A Través De Mis Sueños

Capítulo 4

Había pasado dos días y Eleanor todavía no se contactaba conmigo. Luego de que le haya preguntado, si tiene algún contacto de Evan. Pensaba que, tal vez, ella no quisiera que me contacte con él, o tal vez, tenía alguna referencia horrible de mí. Sin embargo, no quedé estancada.

Seguí buscando. Todavía mucha información al respecto, pero aún así, llegué muy lejos con lo poco que tenía.

—¿Hola? Me llamo Jenna —hablé una vez que, desde la Universidad de Chicago, me había atendido. Sabía que Evan, fue un estudiante de ahí, sin embargo no estaba segura si sus estudios habían continuado. Pero me arriesgué, una vez más.

—Habla con la Universidad de Chicago. ¿En qué podemos ayudarle?

—Quisiera saber si una persona que estoy buscando, estudia allí. ¿Hay alguna posibilidad de saberlo?

—¿Usted es familiar?

—No, era su amiga. Y necesito encontrarlo. Es un demasiado urgente.

—Mire, usted puede fijarse en nuestra página oficial el listado de los alumnos inscritos de cada año.

—Okay, entiendo, pero... ¿cómo sé que si sigue estudiando allí?

—¿Cuál es su nombre?

—Evan Rogers.

—¿En qué año ingresó?

—Dos mil diecinueve.

—Espere un momento, por favor.

Esperé un buen momento para ser sincera, hasta que, la mujer, del otro lado dijo:

—Él ya no es alumno de aquí. Dejó hace dos años.

—Entiendo. ¿Hay algún contacto dónde yo puedo ubicarlo?

—Eso ya no podemos decirle, disculpe.

Me rasqué la nuca algo nerviosa y frustrada.

—Entiendo. Lo siento, tiene razón —dije—. Muchas gracias.

—Qué tenga un buen día.

Corté. A los minutos que corté, los mensajes de Eleanor se hicieron ver en las notificaciones de mi teléfono. No pestañeé que ya lo había agarrado entre mis manos. Mi pulso comenzó a acelerarse mientras leía su mensaje.

Eleanor: Siento responderte tarde, estuve muy ocupada y no uso mucho esta red social. Cómo te decía, conozco a Jace y a Evan, pero tenía más relación con Jace sinceramente... Evan siempre fue más reservado y no hablábamos mucho. Los he conocido. Los conocí en la Universidad de Chicago, pero Evan dejó y Jace siguió. Luego de haberme recibido, fue difícil volver a verlos. Jace se recibió y no lo vi más y no hablábamos seguido. Y de Evan... hasta hace unos años, sólo hablamos lo justo y necesario.

Eleanor: ¿Por qué los buscas tan urgente? Siento ser entrometida pero pareces muy preocupada. Y haces que me preocupe también.

Jenna: ¿Quieres saber la verdad?

Jenna: He estado pensando en él últimamente y he estado soñando con él, aparece a través de mis sueños y no puedo evitar pensar que, tal vez, le ha pasado algo malo. Evan, en los últimos tiempos, tenía comportamientos raros y pensamientos muy malos. Hemos hablado durante muchos años, y luego perdí contacto con él. No dejo de pensar que le ha pasado algo.

Jenna: Perdí contacto con él hace más de 4 años. Sé que es mucho tiempo pero pasaron muchas cosas.

Eleanor: Entiendo, entiendo todo. 

Eleanor: Yo no vivo cerca de él pero tampoco vivo muy lejos. Tal vez encuentro la manera en comunicarme, pude fijarme hace unos momentos si lo tengo en mis contactos o redes sociales pero definitivamente desapareció. Y de Jace también. Tal vez cambiaron de número y los perdí. 

Eleanor: Tranquila. Te ayudaré a encontrarlo. Tengo contacto con los amigos. 

Eleanor: No sabía que de esta relación de él. Aunque siempre fue de pocas palabras.

Jenna: ¿Tienes algún número en particular? Puedo contarte más, para que puedas ver que soy de confianza.

—¿Jenna? —me llamó Connor. Levanté mi mirada del teléfono.

Dejé mi teléfono a un lado para prestarle atención.

—Pareces muy feliz.

¿Ah sí? No lo había notado. Tal vez estaba feliz porque estaba más cerca de lo que quería.

—Oh... —comencé a decir—. Lo siento.

—¿Por qué te disculpas? —preguntó él casi riendo, mientras se acercaba hacia mí.

Estábamos en casa y habíamos llegado de trabajar. Me gustaba mi trabajo aunque no me gustaba estar cerca de personas que yo sabía que no me iban a traer absolutamente nada bueno.

Connor se sentó en el sofá conmigo, a su vez, que buscaba una película. Le solté algo que, tal vez, no esperaba pero hoy había sido un día incómodo en la oficina—. ¿No crees que no le caigo muy bien a Brianna?

—Eh... —Parecía muy pensativo. Respondió, obviamente, sin mirarme—: Tal vez. Pero no tiene malas intenciones. No debes preocuparte.

Me removí en el lugar para quedar cara a cara con él, a pesar de que seguía sin mirarme. Estaba muy concentrado buscando una película, que al parecer sería de acción—. ¿Tal vez?

—Sí. Ella es muy... particular.

Levanté mis cejas. Qué lástima que no me esté viendo—. Particularme una tonta —dije ya enojada—. No la culpo por tener completos de inferioridad pero, ¿hace falta que menosprecie todo lo que yo haga? Cada vez que, en el trabajo, completo unos documentos en fecha y hora, lanzo unos proyectos, cada vez que doy una idea innovadora, no sólo a los demás les gusta sino que quieren tomar esas ideas pero ¿adivina quién las rechaza? 

Connor suspiró. Creo que me metí con alguien que a él le importa mucho. No ignoraba el hecho de que Brianna y Steve con él, han sido mejores amigos desde hace millones de años. Ni siquiera yo existía en este mundo. 

Él, al final, fijó su mirada en mí—. ¿A qué viene todo esto? 

Al parecer no podía ni siquiera opinar sobre su mejor amiga. Sabía que no tenía voz en este tipo de situación pero ¿no notaba que ella era la persona que más denigraba a otras personas?



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En el texto hay: desamor, romance, amor

Editado: 05.04.2024

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