CAPITULO II

Carlota

Ya estoy terminando mis estudios, ahora mismo me encuentro terminando los problemas de formulación química, mi ventaja es que yo hago la formulación por valencias mientras que el resto de la clase lo hace por la tabla periódica de los elementos, lo que me permite poder comprobar si estoy en lo correcto. Cuando el profe nos pidió los ejercicios, yo los hice de las dos formas así que podía dar el resultado más correcto fui la última en entregarlos. Al salir de la clase estaban mis "Ángeles de Charlie" y como era habitual se pegaban a mí para que no me ocurriese nada, ya nadie se me acercaba, y realmente no me importaba lo más mínimo sólo quería terminar el Instituto e irme a la Universidad.

Luna

Todavía no le he dicho lo que soy y me da miedo que me deje por ser eso.

Chófer: “Mi Señora esta noche es luna nueva. Es el momento de realizar el ritual.”

Luna: “Lo sé amigo mío, pero necesito primero hablar con ella para que sepa lo que le espera…”

Chófer: “Ella aún sigue aturdida cuando recuerda como la bajaste de las murallas…”

Luna: “Puede ser una forma de decírselo…”

Chófer: “Pero recuerda que hasta dentro de unos seis meses lunares no volverá la ocasión para realizar el rito… una cosa, me han advertido que los padres de su Alma están buscando revertir la situación. Hasta ahora sólo han hablado con gente leal a nosotros, y les he indicado que los entretengan como mínimo siete meses…”

Luna: “¿Crees que podrían ser alimento para nosotras?”

Chófer: “Sin lugar a dudas, el único inconveniente es ese tal Andrés ya que es un cazador, pero del nivel más bajo ni siquiera sus compañeros confían en él…”

Luna: “¿Es muy débil?”

Chófer: “Por eso no confían en él, ya que es muy débil y aparte suele ir por libre y así tenemos los peligros del cazador eliminados por él mismo, ya que nunca piensa antes de realizar algo. Algunos instructores lo utilizan para entrenar a los nuevos guardias sin necesidad de marcarlo…”

Luna: “La próxima vez quiero que lo marque mi Alma para que sepa que debe hacer cuando se enfrente a los cazadores.”

Después de hablar con mi amigo y chófer, Raptur, me dediqué a gestionar mi empresa. Muy pocos humanos conocían mi condición, ya que, al principio, se lo tomaban a risa, pero cuando me mostraba como era la mayoría me temía sólo un par de ellos me miraron como si fuese igual que ellos. La siento llegar y ya le he dicho al personal de servicio que la lleve a mis habitaciones.

Luna: “Tengo que hablar contigo de un tema delicado…”, la veo aterrorizarse al creer que la voy a dejar de vuelta en su casa. “…tranquila no es eso de que te voy a llevar de vuelta a tu casa… es más si aceptas la propuesta que te voy a hacer es posible que tengan más miedo de ti.”

Carlota

Después de un día duro en el instituto y terminar el examen de formulación llegué a mi hogar, ahora sí podía sentirlo y decirle así. Me extrañó que mis "Ángeles de Charlie" me impidiesen subir hasta mi habitación, desde que están conmigo nunca hablan solo actúan, y ahora no iba a ser la excepción. Me llevaron hasta el despacho de Luna, algo se estaba cociendo y creo, que no iba a salir bien parada.

Luna: “Tengo que hablar seriamente contigo de algo que nos incumbe a las dos. ¿Crees en los seres… por así decirlo sobrenaturales?”

Carlota: “¿Se refiere a los vampiros, hombres lobos y demás similares?”

Luna: “Sí.”

Carlota: “La verdad nunca me lo he planteado… pero mi hermano y mi ex si creían en ellos…”

Luna: “Normal ambos son cazadores de vampiros… ¡QUITENSE EL MAQUILLAJE!”