Epílogo
Relator omnisciente
Joe Connor golpea con fuerza el escritorio de su despacho emitiendo un grito feroz. No puede creer que nada de lo que hizo haya servido de algo. Su hijo tenía una vida servida en bandeja y optó por tirarla a la basura por perseguir sus malditos sueños. Nada había salido como esperaba. Se metió en negocios sucios para poder sacarlo del fango en el que se encontraba atrapado. Tuvo que mover a las más altas esferas, pedir favores que sabía le costaría caro a sus más encumbrados amistades para hacer desaparecer a esa muchacha insignificante que lo traía de los pelos. No crió a sus hijos para que fueran simples títeres para que alguien más los manejara a su antojo.
Esperaba que el tema de Danna Miller se cerrara para siempre pues ya estaba harto de los lamentos estúpidos de Jason quien seguía revolviendo la tierra aun suelta con la que habían tapado todas las porquerías que habían hecho. Había peligro de que descubriera todo. Tenía que actuar drásticamente o nada habría valido la pena.
Ya era suficiente con que siguiera con la negativa de hacerse cargo de la empresa. Joe Connor sabía que le quedaba poco tiempo en este mundo y necesitaba urgente un sucesor. El inútil de Roger ya había demostrado que no era capaz de estar a la altura. Si, por supuesto que era trabajador y emprendedor pero le faltaba carácter, poder de decisión, ahínco. Y siempre creyó que su hijo Jason tenía todo esto. Pero el muy tonto quería ser policía. El solo recordarlo hacer que la bilis suba por su esófago causándole las ya conocidas molestias padecidas desde hace un par de años. Solo que con todo este tema se habían intensificado.
—Necesito urgente que vengas, Mark —llama a su secretario personal, al que aun conserva trabajando para él pues a pesar de no asistir a la oficina, continúa su trabajo en su eterno despacho.
—Usted dirá, señor —se queda en el umbral obedientemente esperando sus órdenes el secretario.
—Necesito que contactes a alguien pero ya. Te anoté su nombre en este papel, no puedes nombrarlo siquiera, solo marca el número y dile que tengo que comunicarme con él. Cuando lo logres, me pasas la llamada.
—Entendido, señor —dice el hombre cerrando tras de sí la puerta.
Ahora solo quedaba esperar. No sería fácil comunicarse ya que el hombre se encontraba en estos momentos en alguna playa del Caribe disfrutando de unas vacacioones. "Con mi dinero", bufó Joe sintiéndose descompuesto ante los recuerdos de todas sus acciones.
La muchacha que eligió Lilia al final no conseguía el objetivo por el que estaba. Con Roger había sido más fácil hacerlo. "Pero Jason es diferente", se dijo. Le estaba costando horrores lograr que se acercara siquiera a Lara Parker. La chica se esmeraba, por supuesto que lo hacía, pero Jason era un hueso duro de roer. Era la última carta que tenía para jugárselas, solo ella podría conseguir que deje sus estúpidas ideas de independizarse y que siga en el negocio familiar.
"Necesito urgente un heredero",continuaba pensando. Es que quería dejar todo presto para cuando ya no estuviera más. Fue difícil resignarse a eso, no cualquiera se tomaba el tema tan friamente. Él en vez de ponerse a llorar como una nena, simplemente decidió encauzar esas energías para dejar la empresa en orden.
Jason
No entiendo la manía que tienen mis padres de manejar mi vida. He estado fuera de casa durante doce años, desde que decidí encaminar mi carrera, hacer lo que me gustaba. Desde entonces, había sido independiente para todo. Ni siquiera necesitaba su dinero como tantos otros a mi edad. A los veinte años ya tenía un sueldo y me alcanzaba para vivir y tener mis comodidades.
Mamá me tiene harto con sus insinuaciones para que salga con esa muchacha Lara. No entiende que por ahora no quiero nada serio. Sólo deseo concentrarme en el nuevo proyecto. Me siento animado para hacerlo y debo aprovechar esta inyección de energía aunque sea momentánea. "Al menos hasta que ella invada mis pensamientos", me dictó mi conciencia. La espanté instantáneamente, debía enfocarme en lo que sea quecomenzara en mi vida. Estaba conciente que nunca dejaría de buscar a Danna así que esto me ayudaba a seguir, aunque sea con inyecciones pasajeras de optimismo.
Papá también esperaba mucho de mí. Si supiera que estoy tan roto que no puedo hacerme cargo ni de mi vida, quizá pondría sus energías en alguien más. Yo estoy seguro que no soy al que él espera como su sucesor.Tengo otros planes y nunca estuvieron enla empresa familiar.
Hoy estoy con más ánimos así que aprovecho esto para ponerme a planificar. Estoy volviendo lentamente a plantearme los objetivos como lo hacía antes, vuelvo a armar mis planes de acción para organizarme. He vuelto a entrenar y mi cuerpo me lo agradece en todo momento. Todo parece estar fluyendo. Menos el tema que ya sabemos y que tiene nombre de mujer.
Lanzo un suspiro hacia la nada. Solo silencio me rodea en la gran residencia que he adquirido con la venta del departamento, la casa y los ahorros que poseía.
Me he tomado un año sabático para organizar mi vida, aunque no sé si sea suficiente para superar y olvidar todo pero vale la pena intentar. Hoy tengo una cena con los Parker, no me queda otra que asistir. El señor Parker, padre de Lara, podría convertirse en mi primer socio. No puedo arruinarlo cuando esto recién está empezando. Tendré que sacrificarme y ofrecer mi mejor cara para sobrellevar la comida de negocios. "Son solo negocios", me obligo a pensar aunque también estoy un tanto harto de rebotar los embates de Lara, No deja de insinuárseme cada vea que encuentra ocasión. Debo tratarla con pinzas, pues mi relación con su padre se ha convertido en prioridad en estos momentos.