¿y si lo intentamos?

Capítulo 9: Propuestas

Narra Alice

Desperté cuando mamá me movió el hombro indicándome que el día había comenzado.

-Hice desayuno mi amor, despierta. - dijo suavemente.

Abrí los ojos y me di la vuelta dejando mi cara plantada en la almohada. Mi madre golpeó mi trasero y se fue de la habitación.

Me levanté con pesadez y me dirigí al baño. Cuando me mire al espejo rogué a Dios que Ian nunca me viera recién despierta. Tenía la máscara corrida, mis ojos estaban hinchados y mi pelo tenía la almohada marcada.

Abrí la llave de la ducha y la moderé hasta que quedara en el punto que a mí me gusta. Cuando salí de la ducha, me puse la ropa de hoy y maquillé un poco mi rostro poniéndome un labial rosa pálido que tanto le gustaba a Ian. Sonreí al recordarlo.

Ese hombre literalmente me tenía de cabeza.

Me encaminé a la cocina a través del gran pasillo y encontré a mi padre atragantándose con una tostada de mantequilla.

-Hambriento. - le murmuré mientras pasaba a su lado.

-Atrevida. - dijo mirándome aguantando una sonrisa.

Le saqué la lengua y me senté al frente de él. Cuando vi a mi mamá dirigirse con tazas en sus manos me paré para ayudarla y luego ambas nos sentamos.

-¿Y dime señorita, cuando vamos a conocer a ese chiquillo que te trae en las nubes?.- preguntó papá mirándome por sobre sus lentes.

Una risa nerviosa salió de mi boca. Claro que mis padres sabían del chico misterioso que ha andado rondando nuestra casa, y con él que salgo todos los fines de semana y con él que paso pegada al teléfono.

-Cuando sea oficial. - dije hablando rápido y tomando un sorbo de mi taza.

Mi madre reprimió una risa y mi padre negó con la cabeza con una sonrisa en la cara.

Luego de desayunar, mamá me llevó a a la prepa, al llegar, me bajé del auto y me despedí de mamá. Traté de buscar a alguna de mis amigas con la mirada, pero no encontré a ninguna hasta que...

Mira que interesante.

Vi como Emma y Luke doblaban en la esquina y se dirigían hacia la entrada del establecimiento, él venía causándole tropezones a Emma y ella trataba de esquivárselos dando saltos. Cuando me vio me saludó con la mano y le dijo algo a Luke para luego despedirse con un movimiento de cabeza.

Hubiera sido con un beso en la boca.

Que va.

Emma caminó a paso rápido hacia mí y me saludó con un abrazo.

Al sonar el timbre de entrada nos dirigimos a nuestra respectiva sala, en el camino se nos unió Sam y nos fuimos hablando por el pasillo.

-¿No te parece fabuloso la biología?.- le dije a Aaron mientras veíamos el video que la maestra nos puso para que viéramos cómo funcionan los sistemas del cuerpo humano al mismo tiempo.

-Es fabulosa. - me dijo con la mirada puesta en la pantalla.- Pero sé de algunas personas a las que no le parece tan interesante.- dijo apuntando a las individuas que teníamos en frente.

Dirigí mi mirada hacia ellas y vi como Emma estaba con su cabeza apoyada en su brazo con dirección a Sam para que la maestra no la viera, tenía los ojos cerrados y la boca un poco abierta mientras que Sam estaba dibujando arduamente en su cuaderno garabatos al azar y sacando lapieces del estuche de Emma.

Me reí al verlas y seguí poniendo atención al video.

Cuando la clase terminó, Sam despertó a Emma y ésta se levantó un poco desorientada.

-Ay no Samantha. - dijo acomodando su cabello.- Me dejaste dormir de nuevo.

Se golpeó su frente con la palma de su mano y se dirigió a mí.

-¿Pasaron algo importante?.- dijo preocupada.

Me reí.

-Nada que no puedas encontrar en Youtube.

Suspiró y miró a Samantha que se estaba riendo. Guardamos nuestras cosas y salimos del salón. Me pareció extraño no ver a Ian, no me había avisado que faltaría hoy.

-¿No han visto a Ian?.

-Lo vi en la entrada y después ya no lo vi más. - dijo Samantha rascándose su cabeza.

Fruncí el ceño.

-Oigan, ¿Les parece si vamos al Mall hoy?.- animó Emma.- Escuché que abrieron una tienda de donas y creo que hay que probarlas.- asentí inmediatamente pero Sam se negó.

-Vamos Sam, son donas. - dije tratando de convencerla.

-Me encantaría ir pero tuve unos problemas con mi mamá y tengo que llegar temprano hoy. - dijo rodando los ojos.

-¿Y si vamos otro día las tres?.- dije como una opción.

-¡No!.- dijo Emma al instante.- Digo... hay descuento y am... tengo muchas ganas de comer donas.- dijo asintiendo con la cabeza y sonriendo.

La miré extrañada y reí.

-Está bien monstruo come donas.

Busqué una última vez a Ian con la mirada, pero no lo encontré.

Incluso hasta la última clase del día esperé ver a Ian y me pareció extraño no verlo en todo el día, si Sam me había dicho que lo había visto en la entrada, supuse que le había pasado algo de urgencia así que le marqué a su celular mientras esperaba que Emma llegara.

Dos tonos, cinco tonos y el buzón de mensaje.

No me había contestado el mensaje de hoy en la mañana tampoco.

Intenté hacer memoria para recordar algo que tal vez le haya molestado, pero nada se me ocurrió.

Cuando sonó mi celular vi el nombre de Emma en la pantalla. Fruncí el ceño.

-¿Dónde estás?.- pregunté.

-Alice...- dijo desde la otra línea. - Estoy con el profesor Nelson en la sala de artes, ¿me puedes traer el libro del arte de la época contemporánea?, me salió con un problema en el trabajo de la semana pasada.

-Claro.- dije empezando a caminar.- Voy a la biblioteca y voy para allá.

-Gracias. - dijo de manera desganada.

Pobre mujer, Artes es su peor clase, le cuesta la vida debido a la poca motricidad que tiene con sus manos y odia leer acerca del arte misma.

Entré a la biblioteca y le pregunté a la señora del mesón donde estaba el libro que Emma me encargó. Me dirigí al pasillo que me especificó y busqué el libro; cuando lo saqué una hoja se cayó. Me llamó la atención porque era de un color amarillo pato.



#43043 en Novela romántica

En el texto hay: amigos, amor, primer amor

Editado: 16.04.2019

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