Con la yema de mis dedos tocó tu alma,
tu corazón
Con la yema de mis dedos siento tu frío,
y tu dolor.
Entonces pasa en mi mano cierta incomprensión,
la alejo y siento dolor.
Quizá todo esto sea por tus ojos,
tristes, melancólicos y profundamente muertos.
Con la yema de mis dedos
me topo con la realidad evasiva,
tan engañosa ella como la falta de vida.
Con la yema de mis dedos conozco tu verdad.