Capitulo 17

Tip 6. Jugar, abrazar, tener contacto físico y amistoso.

Me quedé callada.
¿Gustarme Alejandro?
Mire con dulzura y Alegría a Jean.

No, no me gusta Alejandro porque me gustas tú y es tonto porque tú ya sales con alguien.
Ale es increíble, desde que lo conocí y aunque se muy poco de él he descubierto que detrás de esos ojos apagados e inexpresivos hay un mundo oculto.

Eso me hubiera encantado decir, pero solamente desvié mi mirada y no conteste.

— ¡Lind! —me gritó emocionado Guillermo, interrumpiendo la pequeña pausa de silencio que se había creado, mi pequeño hermano se aventó a mi agarrándome por la cintura con emoción— ¡Papá! ¡Papá volvió! —Exclamó.

Volteé a los lados sorprendida y agarrando a mi hermano de la mano, de nuevo mire a los lados buscando a quién Guillermo había mencionado.
Como si me hubieran dicho "Mira tu casa" fije mi mirada y aguce mi vista hacia mi casa y ahí estaba él.

Era mi papá...
Apenas podía procesar que era mi padre, la última vez que vino solo estuvo un día y solo estuvo por el problema que hubo con Julie y eso fue hace Seis meses y antes de eso fue hace dos años y medio.

Él estaba ahí, dejando sus maletas en el inicio del Jardín, observaba las plantas y la pequeña casa de Jeansey que había hecho y sembrado Alejandro.
Tenía puesto su traje militar, mis ojos se iluminaron y llenaron de lágrimas, era mi papá.
paso su brazo por su frente para secar su sudor.

No pude esperar más y solo me despedí de mis amigos con prisa y salí corriendo junto a mi hermano para ir a recibirlo.

—Chicos, Nos vemos mañana en la escuela, adiós —Dije.

Los chicos ni siquiera pudieron responder pero entendieron lo que estaba sucediendo y solo sonrieron, Guillermo me soltó la mano y corrió más rápido hacia a la puerta de nuestra casa para brincar y abrazar por la espalda a nuestro padre.

— ¡Papá! ¡Papá! —gritó con emoción mi hermano.

Detrás de mi hermano llegue yo con mis ojos cristalinos, cargo a Guille y nos abrazó a ambos.
Él empezó a reír mientras yo lloraba y lo abrazaba con fuerza, la última vez se fue a Texas sin despedirse y no sabíamos si lo volveríamos a ver, y regreso, regreso antes del año.

Sentía una inmensa felicidad dentro de mí, era mi papá, estaba de vuelta en casa, con nosotros.
Quería abrazarlo eternamente, cada día le pedía a Dios por él, que lo cuidara y nada le pasara, lo abrace con más fuerza y él me beso la coronilla de mi cabeza.
Se alejo de nosotros un momento y nos observó con un inmenso brillo en sus ojos.

— ¿Qué te hiciste en el cabello? —me preguntó mientras tocaba mi cabello y media que estaba sobre mi hombro.

—Alejandro le tiro un poco de pintura y se lo tuvo que cortar —le respondió Guillermo resumiendo todo lo que pasó.

—Me gusta el nuevo cambió —me sonrió — ¿Alejandro? —Nos miró un poco extrañado.

—¡Si! ¡Es mi nuevo hermano! —Hablo con fuerza mientras alzaba sus brazos llenos de emoción.

— ¿Hermano? —preguntó mirándome a mí mientras bajaba a mi hermano para que le diéramos una mejor explicación.

— Es un amigo de mi mamá, él estará con nosotros por un tiempo —explique un poco y mi progenitor frunció el ceño un poco disgustado.

Pero ignore eso y solo lo abrace de nuevo, extrañaba a mi papá, él suele ser muy amoroso y cariñoso, siempre parece estar serio o enojado pero eso es por su trabajo.
Es una gran persona por dentro.
Es militar y por eso siempre anda fuera del estado, mi abuelo también fue militar y la mayoría de la familia paterna lo es o lo fue, pero no conocemos a nuestra familia paterna, ya que según mi mama hubo un problema hace muchos años que los alejo.
Mi papá ya es un héroe para mí, siempre está fuera de casa por su trabajo y solo lo vemos una semana o meses cada cierto tiempo, por eso estoy muy feliz.

— ¿Podremos ir al acuario está vez? —le preguntó Guillermo dando dos brincos— ¡Ya cumplí nueve años Papá!

Yo me reí, mi padre revolvió su cabello y asintió con su cabeza para luego agarrar su maleta y entra a la casa.

— ¡Ale! —exclamó Guillermo al ver a Alejandro en el sofá, se encontraba leyendo.

Este al escuchar al menor sonrió levemente e hizo a un lado su libro para voltear a ver a Guille, cuando su mirada se encontró con la de mi padre, se quedaron mirando, estaba sorprendido. Seguido desvió su mirada hacia mí y pareció como si de alguna manera hubiera reaccionado, miró a mi padre de nuevo y se incorporó del sofá para saludarlo.

—Mucho gusto Señor Daylin —le extendió la mano.

Mi padre se lo quedó mirando, su sonrisa se volvió una mirada fija y sería.

—Es un gusto volver a verlo señor Grant —le respondió.

¿Qué fue eso? ¿Ya se conocían?

Me quedé mirando a ambos desconcertada.

—. Lind, cariño ¿Puedes ir con Guillermo al súper que está a la vuelta? Trae golosinas y cosas para que cuando llegue su madre le demos una sorpresa—menciono y saco dinero de su bolsillo para dármelo.

Era super obvio que quería que nos fuéramos de la casa, sentí super raro el ambiente, pero Guillermo al escuchar golosinas empezó a jalonearme para ir a comprar.

¿De dónde lo conoce?
¿De qué querrá hablar con Alejandro para hacer que nos alejemos?

Moví mi cabeza a los lados con duda, contraje mi boca dudando si hablar o no, apreté mis labios y gire sobre mis talones con la cabeza baja, no me gusta quedarme con la duda, pero creo que es lo mejor por ahorita ¿no?
Camine con mi hermano a un mini supermercado o una pequeña tienda comercial, Iba pensando en lo sucedido y jugando con mis manos, en el camino los chicos me vieron, ellos seguían en la casa de Law.

— ¡Hey! —exclamó Law al verme pasar.
Alce mi cabeza y saludé con una sonrisa, Isme me miró y al verme pasar los tres fueron detrás de mí.