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Capítulo 3
Alexa
– Dale, póntelo – animo a Gareth pasándole una peluca de color rojo. – No me lo voy a poner – afirma con los brazos cruzados, me pongo la peluca rosa y dejo de insistirle. Miro al espejo que está a un costado y el chico que hace un momento se negaba a ponerse el pelo rojo, me lo quita de las manos poniéndose en la cabeza.
Volteo buscando a los que se habían ido por otro lado y los encuentro observando la escena, muevo las manos saludándolos para luego volver a centrar mi atención al pelirrojo falso que estaba mirándose al espejo.
Se ve demasiado simpático.
– Te ves genial – bromeo tocándole el pelo rojo que tiene puesto.
– Oye, lo de ayer... – menciona sacándose la peluca, pero lo callo antes de que siga, tal vez por querer arreglar lo que había dicho ayer, lo empeore.
– Shh, está olvidado – hablo estirándolo del brazo, no quiero que se sienta incomodo por algo que, capaz y lo haya dicho sin pensarlo. Lo llevo hacia donde están los vasos de plásticos de distintos tamaños y colores que serán para el cumpleaños adelantado que haremos hoy, no quería hacer nada, pero como Alisse insistió tanto, yo no podía negarme a ella, sabe cómo convencer.
Mientras Gareth escoge los vasos, voy hacia un pasillo en donde hay varias cosas para el cabello, es mi sector preferido, los colores son tan variados y bonitos que, sin dudar me llevare unas cuantas cositas de aquí.
Mirando entre las cintas que son para el pelo y las gomas coloridas, aparece enfrente de mí una con un diseño bastante llamativo para mí...
¡Son girasoles!
Giro para ver quien lo está sosteniendo y no me sorprende verlo a él. – Es hermoso – exclamo con cierta emoción en mi tono de voz, me emociono con algo tan simple como esto.
– Sabia que te iban a gustar y eso no es todo... – muestra 2 más que tenía en la otra mano.
Sonrío al ver que son 3 colores diferentes, pero con el mismo dibujo. El que me había mostrado primero es negro con el diseño amarillo, los otros dos son blanco y turquesa, con el mismo dibujo que el primero.
– Están de oferta, si llevas tres, pagas dos – informa Gael sonriendo.
¿Cómo no aprovechar esta oferta?
– Claro que los voy a llevar – aseguro con una sonrisa de niña emocionada. Es que Gael sabe lo que me gusta, me conoce demasiado y como no, si somos como hermanos y hasta le llama papá a mi padre, y eso no me molesta, tampoco es raro, raro seria que algún día ellos dejaran de estar con nosotras.
– ¡Son preciosas! – exclama Alisse al ver lo que Gael tenía en las manos, estaba por tomarla y él se los quita. – Son para ella, ya los pago – indica pasándome las vinchas. Otra sonrisa se dibuja en mi rostro.
Alisse se adelanta con varias cosas hasta llegar en donde se encontraba Gareth.
– ¿En serio ya las pagué? – susurro a Gael. – Tu no, pero yo sí, tómalo como un regalo adelantado – me guiña un ojo.
– Eres un amor – exclamo a la vez que lo abrazo por la espalda.
Nos dirigimos a la salida con varias bolsas en nuestras manos, compramos demasiadas cosas.
– ¿Puedo manejar? – murmura Gareth a su hermano, solo para que él lo escuche, pero yo también lo escuche, no se me escapa ni una.
Y si...
Ambos manejan sin tener registro de conducir y puedo asegurar que Gael es más tranquilo que Gareth.
Gael le pasa las llaves luego de abrir la cajuela, metemos todas las bolsas, excepto una que tengo en la mano, veo que Alisse se adelanta subiéndose al lado del copiloto.
Miro a Gael arrugando mis cejas y el encorva sus labios en una sonrisa sin entender.
Subo de un lado y él sube del otro lado.
– ¡No es cierto! – espeta Alisse al ver que Gareth sube en el lado del chofer, miro al que está a lado mío y se encuentra distraído con su celular en la mano, arranca el coche y Gareth se acerca a susurrar algo a mi hermana.
– ¿Qué esperabas eh? – expresa sonriendo de lado, no sé a lo que se refiere con eso, pero Alisse le da un golpe en el hombro ocasionando que Gareth se enderece mirando hacia el frente.
Me acerco a ella y Gareth también me mira por un momento luego vuelve su vista al camino.
– ¿Todo bien? – cuestiono al ver que el ambiente entre ellos se puso incómodo. Siempre se han llevado bien, no entiendo que puede cambiar ahora.
– Todo bien – confirma Alisse poniendo la radio, Gareth solo sonríe negando con la cabeza.
Después de unos minutos Gareth empieza a ir más rápido, miro rápidamente a Gael y me acerco nuevamente en medio del asiento.
– ¿Puedes ir más despacio? – indago, Alisse voltea hacia mí con una mirada confusa. – Le quitas lo divertido a la vida – espeta volviendo a su posición normal. No digo nada, solo me acomodo pensando en lo que dijo, siempre me lo dice...
Y como no voy a temerle a la velocidad, si así mama perdió la vida.
– Claro que sí, lo que digas – bromea Gareth mirando por el espejo retrovisor a la vez que baja la velocidad, una media sonrisa se dibuja en mi rostro.
– ¿Viste las fiestas que habrá para Halloween? – pregunta Gael acercándose a mi deslizando las imágenes del Halloween pasado. – Este fue mi favorito – exclamo al ver la imagen de una pareja disfrazada de Sherk y Fiona.
– Podemos usar ese disfraz este año – comenta y no es mala idea, el año pasado esa pareja ganaron un premio por ser el mejor disfraz de la noche.
– También está el de los Teletubbies – habla Alisse, los Teletubbies son 4 también como nosotros. – Yo sería... – hablo dudando por un momento. – Laa-Laa – decimos Gael y yo al mismo tiempo. – El Teletubbie amarillo – vuelve a hablar, asiento con la cabeza viendo como estacionamos en frente de nuestra casa.
Bajamos del coche con las cosas que compramos y nos adentramos a la casa, adentro huele a comida.