22: Arruinamos Todo.

Core.

<< — ¿Segura que quieres verlo? ¿No es muy pronto?

Mamá me había recogido de la clínica. Al fin me habían dado de alta y el primer lugar al que quería ir era a la casa de Luke.

—Debo hacerlo.

Aparcamos justo enfrente y vimos como Luke iba llegando con su amiga, Natalie. Se veía tan feliz que algo dentro de mí no quiso arruinar eso. Tengo la ligera sospecha de que aparecer de la nada en su vida no sería sano.

—Tal vez sea mejor verlo mañana en la escuela.

No quiero arruinar todo ahora, quiero hacer las cosas bien esta vez.

Eso y sé que si su amiga me ve me matará, me odia. >>

§

— ¿Qué no piensas separarlos?—le dije a Natalie pues todo esto había comenzado por ella.

—No hay nada que yo pueda hacer—alzó los hombros.

Hasta parecía disfrutar esto.

— ¡No los separas porque te gusta que peleen por ti!—dijo Lisa alterada y entró a la casa.

Ay Dios mío, ¿Qué iba a hacer?

Mmm...

Me metí entre los dos. Y recibí un golpe en mi hombro, hasta que grité, pararon.

—A ver par de estúpidos, si no dejan de pelear les voy a meter una patada que ninguno va a olvidar, ¿de acuerdo?—el efecto del brownie se estaba acabando, junto con mi paciencia.

Y ninguno me hizo caso ya que solo me hicieron a un lado y siguieron peleando, no eran muy fuertes y no se estaban haciendo tanto daño, pero después de un rato si lo harían.

Me di la vuelta y no estaba Natalie. ¡Gracias por nada!

Lisa volvió con algo de cinta gris, de esas que usan en los secuestros.

Los separó, les dio una patada a cada uno en la espinilla y les ató las manos y pies con la cinta. ¿Cómo había hecho eso?

No lo sé pero en lo que lo hacía fui a la cocina por el otro brownie que Charlie no se había llevado, tal vez porque lo había escondido, pero no contaba con que sé el escondite de todo aquí. Necesitaba menos tensión.

Salí y todos estaban sentados en la banqueta callados y le ofrecí un pedazo del brownie a Lisa, no quiso, pero Alex me dirigió una mala mirada así que no me comí el resto.

—Me tengo que ir, no dejes que se maten—Lisa dijo y se fue.

Si bueno esto era incómodo.

Estoy con el chico que me gusta y con mi ex novio, además de que ellos acaban de tener una pelea por la novia de Alex, quien parece no tolerarme.

— ¿Quieren entrar?

—Core, déjame ir—dijo Luke.

—No hasta que hablen. A parte no estoy en condiciones de usar tijeras.

Lisa había hecho un muy buen trabajo atándolos, debo de felicitarla después.

—Hablaremos luego, ¿Sí?—dijo Alex y Luke asintió. Bueno era un buen paso—. Solo deja que estemos calmados y listos.

—Está bien—saqué mi navaja del bolso de mi pantalón y corté la cinta de ambos.

¿Qué? ¿Traía esa navaja hace rato?

Luke se despidió de mí y se fue. Alex también y yo me fui a comer.

No esperaba que me día terminara así, y menos quería que Alex y Luke pelearan porque eso formaría una brecha aún más ancha en nuestra amistad, sé que ya estaba un poco dañada por lo tanto no quería quedarme completamente sola.

Estúpidos brownies, tenía mucha hambre ahora.

Alex.

Un par de días habían pasado y no había hablado con nadie, solo con Core en busca de algún consejo.

No me había dolido tanto lo de Natalie, íbamos comenzando y apenas comenzaba a tomarle cariño.

No había superado a Core por completo tampoco. No es tan malo como una infidelidad pero aun así no estaba siendo honesto con Natalie. Pero lo que sí me dolió fue lo de Luke, pues era mi mejor amigo y no esperaba que me hiciera eso, fuera quien fuera la chica.

Así que habíamos quedado en hablar de una vez.

Nos reunimos en una cafetería.

—Perdón—él habló primero. Bueno no esperaba que todo fuera tan fácil—. Sé que con eso no se arreglan las cosas pero en serio lo siento. Fue una estupidez, por un momento estúpido perdí una amistad con Natalie de cinco años y ahora no quiero perder a uno de mis mejores amigos.

—Sabes que te perdono, pero en serio no entiendo. Habiendo tantas personas en el mundo, ¿tenemos que escoger a las mismas? Primero Core y luego Natalie. ¿Qué sigue? ¿Que nos guste Lisa?

Se quedó callado.

Oh, vaya.