el cuidado posible, recuerdo que estoy sin ropa y la mía la dejé en la habitación de al lado, vislumbró un closet, me imagino que ahí está la ropa de Xavier, camino hacia allá, pero el frío es horrible, al abrirlo me encuentro con mi ropa, cómo vino a parar aquí no tengo ni idea; tomó ropa interior y sudadera y entro al baño a asearme.

Tanto Martina como Xavier tiene el sueño pesado en otras palabras, se cae el mundo y ellos durmiendo; así que cuando salgo del baño esta todavía durmiendo, me decido por ir a la habitación de lado por mis tenis, al salir de esa habitación escucho voces, bajo para ver y me encuentro con una señora mayor y una chica, conversan entre ellas y están en la cocina.

- Buenos días – se sobresaltan al escucharme y automáticamente se quedan en silencio, la señora no voltea ni a mirar –

- Buenos días, señorita ... ¿desea algo de tomar? – me siento en la isla de la cocina –

- Me gustaría un café, gracias – asiente y la veo ir hasta la cafetera, al entregarme el café tampoco me mira a la cara –

Camino por toda la estancia deleitándome en las vistas, no es muy temprano, pero por las ventanas se filtra los rayos del sol y el cantar de los pajaritos, huele a hierba recién cortada, a lluvia.

Escucho la risa de Xavier, esta conversando con la señora que me dio el café, siento cierta antipatía de parte de ella, pero pienso que es porque no me conoce. Siento unos brazos rodearme y unos besos

- Buenos días bonita ¿Cómo amaneciste? – quedamos así, viendo hacia la ventana –

- Super bien y tú ...

- Excelente – me voltea, me quita el vaso de café y se lo toma –

- ¿Me llenas el vaso de café Amelia? ... gracias – le dice a la señora y con una gran sonrisa hace lo que le pide –

- Quiero llamar a Martina – está tomándose el café, sentado en la misma isla donde yo estaba antes –

- Bueno, llamamos arriba hay más recepción – asiento y me jala hacia él – te quiero presentar a la señora Amelia, ha estado a cargo de la cabaña por años

- Mucho gusto soy ... - no me dejo terminar –

- Su abuelo que en paz descanse, cuando estaba vivo me comento que usted joven estaba casado – volteo a mirar a Xavier –

- Precisamente Amelia ... esta mujer que ves aquí es mi esposa – frunce el ceño - ¿Cómo te dijo el abuelo que se llamaba? – va directamente hacia la alacena y saca del fondo un papelito –

- Micaela Aragón – Xavier esta con una sonrisa enorme –

- ¿Cómo te llamas bonita?

- Doña Amelia, mucho gusto Micaela Mendoza, bueno Aragón – abre bastante los ojos -

- Que vergüenza, que pensará usted de mí ahora, solamente seguía las órdenes del señor Ernesto que en paz descanse, esta es su casa – esta con los ojos aguados y un tanto desesperada –

- No se preocupe, yo entendí que algo pasaba; pienso que eres una señora leal a tus patronos - su sonrisa es grande, le doy abrazo para que se tranquilice –

Por Xavier me enteré de que él había omitido mi nombre, para ver cómo se comportaba Amelia, ya que él tenía prohibido traer mujeres a esta cabaña. Amelia nos hizo un super desayuno, la verdad lo necesitaba, cuando le comenté que la próxima visita veníamos con nuestra hija, casi le da algo, al saber que su "niño" ya era padre.

Llamamos a la casa y todo está en orden, Martina, Xander, los perros, están en un picnic en el patio de la casa, están tan ocupados que nada más nos saludó. Estoy sentada en la cama mientras Xavier esta en el balcón conversando con alguien

- Bonita ... - me sobresalto ante su llamado –

- Dime – me sonríe y se lanza a la cama, palmea para que lo haga también –

- El abogado me llamó y me dijo que hay un modo de obviar el inciso del testamento del abuelo – frunzo el ceño –

- ¿Hay forma de obviarlo? Si tu abuelo aseguro nuestro matrimonio con miles de incisos, no me llego a imaginar en cuanto al testamento – me sonrió –

- También esta lleno de incisos, pero hay uno que esta nuestro favor, según el abogado tenemos que hacer oficial nuestro matrimonio, ante la junta de socios y así los dos tomar posesión de todo – me muevo y me recuesto en su pecho –

- ¿Qué pasaría con Martina entonces?

- Pues dejaría de ser la heredera de todo, seríamos nosotros – nos señala –

- ¿Podríamos modificar todo después de que pase a nuestro nombre?

- Técnicamente sí, pero ¿Qué quieres modificar? – se sonríe –

- Quiero que todos los nietos tengan parte y si se puede

- Te refieres que incluir a Xander – asiente –

- Y a los hijos de tus primos más cercanos, ¿tengo entendido que muchos trabajan para los molinos?

- Si, casi todos están incluidos en la nómina – me levanto hasta colocarme bastante cerca de su rostro –

- Merecen un poco de lo que dejo tu abuelo ¿Qué te parece?

- Cuando regresemos a Bogotá nos citamos con el abogado – le doy un beso –

- Te tengo algo ... ya regreso

Salgo hacia la habitación donde me arregle ayer, busco mi bolso y lo llevó de regreso a donde esta Xavier, entro y esta mirando hacia el techo

- Volví ... - rebuscó en el bolso y escondo en mi espalda lo que saqué de ahí –

- ¿Qué escondes? – se carcajea –

- Ayer me diste este anillo de promesa y me encanto todo, pero ¿quiero saber que decía la carta rosa? – se sienta en la cama y busca en saco que tenía anoche –

- Aquí la tienes léela en voz alta – me la pasa –

- Dice ... "activación del siguiente ciclo" – me sonrió – "citas indefinidas"




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