Your True Self

Capítulo VIII

Supe que algo no estaba bien en el momento que abrí los ojos y me di cuenta que estaba en mi habitación.

En MI habitación, siendo que anoche me había quedado en la casa de Asriel.

Miré alrededor.

Las cortinas estaban cerradas. Mi ropa había sido reemplazada por una más cómoda para dormir. Y junto a la cama había un objeto.

Una pulsera… plateada, que era sospechosamente idéntica a la que tenía Asriel.

Si. Algo no estaba bien.

Me levanté y fui directamente a la cocina. Ésta estaba vacía, lo único que había era una nota de Ángel.

“Fui a comprar algunas cosas, te explicaré cuando vuelva, ve televisión o algo mientras. Todo está bien”

Busqué mi teléfono y marqué el número de Asriel. Pulse el botón de llamar.

“El número que usted ha llamado no se encuentra asignado a ningún usuario”

¿Qué?

Revisé que fuera el contacto de Asriel y volví a marcar.

Nuevamente el mismo mensaje.

Muy bien. Algo había pasado, pero no debía ser grave. Tendría que esperar a Ángel.

Tres horas pasaron.

Había desayunado, había visto una película, había regado la pequeña planta que estaba junto a la ventana... la cual podía apostar que no estaba allí ayer.

Había hablado con Johan y mis padres por mensaje.

Y finalmente, producto de la ansiedad, me había comido al menos dos pedazos de pan de jamón y un poco de ensalada.

La puerta se abrió y corrí en dirección a ella. Mi amiga parecía cansada, cargaba una pequeña bolsa. Me miró y sonrió un poco, dejó la bolsa en la mesita de la sala y se dejó caer en el sofá.

La miré expectante.

—Dame un minuto

—Está bien

Ella no me miró por unos minutos, cuando levantó su rostro, la expresión de su cara no me daba buena espina.

—¿Qué pasa?

—Voy a hablar, no me interrumpas demasiado, ¿está bien?

Asentí rápidamente.

—Bien. Esta mañana, muy temprano, me desperté con sed y recibí un gran susto cuando me encontré con Asriel cargándote mientras dormías, en nuestra sala.

Iba a hablar, pero recordé su petición y cerré la boca.

—Obviamente lo interrogué por semejante escena y...

—¿Y... ?

—Al parecer tuvo que traerte porque tenía que desocupar el apartamento muy temprano para los nuevos dueños

La miré incrédulo.

¿Por qué Asriel no me había dicho que se mudaba?

—¿A dónde se mudó?

—No lo sé

—¿No te dijo?

—No, dijo que no podía decirme. Retiró sus papeles de la universidad también...

Esto no me estaba gustando.

—Lo siento Isaac. Él dijo que tenía que irse, no sabía por cuánto tiempo, tiene problemas con su padre o al menos eso me dijo, parecía decir la verdad pero si te soy sincera, algo no me termina de cuadrar. También me pidió que te diera algo

Se levantó y desapareció por el pasillo.

Mientras esperaba, sus palabras estaban dando vueltas en mi cabeza.

¿Asriel se había ido? ¿Por qué?

Ángel volvió al rato con un pequeño sobre.

—Toma —me extendió el objeto y lo tomé nervioso —. Me dijo que la leyeras con calma

Asentí. Me levanté despacio.

—Isaac

La miré.

—Prometió que volvería

Asentí.

Entré en mi habitación cerrando la puerta y me senté en la cama.

Miré la pulsera de Asriel por un momento, había olvidado que estaba en mi mesita.

Saqué la hoja del sobre y la desdoblé con el corazón latiendo fuerte en mi pecho.

"Lamento hacer esto por este medio. Sé que es algo cobarde, pero pienso que fue lo mejor.

Tuve que irme Isaac, los rumores de que ayudé a humanos y peleé con gente de mi raza llegaron al infierno y mi padre me pidió que me fuera con él para tratar de calmar un poco las cosas.

No sé cuando vuelva, de lo que estoy seguro es que no planeo quedarme allí por el resto de mi vida. Volveré, te lo prometo.

Adjunto un número de teléfono, es el de mi tío, el familiar de mi madre que me crió, quiero que lo contactes, él les proporcionará algunas protecciones a ti, a Ángel y a Johan, espero las aceptes, son por su seguridad y me sentiría más tranquilo si ustedes están protegidos. Son las mejores personas que pude conocer en mi estancia en la tierra. Les agradezco por todo.

No te preocupes si no ves a Leo y Lean por un tiempo, no quieren que los relacionen con ustedes por prevención, pero te aseguro que aún así estarán cuidándolos.

Otra cosa. No quiero que de ningún modo pienses que esto es tu culpa. Te aseguro que todo lo que hice fue por voluntad propia, porque los aprecio muchísimo y son importantes para mí.

Concéntrate en tus estudios y haz lo mejor para tu futuro.

Lo único que lamento de este tiempo es no haber podido avanzar más allá de una amistad contigo. Porque ambos sabemos que eso era lo que queríamos. Incluso puedo decir que estaba empezando a quererte de una forma romántica, por eso tal vez no quise despedirme en persona.

No quiero alargar más esto. No es un adiós sino un hasta luego. Gracias por permitirme estar en tu vida Isaac. Nos veremos pronto.

PD: cuida de la pulsera por mí, es un objeto que nos ata a los demonios a un cuerpo humano en la tierra, yo no la necesito por ser un híbrido. Sin embargo, es el primero regalo de mi padre y un recordatorio de mi otra naturaleza. Cuando vuelva, quiero que tú me la entregues, llévala contigo siempre en un lugar no visible, no sería bueno que cayera en manos de un demonio que no es su dueño

Asriel".

No me había dado cuenta de la solitaria lágrima que había rodado por mi mejilla. Aunque él me dijera que no era mi culpa, sabía que en parte sí lo era.

Aún así no me arrepentía de haber compartido este tiempo con él. Era una buena persona, una de las mejores que había conocido. Y lo que había escrito era cierto, quería tener mucho más que una amistad con él.

Volví a la sala. Ángel veía la tele con una gran taza de helado en sus manos. Me senté junto a ella y de inmediato me ofreció la cuchara.



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En el texto hay: erótica, drama, gay

Editado: 09.11.2020

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