Juan y Zara pasaron varios días juntos, trabajando en la nave. Durante ese tiempo, Juan comenzó a darse cuenta de que estaba enamorado de ella. Aunque sabía que era una extraterrestre y que era improbable que pudieran estar juntos, no podía evitar sentir lo que sentía.
Mientras trabajaban en la nave, Zara le contó a Juan acerca de su planeta y su cultura. Era fascinante escucharla hablar. Y aunque la mayor parte del tiempo hablaban de la nave, también tenían conversaciones sobre otros temas. Juan se dio cuenta de que se estaba enamorando cada vez más de ella.