Capítulo VI
Monterrey.
Erika ayudaba a su madre, a preparar las fiestas sería algo sencillo en el jardín de la casa del padrastro de ella. En el patio trasero se encontraba un jardín, a un lado de un pequeño lago que de noche se iluminaba con bellos faroles sostenidos por unos hermosos pilares esculpidos y un sin número de focos. El jardín contaba con diferentes enredaderas que cubrían las paredes con hermosas flores rojas y rosas; en el centro del jardín se montó un escenario para que los músicos tocaran, y una pista para bailar, las mesas serían acomodadas alrededor de la pista. No serian más de 50 personas solo la familia y algunas personas cercanas.
Su madre se encontraba feliz al contar con la asistencia de sus 2 hijos, por fin Eduardo y Erika se reuniría para celebrar el cumpleaños de su madre, nada podría hacerla más feliz.
Eduardo y Erika eran hijos de Anton Salers primer esposo de Sandra quien al divorciarse de ella se desentendió de sus hijos volviendo a su país Noruega, el había viajado a México por trabajo y se había enamorado de Sandra cuando ella vino a trabajar con él, pero tres años de matrimonio terminaron cuando ella no quiso viajar con el de regreso a Noruega, después de encontrarlo besando a su muy joven asistente, quien viajó con él a su país.
Para Sandra en principio fue una tragedia a la que tuvo pronto que sobreponerse pues tenía unos gemelos de 2 años que amaba con todo el corazón duró doce años sola porque su trabajo y su familia la absorbían completamente era una magnífica arquitecta. Cuando conoció a Manuel Aguilar, él fue muy insistente en salir con ella y la fue conquistando poco a poco. Cuando le propuso matrimonio en la playa con la luz de la luna, le dijo: yo se que tu eres la mujer que amaré toda la vida, así que puedes quedarte conmigo para que te lo demuestre o puedes decir que no…y aún así insistiré en hacerte feliz por favor acepta ser mi esposa. Sandra no lo dudo lo había tratado 5 años 3 de amigos y compañeros mas 2 de novios.
Recordar todo esto realmente la ponía muy nostálgica, pues fue en su cumpleaños; así que cuando Erika se acercó Sandra tenía una pequeña lágrima en sus ojos. ¿Que pasa mamá? ¿Todo está bien? -Preguntó Erika un poco extrañada-¿ porqué estas llorando?
No me pasa nada solo me siento muy emocionada de que de nuevo vuelva la familia a estar juntos-contesto tomando a Erika de la mano.- sube pronto, sobre la cama de tu habitación esta tu vestido y zapatos que trajeron de la tienda. Ve a cambiarte rápido no tardan en llegar los invitados.
Es muy tarde mamá sube tu también ya no tardan en llegar los invitados.
Adrián y el abuelo habían viajado esa misma tarde para acompañar a Erika y su familia en este evento. Cuando llegaron Adrián saludó a su suegra y preguntó por Erika; Sandra le señaló hacia un grupo de jóvenes que reían alegremente. Adrián miró incómodo al grupo cuando notó que uno de los hombres del grupo abrazaba a su esposa. Decidió no acercarse y le pidió a Sandra que le indicará su lugar.
En la mesa principal obviamente, eres familia y le beso la mejilla. El abuelo y Adrián se dirigieron hacia la mesa. Mientras Sandra se acercó a Erika y les dijo: Carlos, Santiago y Eduardo dejen de acaparar a Erika su esposo a llegado. Ahora vayan y saluden a todos es una fiesta no una reunión de generación. Vengan chicos les presentaré a mi esposo. Abuelo, Adrián es bueno que vinieran, miren les presentó a mis amigos Carlos y Santiago. A mi hermano Eduardo ya lo conocen..
Adrián se aproximó a Erika y la tomó por la cintura mientras ,extendía su mano para saludarlos. Eduardo se adelantó y dijo: hermano ¿Como te cuida mi hermanita?¿Hermanita? Solo eres mayor por una hora- dijo ella muy seria.
Aún así eres menor de acuerdo- respondió Eduardo. Adrián sonrió y miró a Carlos con recelo mientras dijo: es un placer conocer a los amigos de mi esposa y beso la mejilla de Erika.
Erika los invito a sentarse pero los chicos se retiraron.
La velada fue muy amena la pareja bailaba cuando los fuegos artificiales comenzaron a explotar.
Erika sonreía mientras veía los juegos artificiales y Adrián no podía dejar de verla ella volvió su mirada y observó la alegría en los ojos de Adrián. Las luces en el cielo iluminaban toda la esfera celeste y le dijo eres realmente hermosa. Cuándo Adrián la tomó por la cintura y la acercó para darle un beso y ella se estremeció, a Adrián este gesto le pareció muy tierno.
Sandra se acercó para indicarle a Erika qué debía llevar a Adrián a descansar a la habitación y decirle de una vez al abuelo en qué habitación descansaría.
Erika tomó de la mano Adrián y se acercaron al abuelo.
Marcos descansaba un momento después de haber bailado con la tía de Erika realmente se veía extenuado.
Adrián le dijo: Abuelo creo que deberías de irte a descansar Erika nos hará el favor llevarte a tu habitación. El abuelo tomo a Erika de la mano y le dijo: Querida mía creo que ya merezco mi tiempo de descanso así que agradecería me condujeras a la habitación.
Adrián se aproximó hacía Eduardo mientras le decía algo en secreto.
Cuando Erika bajaba la escalera Eduardo la tomó por sorpresa y le cubrió el rostro y aprovechó su desconcierto para atarle las manos luego la cargó en sus hombros y la sacó por la cocina para que nadie viera, por la música que aún sonaba nadie la escucho gritar.
Edy por favor deja de jugar. Dijo muy seria- ¿Que pretendes? por favor suéltame, y aunque él ya no soportaba no reírse, preferiría no decir nada por no delatarse, su hermana era peor que cualquier agencia de investigación, solo no quería echar a perder la sorpresa. La depósito en la camioneta en el asiento trasero y le dijo: duerme confía en tu hermano mayor. Te amo y después beso su frente y cerró la puerta. Erika pregunto, ¿Porque estaba ahí?¿Que pasaba? Y por más preguntas que hacía nadie le contestaba y el vehículo ya estaba en movimiento.
Después de un tiempo Erika empezó a sentir mucho sueño y se quedó dormida.
En Guadalajara la familia Cervantes celebraba una cena.
Editado: 26.10.2021