Ángel Ciego 13. Namek Nivel dios

Unámonos

Mientras Yaniana veía como "deshacerse del problema" el tiempo pasó, el feto creció mucho, unos meses después sufrió una complicación por no cuidarseIncreíblemente el pequeño nació vivo, pero era muy prematuro, tanto, que en cualquier momento podría morir, recién entonces ella se dio cuenta cuanto lo amaba, rompiendo su orgullo fue en busca de Dende y éste lo salvó. Le costó, pero le hizo prometer no decir nada a nadie. Lo siguiente que la mujer hizo fue alejarse de los lugares donde normalmente estaba Piccolo, ya que al tener a su hijo en sus brazos decidió criarlo sola, sabía que no necesitaba a ninguna persona a su lado para eso, los siguientes años los vivieron madre e hijo felices, solos, hasta que, a pesar de sus precauciones, un día el namek llegó donde ella estaba, cuando él vio al niño a su lado, se dio cuenta de  inmediato quien era su progenitor, él.

De vuelta en el planeta sagrado, el trío llegó agotado, sin haber podido rescatar a los secuestrados.

— Para que pregunto cómo les fue — dijo Toshi todavía de brazos cruzados.

— Al menos nosotros intentamos rescatar a nuestros padres — lo encaró molesto Yun.

— Solo lograron desgastarse y poner a su secuestrador sobre aviso de que queremos rescatarlos, mejor es pensar bien un plan, que tenga al menos una posibilidad de triunfo.

— No creas que todo fue una perdida — replicó Bioru — por un segundo pude manejar las jaulas dimensionales, pero no tengo el poder necesario para abrirlas, debería concentrar el de uno o dos guerreros namek para eso — explicó molesto.

El hijo de Yaniana estaba frustrado, siempre quiso que su padre lo hubiera entrenado para ser un gran luchador como él, pero Piccolo enseguida vio que sus habilidades eran las del Clan Dragón, por eso le enseño solo lo básico de lucha, y a la edad adecuada lo llevó con el Gran Patriarca para que lo entrenará, y así pudiera desarrollar sus poderes sin el peligro que la maldad tomará su corazón, lo que afortunadamente ocurrió, el medio namek era un ser claro

— Si los tres fueran uno serían el ser perfecto para derrotar a ese tipo de corazón oscuro, estoy seguro, pero no por medio de la asimilación, deben saber manejar sus poderes y habilidades, no hay tiempo para aprender — meditó en voz alta el anciano Kaio Shin.

— Y si usamos los aros potara, dos veces, así tendrán los conocimientos necesarios — propuso el joven dios.

— Solo se pueden usar para una pareja, y en este caso son tres — le explicó su honorable antepasado.

— ¿Cómo es eso?

— O sea si yo quiero unirme a otro ser no puedo, porque ya hay uno más en mi, sino imagina que ser podría desarrollarse ¿Qué acaso no has estudiado nada? — terminó gritando enojado el anciano, para relajarse fue a pedirle algo de tomar a Kibito.

— La verdad no me acordaba — se excusó Shin, que puso la mano atrás de la cabeza, y sonrió algo avergonzado.

— Entonces no se puede hacer nada — susurró Yun, perdidas las esperanzas.

— ¿Cuánto tiempo dura esa unión? — preguntó Toshi.

— Es permanente — respondió el dios.

Los tres medio namek se miraron complicados.

— Eso es solo si al menos uno de ellos son Kaio Shin, sino dura una hora — rectificó seria Lilith.

— Tienes razón, cuando me fusione con Kibito fue permanente porque yo soy un Kaio.

— ¿En serio se fusionaron? — Lilith se imaginó a su esposo con los rasgos faciales de su ayudante. Movió la cabeza fuerte como diciendo no, con una gotita de sudor en la cabeza — que bueno que se separaron ¿Cómo pudieron hacerlo? Que yo recuerde no hay forma de deshacer esa unión.

— Fuimos a Namek y le pedimos a las esferas del dragón de allí que volviéramos a ser dos.

— Pero somos tres... y si nos unimos los guerreros solamente — propuso Yun.

— Para deshacer esas prisiones necesitan manejar la magia como yo, y si me uno solo con uno de ustedes no tendré la suficiente energía, esa técnica demanda mucho ki — dijo Biora

— Qué complicado, si solo fuéramos dos sería fácil — meditó Toshi.

— Esperen, tengo una solución, mi padre me enseñó a hacer la fusión — Yun se acordó de esa técnica.

— ¿Qué es eso? — preguntó curioso el hijo de Yaniana.

— Dos seres que tienen una altura y nivel de ki parecido hacen unos pasos y se unen en un solo cuerpo, sirve para aumentar la energía, pero solo dura 30 minutos.

— Si lo hiciéramos y luego nos ponemos los aros potara — meditó en voz alta el joven de ojos aguamarina — ¿La unión por aretes tiene alguna restricciones como la fusión?

— No, no es necesario que los individuos sean iguales en tamaño o poderes — respondió Shin.

El hijo de Izbet les mostró los pasos, los otros dos jóvenes quedaron con cara de estupor, y vergüenza.

— ¿Cómo tienes el valor de hacer eso en público? — le reclamó sonrojado Bioru.

— Sé que uno se ve ridículo — también estaba rojo, se acordó la primera vez que su padre le enseñó los pasos, se sintió igual que los otros jóvenes — pero es la única forma ¿Quién se unirá conmigo?

— YO — respondió Toshi — tenemos estaturas y niveles de Ki parecidos, además somos de la raza guerrera.

— Debes hacerlo como que nos viéramos en un espejo ¿Entiendes?

— Sí.

Intentaron hacerlo varias veces, pero sin llegar a tocar sus dedos, para que les corrigieran las posturas, luego que estaban seguros, lo completaron y quedaron perfectos, el ser era como Toshi, pero con cabello, sin antenas y sin las placas rosadas, conservó los ojos aguamarina.

Rápidamente el ser se puso un arete potara y Bioru se colocó el otro, pero no pasó nada.

— ¿Qué ocurre? — se preguntó extrañado Shin.

En eso llegó el anciano.

— No recuerdan que les dije que solo puede ser entre dos seres normales, uno de ustedes ya está fusionado con otro, por eso no funcionó, no hay forma de obviar las leyes de los aretes — volvió a explicarles el hombre mayor.



#6645 en Fanfic

En el texto hay: lucha, hijos, muerte

Editado: 16.04.2020

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