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Saque del microondas la taza con el agua suficientemente caliente como para prepararme un buen té y me quede mirándola. Desde cierto punto sé que Becca tiene razón, no debería cerrarme así, Taehyung tiene pareja, darme una oportunidad con alguien más es lo mejor, pero por otro lado es la peor idea ¿No sería eso utilizar a alguien ajeno a toda mi mierda? Sería demasiado estúpido de mi parte.  

—Ni siquiera debería estar pensando en algo así —Murmure para mí misma sacando de la caja una bolsa de té negro. 

Lo más correcto sería un distanciamiento, el problema a resolver es: ¿Que excusa le pongo para dejar de hablarle? No tengo ninguna buena, a excepción de decirle “estoy enamorada de ti y no puedo soportar esta situación” lo cual está totalmente fuera de discusión, ni muerta diría mis sentimientos, bastante penoso es haberme enamorado como una cría que es incapaz de controlarse a sí misma.  

—¿En qué tanto piensas? Se te va a enfriar el agua y ni siquiera le has puesto aun el té —Me sobre salte al escuchar a mi madre de la nada.  

—Solo estaba pensando en cuál será el final del libro que leo —Mentí poniéndole al agua al fin la bolsita de té.  

—¿Por qué será que no te creo?  

—Porque amarías pensar que mi cabeza está llena de algo más que leer —Conteste con una pequeña sonrisa, cogiendo la taza entre mis manos.  

Pensándolo bien, tal vez hablar con mi madre sobre lo que me atormenta fuera una buena opción, soltarle a alguien todo, quizás hasta me libere de la presión que siento en mi pecho. Por otro lado, podría ser la peor idea del mundo, nunca se me ha dado bien comunicarme con ella, no recuerdo si quiera la última vez que le conté algo que me pasara realmente, tal vez ni si quiera comprenda por qué estoy tan indecisa, o porque no soy capaz de alejarme de Taehyung aunque pienso que es lo mejor, porque siendo sincera, conformarme con ser su amiga es lo más deprimente que podría pasarme.  

—Vamos, se distinguir cuando estas embobada pensando en un libro, no tenías esa cara de tonta característica de ti en esos momentos —Bromeo un poco antes de abrir la nevera—¿Qué tal si me ayudas a hacer la cena y me cuentas al menos un poco sobre lo que te tiene ida? —Sugirió sacando unas cuantas hojas de lechuga.  

—Lo de cocinar juntas no es mala idea… —Musite pensativa.  

—No lo pienses mucho, hace mucho que no cocinamos las dos juntas, en realidad hace mucho que no hacemos nada juntas.  

—Está bien, te ayudare —Conteste dejando de lado la taza—¿Qué quieres hacer de cena? —Pregunte lavándome bien las manos.  

— Estaba pensando en algo ligero, un poco de ensalada con algunos vegetales sofritos o algo así. 

— Agh… 

—Para ti puedes hacerte lo que tú quieras, señora odio las verduras —Dijo con diversión.  

—Sí, definitivamente no me apetece cenar eso —Saque de uno de los armarios una bolsa con pasta—Oye mamá, ¿alguna vez te has enamorado de alguien que no deberías? —Pregunté de la forma más casual que pude, sin siquiera mirarla.  

—Desde mi punto de vista, enamorarse de alguien de quien no deberías está en tu propia decisión, si tú eres la que piensa “no debo” es cuando está mal.  

—Eso no es lo que te pregunte —La mire. 

—Lo sé, pero es mi respuesta, yo nunca me he enamorado de alguien que no deba, pero porque nunca me castigue a mí misma con ese pensamiento —Fruncí el ceño por eso, sin comprender muy bien el punto de su respuesta—Cuando conocí a tu padre, por ejemplo, estaba enamorado de alguien más, pero por mi mente nunca paso un “no debería” solo por eso, hice lo que pude para conquistarlo.  

—¿Y si esa persona ya tiene pareja? 

—Eso es más complicado, pero dime, ¿Has hecho algo por lo que tengas pensar que no debes? Sí, mucha gente podría pensar sobre que no es algo ético, pero si todo el mundo se alejara de alguien porque tiene pareja, ¿No sería eso un desperdicio? 

—Definitivamente no me parezco a ti —Murmure poniendo a cocerse la pasta. Si todo fuera tan fácil como ella lo hizo ver, ¿Por qué me carcome tanto por dentro? No es algo tan sencillo, no puedes ir por ahí metiéndote en la relación de alguien más solo porque tienes sentimientos hacia una de las dos partes, es cruel.