Capítulo 20

No pude dejar de pensar en Jessica todo el domingo, incluso cuando regresé a mi casa después de haber estado juntos no podía dejar de imaginar aquella escena de nosotros dos en esa cama y lo mucho que disfruté de estar con ella. Me bastaba con cerrar los ojos para reproducir todo lo que sucedió, como jalaba su cabello, como me decía todas esas cosas sucias...

Quería verla ya, quería saber si nuestra relación había cambiado ahora, yo lo quería. Sé que solo fue sexo casual, que para ella solo fue un desahogo físico como lo dijo cuando terminó de vestirse, pero para mí Jess es la mujer que me ha arrancado a Amanda de la cabeza. Por eso quiero conocerla mejor, salir en citas, quiero volverme loco por ella —sin tatuarme su nombre claro— tengo ganas de enamorarme de Jessica Hoffman.

—Jess... 

 

Me senté frente en el pupitre que está frente al suyo, ella se quitó los audífonos y los dejó sobre su carpeta, prestándome atención ahora.

 

—¿Qué pasa?

—Lo que pasó entre nosotros...

—Fue genial, te lo dije esa noche. —Interrumpe, alzando la ceja derecha—. Pero ya, ¿no has tenido cosas de una sola vez?

—Bueno... Sí, pero no salió como lo esperaba. —Le confirmo, sin dar nombres—. Creí que realmente te gustaba.

 

Jess esbozó una sonrisa sin separar mostrar los dientes.

 

—Me gustas, pero no para que seas mi novio.

—¿Entonces?

—Anda vete. Ya llegó tu amiga... Ve, corre.

—No me voy a mover de aquí hasta que me expliques eso último. —Le digo—. No lo haré.

—Bien, entonces quédate. 

 

Se puso los audífonos de nuevo, ignorándome por completo. Pero tal como lo dije, me quedé aquí estático, en el pupitre del frente, me quedé hasta que llegó el profesor y no le quedó de otra más que quitarse los auriculares. 

 

—Eres algo insistente, ¿verdad? —Susurra a mi oído con molestia.

—Así es...

—Bien, pero no hablaremos de lo que pasó entre nosotros frente a todos estos idiotas, lo haremos cuando la clase termine.

—De acuerdo. 

 

Regresé mi vista al frente, deseando que la clase de matemáticas terminara lo más antes posible. Me interesa más saber en qué va a terminar mi situación con Jessica que los catetos de los que hablaba el profesor de trigonometría. 

 

[...] 

 

Cuando finalmente la clase terminó, el salón comenzó a vaciarse y Jessica no hizo ni un solo intento por moverse de su lugar. Sabía que el momento de retomar el tema había llegado. 

 

—¿Y bien?

—Me gustas para que seas mi fuck friend. —Responde, con una sonrisa en el rostro.

—¿A qué te refieres? —Cuestiono, mirando sus ojos.

—Tengamos una relación sólo basada en sexo. Cuando nos necesitemos y ya, no quiero involucrarme sentimentalmente con nadie y tú no estás listo para una relación seria hasta que no superes por completo a tu ex. Así que...

—¿Pero saldríamos en citas?

—No muy a menudo, de eso no se trata. ¡Vamos Nick! Es la fantasía de todo hombre, coger sin compromiso.

—Está bien, sí... Acepto eso.
 

Lo hacía por estar cerca de ella, de alguna u otra forma, desde que la vi en el bus se robó mi interés como nadie después de Amanda pudo hacerlo. Y si esta era la única forma de estar con Jess, no voy a desaprovechar la oportunidad que me ha puesto en frente, por supuesto que lo iba a aceptar. Además, me gusta y me gustó la química sexual que tenemos en la cama, creo que al final no es tan mala idea tener una relación así.

Jessica salió del salón primero. Tomé mi mochila e imité su acción antes de que este lugar comenzara a llenarse con las personas de la siguiente clase. 

 

—¿Por qué me dejaste sola hoy?

 

Elisse estaba ahí esperando por mí, afuera del salón pidiendo una explicación por haberla dejado hoy, ya que desde que la conozco siempre nos hemos sentado juntos.

 

—Tenía un asunto que arreglar con Jessica.

—¿No te odiaba?

—Por eso tenía que hablar con ella, parece ser que ya me perdonó. —Le digo, sonriéndole sin entrar en más detalles—. En fin, ¿qué vas a hacer hoy?

—Lo mismo de siempre, ir a casa después de clases, ¿por?

—Mike y yo vamos a ver una película en su casa, ¿quieres venir? Es Scream 4. 

 

Elisse terminó aceptando la invitación y se despidió de mí para ir a su siguiente clase.