X. Noches de Azul Agonía 

Avanzo cada tribu hasta la mitad del camino, se encontraron todasellas y un nuevo contrincante se les acerca,

-Hola camaradas, somos mercenarios del desierto Victoria, la noche zarandea por el frio, esta vez ya es imposible continuar, el frio intenso que se combina con esta tormenta de arena no nos dejará avanzar, miren al cielo se mira un espectáculo.-

De noche, con luces estroboscópicas azules  creadas por los espíritus del desierto se iluminaba el cielo, animando a los viajeros quienes decidieron hacer un festín el cual podría ser el último de cada uno, sabiendo que desde tiempo anterior, desde que llegaron al desierto de Sahara pudo haber sido la última puesta de pie sobre la arena.

Los druidas del desierto y los druidas negros al ver las luces en el cielo comenzaron a hacer posturas de bendición a aquellas luces que para ellos eran presagios de agonía para muchos de los que allí estaban.

Justo después del festín, la mayoría de mercenarios se fueron a dormir, un nuevo día acaecía y esta vez los guardias de la colectividaderan los druidas del desierto y los druidas negros, estos no eran humanos, tenían mucha fuerza y sabiduría pero este desierto era toda una sorpresa para ellos.