-veo que me extrañaste- dice sarcástico y estira su mano para tocar mi cabello pero por instinto le aparto con un golpe.
-no me toques- la rabia fluye dentro de mí cuando hablo y si sigue aquí no podré controlarme-¡¿Qué haces aquí?!
-Emma, ¿Quién es?- escucho atrás mío y luego veo a luke a mi lado con el ceño fruncido.
-¡oh, pero si es mi amigo luke!- dice con tono alegre fingido.- Emma, tu sí que no pierdes el tiempo. La verdad es que siempre supe me engañabas con él, pero sin resentimientos- mueve su mano con desdén sin dejar de sonreír.
¿Qué le sucede a este? ¿Acaso se hizo una operación en la cara y ahora no puede dejar de sonreír?
-ya cállate imbécil- le escupe luke, igual o más enojado que yo.
-wow tranquilo hermano-alza sus manos en señal de paz y sigue con su maldita sonrisa-Solo vine a saludar.
-déjate de estupideces. No quería tu desagradable visita.-al bajar las escaleras lo empujo con el hombro y suelta una risa burlona.
-será mejor que te largues- escucho decir a luke seguido de un portazo.
Voy hacia mi motocicleta y me monto para después encenderlo. Luke me da una sonrisa reconfortante y lo único que hago es secarme la estúpida lagrima que salió de mis ojos sin siquiera darle permiso.
-vámonos- le digo una vez que se ha subido a su motocicleta.
Acelero un poco y sigo a la motocicleta roja que va más adelante que yo. Esta mañana no ha sido para nada la que yo esperaba que fuese, para empezar tenemos a un completo extraño en el patio de mi casa sonriéndome de manera rara y escalofriante. Después mis planes de quedarme en casa a dormir, arruinados. Y para cerrar con broche de oro... "MI PUTO EXNOVIO EN LA PUERTA DE MI CASA" y esto ya es demasiado.
Jacob Wilson, el estúpido que una vez casi me destruye física y mentalmente, pero el muy imbécil no lo pudo lograr. Le falto ser más inteligente ya que en vez de cerebro tiene popo de Scott- oh pobre chico -así que, lo único que logro fue mi odio y pena hacia él. Jugó conmigo y al final me perjudicó, sí, pero yo no me quede de brazos cruzados, tal vez estuve unos días deprimida porque me dolió, pensé que lo nuestro era enserio, que ilusa. Por él termine mi relación con Mateo, aunque tenía planeado hacerlo mucho antes-, fui estúpida. Cualquiera pensaría que, lo que me hizo no fue "nada" pero cuando te toca vivirlo es algo horrible, sinceramente te sientes la persona más estúpida o es así como yo me sentí. Todo eso ahora ya lo supere, recibió algo mucho peor. yo no pude controlarme y literal casi lo mato pero, ahora...soy inofensiva. Eso creo.
Sólo estuve con él cuatro meses, los peores, y fueron suficientes para darme cuenta que él está enfermo, mal de la cabeza, que está... Loco.
-¡prima de mi corazón!- un grito espeluznante me saca de mis pensamientos haciendo que pegue un brinco, y me doy cuenta que ya hemos llegado a la misteriosa cueva de mis primos.
«¿en qué momento me estacioné aquí? »
La luz del sol no me deja ver bien quien viene hacia mí, pero cuando se acerca más lo reconozco de inmediato.
-¡¡Fabián!!- chillo y bajo lo más rápido que puedo de mi motocicleta. Abre sus brazos con una sonrisa enorme en el rostro y por mi parte hago lo mismo y corro hacia él para darle un abrazo de oso panda.
-¡nos abandonas enana!- dice riéndose y me alza como si no pesara nada.
-¡hey! ¡no soy enana! Y ¡no los abandoné! - me río un poco.
Decido olvidar todo porque prefiero pasarla bien con mis primos y no pensar en cosas que no tienen importancia.
-te extrañamos enana- susurra y ya no sé cuanto tiempo estamos abrazados y al fin logro que se separe de mí. Me mira con una sonrisa acogedora y me alborota el cabello.
- yo también los extrañe. Aunque dudo que me extrañen ya que ni siquiera me dijeron que están viviendo juntos.- entrecierro los ojos y Fabián se rasca la nuca nervioso- ¡además tampoco me visitaste!
Me cruzo de brazos fingiendo que estoy molesta.
- también extrañe tu lado dramático- se burla y me pellizca la mejilla- ya, vamos adentro.
-espera...¿y Luke?- volteo a ver hacia la calle y no hay nadie.
- mientras te quedabas en tu nube voladora soñando, Luke me saludo y se fue arriba- me dice con una sonrisa burlona.
«wow, entrar a mis pensamientos es insoportable ya que olvido todo lo que pasa a mi alrededor»
- mmh... Estaba distraída- le doy una sonrisa de boca cerrada y camino hacia el gran edificio que tengo al frente dejando a mi primo atrás.
La verdad pensé que vivían en un lugar más pequeño, ¡pero que ideas las mías! Esta parte de la ciudad es magnífico, por aquí no transitan vehículos ya que es un poco cerrado y hay mucha seguridad porque... Hay mucha gente con dinero ¿no?