Yu-Gi-Oh El retorno de los dioses egipcios

Cambiar el futuro

Lyra observa el ocaso, sentada en la cima de un rascacielos moribundo, su D-wheel yace a su lado.

Su amigo Evren murió hace una semana, todo lo que le queda de él es una baraja.

No es justo.

La guerra entre países con la tecnología del duelo de monstruos lo apartó de su vida, y las consecuencias la dejaron en un mundo inhóspito, no quedaba más. Se ha colocado al borde de ese edificio en varias ocasiones, y acabar todo. Pero Magni ha insistido en que puede remediarlo todo con la tecnología de viajes en el tiempo. Él decidió testear su propia versión de la máquina.

Llevan esperando su regreso desde que desapareció en un estallido de luz. Ha tratado de acomodar sus pensamientos sobre cómo arreglarán el mundo, sobre cómo salvar a Evren.

Magni retornó sobre una gran plataforma circular hecha con todo material salvable. No parecía que sufriera consecuencias, seguía siendo un hombre hercúleo, de cabello negro con mechones marrones. Meg se tranquilizó, ella está aferrada a cambiar el futuro, pero por su amor por Luza, que permanecía junto a ella. Garyi le dedica un gran aplauso al hombre, como si ya fuera una victoria.

—Fui a buscar a Paradox y a los otros tres en el pasado siguiendo el rastro que dejaron..., a Paradox lo derrotaron tres duelistas de nombre Jaden Yuki, Yusei Fudo y Yugi Muto. Aporia y Z-ona por Yusei Fudo. —Magni se aparta de la plataforma y se dirige a un escritorio con varias computadoras.

—Solo reconozco el nombre Yugi Muto —comenta Luza.

—Él era el Rey de los duelos. —aclara Lyra, notando que el peliazul eleva una ceja—. Evren solía hablar sobre él. Vamos, eres hermano de Evren, ¿hacías oídos sordos cada vez que hablaba de él?

—Dejando esos temas aparte —interrumpe Magni, evitando que Luza responda—, demostré que la máquina funciona, ahora es nuestro turno de tratar de cambiar la historia.

—¿Qué planeas hacer? Paradox, Z-ona y Aporia fracasaron en sus intentos, ¿cómo triunfaremos cuando ellos no lo lograron? —Lyra se abraza a sí misma, el frío de las noches es mortal.

—Iremos a un momento del pasado donde nuestra presencia no llegue a causar problemas ni llamar la atención de duelistas legendarios —Magni se coloca en frente de todos—, puede que esta línea temporal no cambie, pero crearemos un futuro mejor donde nuestros amigos y familia no sufran las consecuencias del duelo de monstruos.

»Aporia y Z-ona fracasaron contra Yusei Fudo. Paradox intentó asesinar a Maximillion Pegasus para destruir el juego y no resultó. Lo que nosotros haremos será acabar el problema de raíz. Iremos al origen del duelo de monstruos y lo destruiremos.

Lyra mira sus cartas. «Cambiar el futuro...». Significa un futuro donde Evren sigue a su lado, donde no muera por la estupidez humana.

—¿Cómo destruirás el duelo de monstruos? —Meg alza su mano.

—¿Siquiera sabes dónde y cuándo se originó? —inquiere Luza.

Magni teclea una de las computadoras, y frente a todos aparecen hologramas de seis cartas de monstruos. El dios del sol, el dragón carmesí del cielo, el poderoso dios guerrero, el demonio de las llamas abrasadoras, el señor del trueno golpeador y el demonio de los fantasmas.

—¿Los dioses egipcios y las bestias sagradas? —Luza da un paso hacia el hombre—. Magni, Paradox no logró derrotar a Yugi Muto, y las bestias sagradas desaparecieron en un momento inconcreto del pasado.

Magni nota que sus amigos dudan demasiado, debe ser porque no son duelistas profesionales como él, lo que es irónico porque es quien más odia el duelo de monstruos. No puede permitir que se echan hacia atrás, excepto Garyi. Si Magni decidiera saltar de un puente, él lo seguiría.

—Esas son las ventajas del viaje en el tiempo, amigo mío —prosigue—. No es necesario robarle las cartas a Yugi Muto. En un año posterior a los grandes logros del Rey de los duelos, se crearán copias de los tres dioses egipcios. Lo averigüé durante mi primer viaje. Lo sé, no son los originales, pero seguirán siendo el pináculo del poder. Las bestias sagradas las podremos conseguir si retrocedemos a un momento anterior a su desaparición, y obtendremos el poder que utilizaremos para destruir el duelo de monstruos.

Magni permitió que Luza, Meg y Lyra se dieran tiempo para decidir si participar o no en esa misión.

Meg y Luza se apartaron a una habitación lejana. Desde la muerte de Evren Luza y Lyra apenas se juntan y hablan. No sabe el porqué. ¿La culpará por la muerte de su hermano? ¿Será cuestión de celos por lo unida que era a él? No tiene sentido comerse el cerebro con esas dudas.

Lyra vuelve a la cima del edificio y observa cada carta de la baraja de Evren. Él emanaba fuego cada vez que participaba en un duelo, no retrocedía, aunque todo parecía estar en su contra, y sonreía como un niño. Ella admiraba eso. Él dedicó parte de su tiempo a enseñarle a ella a jugar, le entregó la carta Cazadora del caos, porque según él, le recordaba a ella.

Siempre estuvo presente para Lyra. Si ella se ponía a llorar por algo que sucedió en su vida, él atravesaba la ciudad con su D-wheel e ignoraba los duelos para consolarla. Era un sol.

«Puedo recuperarte, Evren, evitaré que mueras», piensa ella, sentándose en el suelo y mezclando las barajas de ambos. Magni explicó que es posible que de ser descubiertos intenten detenerles; de ser así, usará el poder de las cartas de Evren para que no interfiera quien desee interponerse.



#552 en Fanfic
#2409 en Otros
#212 en Aventura

En el texto hay: fanfic, aventura, yugioh

Editado: 16.04.2025

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.