Pronuncia un nombre que no es el mío.
¿Recuerdas cómo me llamo?
Porque hay veces que lo olvido.
Deja desvanecer los reclamos.
Si quemo todas las cartas
ponme sobre la mesa
y enciende velas.
Seré mejor persona que esta mañana.
Si olvido mi cumpleaños
¿Me lo recordarías?
No te preocupes por el horario
porque nunca hay suficiente tiempo.
Si necesitaras calma
¿Me dejarías transmitirla?
Todo lo que siento se vuelve una cuerda
que enrosca mi cuello y me gusta.
Estoy cansada de confundir la realidad.
Y me desespera no saber cuándo el futuro empieza.
Porque sigo mezclando a mi yo anterior, a mi yo de ahora,
y a la que vendrá.
¿Hay alguna receta para no perder la personalidad?
Llévame a dormir y quédate conmigo.
Revisa que tenga a mi peluche favorito.
Yo te arroparé y cantaré una canción.
No sé cuál es mi DNI
ni cómo era la tierra donde nací.
Pero hay momentos de frenesí
donde recuerdo cómo ocurrió cada cicatriz.
Quiero separar a quién soy de cómo luzco.
Las palabras crueles en mi mente las endulzo.
No quiero que mi pasado limite lo que soy.
Las sombras en mi cabeza no desaparecen ante la luz.
"¿Puedes cambiar la manera como te ven?"
Deberías pensar en cómo tú mismo te ves.
¿Tantos podemos entrar
en esta habitación pequeña?
Despedázame y vuélveme a armar.
Las personas alrededor
se ven muy diferentes a mí cuando me miro al espejo.
Encuentrame en una caja
o fuera de mi cerebro dentro de mi casa.
Cruzarte con alguien que te acepte es demasiado bueno.
Es cuando empiezas a odiar las despedidas.
Dame una prueba que esto no es un sueño.
¿Podrías testear que estamos de verdad con vida?