Chase succiono mi labio inferior con premura y el beso se trasformó rápidamente a uno necesitado por parte de ambos. Sus labios se volvieron exigentes y trate de seguirle el ritmo, Jasón nunca me beso así, con ansia, con necesidad, con pasión…
Tomo mi cadera con sus manos y me posiciono a horcadas en su regazo, yo por mi parte subí mis manos a sus cabellos húmedos y los sentí por primera vez. La lengua de Chase se abrió paso entre mi boca y sonriendo para mis adentros empezamos una batalla en la que no se sabía cuál sería el vencedor.
Descendí con mis manos palpando el pecho firme de Chase y levante su camiseta negra teniendo la necesidad de sentir el calor de su piel bajo de mis dedos.
Chase interrumpió el beso para pasarse la camiseta por encima de la cabeza y darme una más que generosa vista de sus músculos, volvió a tomar mi boca con ansias y sentí como algo se empezaba a sentir en sus pantalones, interrumpí el beso y trate de apartarme.
***
Chase Connor
Sentir los labios de Amelia fue por mucho la sensación más placentera y deliciosa de mi vida, tome su cabeza y profundice el beso necesitando saciarme de ella, llevo tantos años ansiando este momento, fantaseando con sus labios y con tocar su piel que ahora que la tengo entre mis brazos me parece muy irreal. Pase la mano por su cadera y la apreté contra mi sintiendo la necesidad de sentirla más cerca.
Ella se estremeció y rompió el beso tratando de apartarse.
—Shhh tranquila Lía, solo… déjame sentirte esta noche —susurre muy cerca de su boca con voz ronca y observe sus hermosos ojos antes grises nublarse por la pasión.
Me respiración se volvió pesada mientras la observaba tan cerca de mí que sentí que podría ponerme a llorar. La visión de Amelia me lleno de tanta dicha y felicidad que no supe por un momento como reaccionar.
Acaricie lentamente su mejilla y sonreí complacido al ver que se inclinaba más cerca de la caricia. Algo en mis pantalones palpito y el deseo se volvió imposible de resistir.
Acomode un mechón castaño de su cabello detrás de su oreja y observe sus labios, rosados y levemente hinchados por el beso que acabo de darle y gruñí. Descendí lentamente mi rostro hasta unir nuestras bocas iniciando un beso lento, me permití explorar cada uno de los lugares de su boca. El deseo por ella se volvió cada vez más difícil de resistir y pase mis manos por sus brazos, acaricie la piel de sus pantorrillas y ascendí con mis manos sintiendo la suave piel de sus piernas bajo mis dedos.
Subí la camiseta lentamente hasta que puse mis manos en sus trasero y di un leve apretón, la escuche soltar un pequeño gemido contra mi boca y todo pensamiento racional me abandono.
Me aparte de su boca y esparcí un camino de besos a lo largo de su cuello, llegue a un punto sensible debajo de su oreja y succione su lóbulo para posteriormente morderlo entre mis dientes, Lía se arqueo más cerca de mí y suspiro.
***
Amelia Smith
—Oh Lía… eres tan dulce, nunca me cansaría de este sabor —susurro en mi cuello y un escalofrió de placer me recorrió, sentí como una extraña sensación se apoderaba de mí y se empezaba a formar entre mis piernas.
—Chase… —susurre con la voz entrecortada producto de sus caricias en mi piel, de un solo tirón saco su camiseta por encima de mi cabeza y me quede solo en braguitas ante él.
Sonrojándome trate de cubrirme con los brazos pero él los sujeto y los aparto evitando que pudiera cubrir mi desnudez.
—Eres muy hermosa Lía… no tienes nada que esconder, todo tu cuerpo está hecho para admirar —susurro y acto seguido tomo entre sus manos mis pechos, toco con sus pulgares la punta de mis pezones y observe como descendía su cabeza para apresar uno con su boca.
Gemí sin poderlo evitar, la sensación que me recorrió fue por mucho la más placentera que he sentido. Me arquee dándole mayor acceso y sentí como mordisqueaba lentamente mandándome en un espiral hasta ahora desconocida. Me sujete de sus hombros incapaz de mantenerme firme sola y sentí como sus caricias desaparecían, estaba por quejarme cuando note que me levantaba en brazos.