Estefan llego a la estación de Florencia, le quería dar una sorpresa no lo esperaba, no le había dicho que iría, cogió la reserva en un hotel, sabía que Sofí estaba trabajando, la espero en la puerta del museo.
—¡Hola princesa! Te ves muy hermosa, cada día más—dice Estefan.
Sofí se echó a sus brazos, dándole besos sin parar, lo echaba de menos.
—¡Hola amor! No te esperaba, fue una sorpresa maravillosa, te he echado de menos, no sabes cuanto, ya sé que hablamos todos los días, pero...
—Yo también a ti amore, por eso, tome una decisión...
Sofí se quedó parada sin saber que decir.
—¿Qué decisión? No será .... —Dice Sofí.
—¡Me vengo a vivir aquí! He vendido mi apartamento, en unos días tengo que recoger todo, ¿Qué te parece si me ayudas a buscar una casa? ¿Te gustaría aquí en Florencia? —Dice Estefan.
—¡Si claro! Me encantaría amor ¿Y tu trabajo amor? ¿Buscaras trabajo por aquí? —Dice Sofí.
—He pensado poner mi propia galería, con el dinero que he sacado me da para las dos cosas—contesto Estefan.
—¡Me parece bien! amor ¡Veo que lo tenías todo bien pensado! Y muy calladito jaja—contesto Sofí.
—Quería darte una sorpresa, y veo que lo he conseguido, todavía no te lo crees jaja.
Al día siguiente era sábado, y Sofí no trabajaba, empezaron a buscar alguna casa, vieron bastantes casas, que le gustaron a Estefan, pero a Sofí no tanto, a última hora encontraron un piso en Vía Benedetto, el piso contaba con todas las comodidades estaba para entrar a vivir, tenía cuatro dormitorios y dos baños, cocina independiente, y sala con comedor, una amplia terraza, unos grandes ventanales, los muebles eran modernos y tenía calefacción central y aire acondicionado, Estefan dio una entrada.
Al día siguiente Estefan se marchó para Mónaco, iba a recoger sus cosas personales, para mudarse.
Llego a Mónaco, por la tarde, preparo todo para la mañana siguiente tenía cajas con ropa, cuadros pintados, y sus cosas de trabajo, y algunos recuerdos como fotos de Mónaco, el día siguiente sería un día bastante largo...
Tenía que cargar el coche, y coger carretera dirección Florencia, con todo ello no estaba cansado, sino todo lo contrario, con más energía que nunca...
Tiene algo más de cuatro horas de camino, salió a las once de la mañana, y llego a las cinco de la tarde, Sofí lo estaba esperando allí, el dueño del piso le dejo meter todas sus cosas dentro, al día siguiente el piso seria suyo.
Pasaron unas semanas y Estefan ya tenía abierta su preciosa Galería, en una céntrica calle de Florencia, aunque estaba recién abierta, había conseguido muy buenos clientes, le iba muy bien y estaba muy contento.
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Editado: 04.02.2023