Cap. 20 Sorpresas
Giulian apareció en el patio y se dirigió enseguida a la casa. Los chicos estaban en el salón, no se habían movido de allí desde que los Arzhaelíes habían salido de forma tan precipitada y en cuanto vieron a Giulian con Sam en brazos, las chicas ahogaron un grito mientras que Mael y Gail corrieron tras él mientras subía las escaleras.
Cuando iban a mitad de la escalera, apareció Kenny con Danny y las chicas se abalanzaron sobre ellos para tratar de ayudar a Kenny, ya que Danny venía sin sentido también.
- ¿Qué sucedió? -- preguntó Diandra pálida como un papel -- ¿Lo hirieron?
- ¿Dónde están los demás? -- quiso saber Aderyn
- No sé bien qué sucedió, supongo que los encontraron cuando venían hacia acá -- dijo Kenny -- Los demás deben estar por llegar, ya quedaba poco por hacer cuando desaparecimos, y no, a Danny no lo hirieron, pero en el momento en que lo sujeté para desaparecer perdió el sentido.
Todo esto lo dijo mientras subían a la carrera por las escaleras. Cuando Aderyn irrumpió en la habitación, ya Giulian había colocado a Sam sobre la cama y estaba abriendo su blusa por la parte de atrás.
- ¿Llegaron los demás? -- preguntó Giulian sin levantar la cabeza de lo que hacía
- Solo Kenny y Danny, pero…
- ¿Pero qué? -- preguntó Giulian sin dejar de ocuparse de Sam
- ¿Están heridos? -- preguntó Gail
- No, pero Danny está desmayado
- Es por Sam -- dijo Mael -- recuerden la vez anterior
Escucharon pasos rápidos que se aproximaban y un minuto después entraron Vlad, Eve e Iván.
- ¿Todos bien? -- preguntó Giulian
- Dorila tiene una ligera herida y Delos una algo más seria, pero ya Eowaz se ocupa de ellos -- dijo Eve -- todos los demás bien
- ¿Dónde están Danny y McKenzie? -- preguntó Vlad
- Danny está en su habitación, llegó sin sentido -- dijo Gail
- Lo imaginé -- dijo Iván y luego puso la mano sobre el hombro de Giulian -- Déjame a mí Giulian
Pareció ir a protestar, pero finalmente se apartó y dejó que Iván se hiciera cargo de la herida. Tomó una gota de la sangre que manaba y la colocó sobre la hoja de su Athame.
Aunque los chicos no vieron salir ningún rayo, de la pequeña gota se elevó un fino hilo de humo blanco. Iván retiró la gota de la hoja, y luego apuntó a la herida.
- ¡OSTANOVIT! -- dijo pasando su Athame por encima de la herida y la sangre fue deteniéndose -- ¡CLAUDO! -- y la herida comenzó a cerrarse
Iván le dio vuelta y colocó la mano sobre su frente, asintió y se volvió hacia ellos.
- No había veneno en la herida, estará bien -- les dijo y luego agregó -- Eve encárgate de cambiar sus ropas por favor. Yo voy a ver a Danny.
Todos a excepción de Giulian y Aderyn, abandonaron la habitación.
- ¿Y tú qué esperas? -- le preguntó Eve a Giulian -- Sal de una vez que voy a cambiar su ropa.
- ¿Y qué? -- peguntó él a su vez
- ¡Giulian! -- exclamó ella -- Es una chica
- Por favor, Eve -- dijo él con exasperación -- a esta chica, yo le cambié los pañales, así que déjate de necedades.
- Me importa un demonio si la trajiste al mundo y sé de hecho que no fue así, así que hazme el favor de abandonar esta habitación en este mismo instante.
Aderyn muy prudentemente se acercó a Giulian y le tomó la mano.
- Vamos Giulian, seguramente a ella le incomodaría mucho -- le dijo con voz suave -- Vamos con los demás a ver cómo está Danny.
Él asintió, pero no dejó de enviarle una mirada venenosa a Eve. Danny había recuperado el conocimiento, pero se quejaba de dolor en la espalda.
- ¿Sam está bien? -- preguntó el chico cuando Giulian entró
- Sí, no te preocupes -- le dijo -- Si Iván no hubiese decidido convertirse en Arzhaelí, habría sido un gran Läkare.
- Y eso es justamente lo que hubiese sido de no ser por ustedes, partida de locos -- dijo Iván sonriendo
- Y te habrías aburrido enormemente -- opinó Vlad
- No lo creo, ustedes se habrían encargado de mantenerme muy ocupado. Y, en cualquier caso, la actividad de un Läkare no tiene nada de aburrida.
- ¡Oh vamos! ¿Qué tiene de divertido pasarse todo el día viendo heridas unas peores que otras? -- insistió Vlad
- Pues a ustedes parece divertirles producirlas
- Eso es diferente, ahí es donde está lo divertido -- siguió el gemelo
Mientras los chicos se morían de risa, Diandra se acercó a la cama de Danny y este dejó de reír muy rápidamente.
- ¿Qué? -- preguntó alejándose tanto como le permitían las almohadas -- No estoy herido, esto es…
- Ya lo sé, Douglas, aunque no lo creas no soy ciega, solo quería preguntarte cómo estaban tus hermanos y especialmente ¡¿Cómo demonios terminaron enredados con esos infelices?! -- finalizó Diandra en un tono que hizo que Mael cuyos oídos eran incluso más sensibles que los de los Natchzhrer, hiciese un gesto de dolor
- Vamos Di, no supondrás que los invite a ir de paseo con nosotros ¿no?
- Por pensar, puedo pensar y creer cualquier cosa de ti, pero te concedo que a pesar de lo muy estúpido que eres, no llegas tan lejos, así que cuéntanos.