Un titán de cuerpo como roca, de color azul oscuro, posee un par de palas y picos sobresaliendo de su cabeza y hombros. Sus ojos son rojos como la sangre pura, y porta una gema en su frente.
El tercer dios egipcio se encuentra en el campo.
Obelisco el atormentador posee cuatro mil puntos de ataque y defensa.
—¡Dioses egipcios, destruyan a los monstruos de mis rivales!
Slifer, que posee cuatro mil puntos de poder, destruye a Dragón meteoro de ojos rojos con su ataque atronador. El dragón alado de Ra, en su forma fénix, se deshace de Guardián del santuario al estrellar su cuerpo contra el monstruo. Por último, Obelisco el atormentador, acaba a Dragón lanza, el monstruo boca abajo de Kael, aplastándolo con su puño de furia.
—¡El efecto de Guardián del santuario se activa y resucita en modo de defensa! —menciona Kael.
Es el turno de Aelric, y toma su carta, la única en su mano ahora.
«Yo y Kael hemos utilizado casi la mitad de las cartas de nuestra baraja». La carta que tomó es Olla de la dicotomía, eso significa dos cartas más, pero ¿qué puede hacer?, la gran parte del arquetipo «Espada de la destrucción», se encuentra en su cementerio, así como Renunciado. Ha perdido toda forma de ayudar que no sea defenderse.
Kael tiene la posibilidad de traer a su Dragón de cinco cabezas. Rayos, están muy justos, en poder superar a los tres, pero Magni podría destruirlo con un efecto. Si lograra revivir al Paladín oscuro, la ventaja volvería, pero es poco probable una carta que apoye ese plan.
Aelric suda como si hubiera sido parte de una carrera en la que debió bordear todo un país. Están en una cuerda floja.
—Utilizaré Olla de la dicotomía. —Muestra la carta—. Regreso tres cartas de mi cementerio a la baraja y obtengo dos cartas más. —Observa sus nuevas cartas. «Nada mal», piensa—. Invoco de modo especial a Caballero del loto rojo.
Un guerrero de armadura azul profundo, cabello como el cobre, parte su rostro cubierto y una gran espada que le supera en tamaño.
Caballero del loto rojo es un monstruo de efecto tipo guerrero y nivel seis. Su ataque es de dos mil cien, y defensa de mil ochocientos. Puede ser invocado de modo especial al poseer tres monstruos normales en el cementerio y retirar dos.
«Regresé a Buster blader, renunciado y la cría buster, eso podría darnos oportunidad de cambiar el balance del duelo».
—Activo la carta Poder del guardián —Equipa la carta a Caballero del loto rojo—, y utilizaré el efecto del Caballero para invocar de modo especial a Megalodespedazador x en modo defensivo.
El reptil prehistórico marino retorna del cementerio al lado del Caballero del loto rojo.
—Mi turno —anuncia Magni, tomando una carta—. Invoco a Edea, y ya saben qué significa, la invocación especial de Eidos.
Ambos monstruos aparecen en el campo. Uno al lado de otro.
—¡Sacrifico a ambos para traer a mi monarca más poderoso: Thestalos el monarca del fuego de sombras!
El poderoso monarca supera en tamaño a sus antecesores. Llamas fatuas con forma de cráneos le rodean y los picos en sus hombros son superiores a su versión mega monarca, así como los cuernos de su casco.
Thestalos el monarca del fuego de sombras, es un monstruo de efecto piro y nivel diez. Tiene tres mil puntos de ataque y mil de defensa.
—Por el poder del gran Thestalos, destierro una carta de tu mano, Kael, y por ese efecto recibirás mil puntos de daño. —Señala la carta que desea desterrar.
Kael arquea una ceja, dudando el valor de su carta en ese punto del duelo, resultó ser Dragón metálico de oscuridad de ojos rojos. Sus puntos de vida, compartidos con Aelric, disminuyen hasta tres mil cien cuando se deshace de la carta.
—Obelisco, ataca a Caballero del loto rojo.
El dios egipcio lanza su puño contra el guerrero.
—¡Activo el efecto de Poder del guardián, el cual es que gana un contador mágico, el cual retiro del campo para evitar su destrucción!
Una esfera de color verde, y dorada en su centro, se interpone entre el dios y el guerrero, evitando la destrucción del segundo.
—Slifer, Ra, destruyan a los otros dos monstruos.
Slifer, que ahora posee tres mil puntos de ataque, destruye a Megalodespedazador x, Ra acaba con Guardián del santuario.
«Una lástima no tener más monstruos tipo dragón en el campo», piensa Kael.
—Activo el efecto de Ra, a cambio de mil puntos de vida, destruyo a Poder del guardián. —Sus puntos de vida bajan a cuatro mil doscientos.
—Adiós a nuestra mejor defensa —dijo Aelric.
Kael roba una carta.
—Haz tu jugada, Kael, a este punto del duelo será insignificante —añade Magni.
—No será insignificante, porque tengo de mi lado a Aelric. Este duelo no habrá sido como esperábamos al tomar la decisión de unirnos, pero hemos trabajado juntos hasta este punto, en la medida de lo posible.
»Te hemos dado una larga batalla, nos hemos defendido de cada ataque de los dioses egipcios y los monarcas. Tengo a mi lado a Aelric. Y verás el poder de eso.
Editado: 07.07.2025