You're my soulmate ❁ Hyunin

❥. CAPÍTULO V

Hyunjin dejó la camisa en la silla, sorprendiéndose de lo placentero que le resultaba el desnudarse frente al menor, creía que lo despreciaba, que él lo había utilizado y que merecía su odio, pero... ya no estaba muy seguro, Yang Jeongin se veía tan frágil junto a esa puerta, pobrecito, temblaba de miedo y pese a eso, continuó con lo que hacía.

—La mayoría de los hombres después siguen con los pantalones — dijo él — Pero yo prefiero sacarme antes los zapatos y los calcetines, así es más cómodo — diciendo esto, ágilmente levantó una pierna, luego la otra con excelente equilibrio y se sacó calcetines y zapatos.

Jeongin permanecía en la puerta, con los ojos muy abiertos y una expresión de desamparo en su rostro, Hyunjin sintió que, a su pesar, se conmovía.

—Ahora, debería seguir con lo que tú sabes — le dijo a Jeongin — Así que contaré hasta tres para que te unas con los chinos al otro lado de la muralla o yo tendré que seguir con mi desnudo, comprenderás que necesito dormir. Uno... dos...

Jeongin pestañeó y pareció salir de una abstracción, rápidamente se deslizó desde la puerta hacia el otro lado de las sábanas que hacían el papel de "muralla china".

Sintiéndose muy extraño, Jeongin se sentó en la cama y consideró el hecho de dormir vestida.

—"¿Quién le teme al lobo feroz, lobo feroz, lobo feroz? Jeongin le teme al lobo feroz, lalala lala la la” — canturreó quedamente Hyunjin.

Jeongin se sintió algo ofendido por la canción y decidió no temerle a Hyunjin, total, si él intentaba algo, él...

Lo malo es que seguramente él no intentará nada, bien claro que se lo dejó, le decía su mente.

¡Pues da igual si lo intentara, no dejaría que se saliera con la suya! Se respondió Jeongin.

Mentiroso.

—Ahora estoy hablando sola, —se dijo Jeongin.

—Podrías hablar con Hyunjin, oh, lo olvidaba, él no quiere oírte, tal vez debiste decirle toda la verdad antes —dijo la voz.

—Hyunjin, debí decirte la verdad antes, lamento si piensas que me quise burlar de ti, pero es que nunca surgía la oportunidad de contártelo todo. — le dijo lentamente, él no contestó.

—"Tal vez se durmió" —pensó Jeongin y comenzó a desnudarse para poder ponerse su pijama, distraído, dejó su ropa colgando de la cuerda que sostenía la frazada colgada por Hyunjin.

—Quisiera que sacaras eso de la muralla china — pidió Hyunjin.

—¡Oh, lo siento! Creí que dormías — respondió el menor.

Sacó su ropa y la guardó, se puso su pijama y se acostó.

Hyunjin rio sin ganas.

—No dejaré que mi atracción física por ti influya en mi enojo, no, señor, no dejaré que me manejes como lo has hecho hasta ahora.

—¿De qué estás hablando?

—Nada, nada, a dormir.

El silencio reinó por unos instantes.

—No sé quiénes son mis verdaderos padres — empezó a decir Jeongin —. Me dejaron en las afueras de un orfanato, justo aquí en Busan, tan solo unos días después de que nací, estaba junto a mi amigo, Jisung.

Hyunjin no dijo nada y Jeongin continuó.

—Viví en ese hogar hasta que me adoptaron y me llevaron a Seúl, mis padres… los Yang siempre han sido muy amables conmigo, en ellos encontré la familia que necesitaba, a los doce años conocí a Changbin, ya sabes por mi entorno… y desde que lo vi me enamoré de su belleza, su amabilidad, su dulzura.

Hyunjin escuchaba con atención, y al oír esto último, no pudo reprimir un bufido de furia, pensaba que ella lo estaba comparando con Changbin.

—Él nunca me amó — dijo Jeongin — Todo por Jisung, a él lo adoptó otra familia, los Han eran muy cercanos unidos a la familia de él, y… Changbin, pues, se enamoró de él, aunque Jisung nunca le correspondió, yo fui su premio de consolación, un chico adecuado, de buena familia y lo bastante bonito para ser su esposo.

—Entonces huiste de él para que se pusiera celoso.

—¡No! — la voz de Jeongin sonó escandalizada al decir eso — Claro que no, hui porque quise encontrarme a mí mismo, hacer algo que fuera distinto a complacer a todos los demás. Primero no sabía qué hacer, sólo que quería ser libre, ganar mi propio dinero... luego pensé en terminar mi educación y cuando te conocí, no quise decirte la verdad, porque nunca creí que llegaríamos a ser... a ser...

—¿Por qué no?

—Tú conocías a tantas... no creí que te fijaras en mí y la verdad, Hyunjin, me dabas miedo al principio, todo el mundo me da miedo al principio.

Hyunjin se conmovió con esto.

—¿Todavía te doy miedo?

—Ahora sí, te pusiste tan irracional cuando supiste la verdad.

—Pero ya no estoy molesto — él corrió un poco las frazadas, y le sonrió haciendo que el menor le correspondiera.

—¿Y por qué te molestaste tanto?

—Me puse celoso — respondió él — Yo he visto a ese tipo, Seo Changbin, el heredero, y es tan terriblemente guapo que hasta a mí me gusta — le guiñó un ojo al decir esto, Jeongin no pudo suprimir la carcajada que soltó.

—Pues ya ves que no tienes razón en ponerte así — dijo el menor.

—Es que me comparé físicamente a él, y aunque la altura no importe, yo no tengo por donde ganarle — explicó Hyunjin —. Me pareció imposible que tú me quisieras más que a él, es perfecto a comparación mía.

—Y tanta autoconfianza que decías tener — le respondió Jeongin, coqueto.

—¿Qué hacemos ahora?

—¿Ahora? — repitió él, nerviosa. ¿Pero de qué hablaba él? Estaban en la cama.

—Ahora creo que deberías decirles a tus padres que estás bien, y bueno, que nosotros...

—¿Nosotros qué?

—Tú sabes.

—Nosotros nada, tú jamás te declaraste y yo estoy pensando seriamente en mandarte a freír monos por maleducado, te estabas desnudando frente a mí.

—¿No te gustó?

—No voy a responder eso, buenas noches.

Jeongin se dio vuelta hacia la pared y se tapó la cabeza, Hyunjin rio quedamente y también intentó dormir.



#2060 en Fanfic

En el texto hay: romance, drama, straykids

Editado: 26.09.2022

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.