Haz intentado sacarme de tu vida tantas veces que no recuerdo cuantas veces he tenido que correr detrás de ti para intentar sobrevivir un día más a cierta indiferencia, y es que no sabes lo difícil que es tratar de cambiar tus múltiples estados de ánimo, porque no comprenderás jamás el sentimiento que emana de mi interior al recibir una sonrisa de tus labios. Te has preguntado, ¿por qué siempre tomo como prioridad tu felicidad? Porque de allí parte la mía. ¿Sabes por qué intento siempre conversar contigo cuando las cosas están mal? Porque no soporto tu indiferencia, no soporto tenerte cerca y que ni siquiera me dirijas una palabra, porque no soporto sentirte lejos cuando estamos en el mismo lugar. Y es que para ti es una rabieta, un capricho; para mí es que estoy haciendo algo mal. Es que siento que te vas cuando se supone que debes ir llegando.
Y es que quiero contigo la vida entera y no solo momentos para recordar…
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Editado: 24.10.2020