Capítulo 36

Muchas ciudades recorridas, todas absolutamente vacías, al llegar a Yazd muchas tropas estadounidenses se unieron, la mayoría de estas eran solo soldados de sexo femenino, sin embargo, al llegar a Afganistán no hubo tropas enemigas la frontera, Farah, el norte de Helmand, Daikondi, todo vacío, al llegar a Ghazni, todo lleno de civiles con las manos en alto y no armados.

-No conozco el idioma que se habla aquí, pero supongo que alguien debe entender el árabe o el inglés- dijo Milos y respiro profundamente- Someone understands me?! (¿Alguien me entiende?)

-I understand sir (Yo le entiendo señor)- dijo una mujer cubierta totalmente con las manos en alto

Quienes acompañaban a la mujer la intentaron detener, Milos se descolgó su rifle y saco su navaja y entrego también su pistola, entonces, solo entonces dejaron que la mujer se acercara a él.

-What happened? (¿Que pasa?)-

-Russians came and took our boys and men, now we go to Tajikistan (Los rusos vinieron y se llevaron a nuestros niños y hombres, ahora vamos a Tayikistán)-

-Do you know where they were taken? (¿Sabe a donde los llevaron?)-

-To defend Iran (A defender Irán)-

-Tell everyone not to fear, we will not hurt them, they can walk calmly (Diles a todas que no tengan miedo, no los lastimaremos, pueden caminar tranquilas)-

-Thank sir-

Milos regreso con su escuadrón y volvió a armarse, siguieron caminando cuando unos aviones surcaron el aire, dos cajas se dejaron caer, Milos, Seiji, el coronel y el sargento Marco pusieron los ojos como platos cuando vieron las cajas cayendo con un paracaídas que mostraba la bandera rusa.

-¡Protejan a las civiles!- gritaron los tres y los soldados rápidamente se dividieron

La mitad de las tropas fueron a apresurar a las civiles a que se escondieran, la otra mitad incluyendo a las ahora compañeras de Seiji y el sargento Marco junto a las compañeras de Seiji, las cajas cayeron y apenas impactar al suelo se abrieron, un cubo en cada caja que poco a poco comenzó a tomar forma de humanoide, Carrie puso la vista en su francotirador y no podía creer lo que veía.

-Es el sargento Trujillo y el general Castillo- dijo Carrie con voz temblorosa

-Lucas, Rima, confirmen- pidió Milos

-Confirmo, es claramente el rostro del sargento Trujillo y del general Castillo- dijo Rima

-Señor, tienen muchas armas, metralletas, lanzamisiles…-

-¡Todos cúbranse!- grito Milos y todos se pusieron a cubierto en algunos edificios

Las balas de alto calibre comenzaron a perforar las paredes de los edificios, los misiles hacían volar por los aires a las tropas, Milos con señas ordenó a sus compañeras que buscaran cobertura para tiros limpios, además de dejar estrictamente prohibido el combate cuerpo a cuerpo, el sargento Marco ordenó a sus compañeras se quedaran cerca de él y que tampoco intentaran pelear frente a frente, Seiji ordenó que se protegiera a los civiles sobre él, sus compañeras insistieron en acompañarlo y eso evito que quedara totalmente solo, el coronel ordenó a la Dra. Suki que protegiese a las civiles y se alejaran lo más que se pudiera, al resto de su fracción que se quedaran cerca, los humanoides se comenzaron a acercar peligrosamente, Seiji fue el primero en salir, sin hombres que le cubrieran era casi un suicidio, sus compañeras ya equipadas con la ropa especial se sintieron más seguras, pero no se sabía de qué tan alto calibre eran las balas que los humanoides disparaban, Seiji se puso en una cubierta y comenzó a disparar, disparos casi perfectos a la cabeza, sin embargo, solo parecía que las balas rebotaban.

-¡Esto no está funcionando!- grito Seiji mientras recargaba

Uno de los humanoides giró a donde Seiji estaba recargando, al sentir nuevamente los disparos en la cabeza este comenzó a disparar a Seiji, este se arrojó a otra cubierta y vio como algunos soldados morían intentando matar a los humanoides.

-¡Están cayendo como moscas!- grito Milos mientras se movía a otro edificio- ¡Hasta que las civiles estén lejos atacaremos!-

El coronel, Seiji y el sargento Marco asentaron con la cabeza desde donde estaban, Milos hecho un vistazo a donde estaban los civiles, estos ya estaban algo lejos y se podía ver solo el polvo que dejaron sus pasos.

-¡Ahora!- gritó Milos

Inmediatamente todos salieron y comenzaron a disparar desde muchos ángulos a los humanoides, la fuerza de impacto de las balas hizo que estos apenas retrocedieran, mas no parecían recibir daño.

-¡Recarga!- gritaron algunos soldados

Y mientras unos recargaban, los humanoides bajaron sus armas y corrieron hacia los soldados, la fuerza de impacto de las balas ya no era la suficiente para hacerlos retroceder así que los humanoides corrieron con fuerza derrumbando algunos edificios, los soldados siguieron disparando solo consiguiendo acabar con las pocas balas que tenían en su poder.

-¡Esto no está funcionando!- grito Carrie mientras arrojaba su rifle francotirador y sacaba una pistola

-Olvídalo- dijo Milos mientras arrojaba su rifle- esto no está funcionando- dijo mientras sacaba su navaja

-Espere, ¿Qué piensa hacer?- preguntó Zinvori con algo de temor

-¿Usted también?- preguntó Olith

-Ya no tengo balas-

-Esto se está poniendo al fin interesante- dijo Chacnicte mientras sacaba dos navajas

-¡Todos lo que ya no tengan munición dejen sus armas y saquen sus navajas!- grito Milos a todos los soldados

-Pensé que nunca lo diría- dijo Zalir mientras tiraba su rifle y en una mano sostenía una navaja y en la otra un machete

Muchos soldados tiraron sus armas de fuego y se armaron con navajas, los humanoides no volvieron a levantar sus armas lo que sugirió que se quedaron sin balas, atacaban de frente, con navajas que salían directamente de sus brazos, y las armas no podían perforar el exoesqueleto de metal, ni siquiera podían abollarlo un poco, y dar una explicación más detallada ahora es posible ya que todos los soldados podían ver muy de cerca a los humanoides, un cuerpo humano como cualquier otro, solo que recubierto de un exoesqueleto mecánico que parecía ser de una aleación muy fuerte, al parecer la piel hecha de la misma aleación ya que las balas tampoco la perforaban.