Capítulo 9 - Cosa

Después de un tiempo, Cecilia y yo nos encargamos de buscar un refugio donde poder descansar. Pero para no perder a los demás, nos quedamos en el sitio donde aparecimos después de que el fondo blanco se fuera. Encendimos una fogata con dificultad, pero al final lo logramos. Ahí nos quedamos por un tiempo esperando a los chicos, que buscaban comida o armas. Hicimos lo que pudimos con lo menos posible, tuvimos dificultades, muchas veces se rompían las cosas, hicimos camas de ramas con hojas, una casa de campaña provisional hecha con los mismos materiales. Pero lo que más importaba, era que encontramos una cueva no muy lejos del lugar de acuerdo.

Cecilia se levantó de donde encontraba.

—Voy a ver las cosas del nuevo refugio. Tratare de no tardar mucho.

—Oye espera —me levanto igual y la detengo de la muñeca— ¿te encuentras bien?, quiero decir, por lo que viste hace un rato, ¿quieres hablar?

Suspira.

—Si, si quiero hablar. Pero ya tendremos todo el tiempo del mundo cuando salgamos y salimos al café. Te tengo muchas cosas que contar.

Se dio media vuelta y se marchó.

—Con cuidado —le susurre al bosque.

Así fue como me quede sola por un tiempo, sola sin protección, solo viendo la fogata artificial creada por el simulador, que de igual manera se sintió real, el calor que emano lo viví. No hacia frio y de hecho durante ese rato hasta el calor llego a molestarme, sin embargo, era acogedor al mismo tiempo. Tenia un mundo en mi cabeza, no solo dudas, sino mas bien no sabia en quien podía contarle todo, ya dudaba siquiera de quien era yo. Que, si era la «elegida» para algo, pero yo me sentía igual que siempre, dudaba y siempre dude de mis habilidades, pero ahora, era mas repetitivas. Me sentí atrapada, con miedo. No sabía que estaba pasando.

De repente se escuchó ruidos en lo profundo del bosque, me saco de mis pensamientos estuve alerta pero no hice absolutamente nada. Una luz se acercaba lentamente a mí. Me levanté de donde estaba, me puse en guardia, tomé una rama. Espere para atacar…

—Eliza —saludo Peter.

Solté un grito agitado. Retrocedí de donde estaba dando un brinco.

—Por favor, por favor, Peter no vuelvas hacerlo. Te juro que casi haces que me de un infarto.

Sentí mi corazón latir rápidamente.

—Perdona, no quería asustarte

Estaba apenado así que le sonreí y le tomé por el hombro en modo de aceptar su disculpa.

—Vaya parece que sí pudieron hacer la fogata —dijo Joshua dejando las cosas que tenia cargando— nunca dude de Cecilia.

—¿No me crees capas a mi de hacerlo? —pregunte indignada—, yo ayude con hacer algunas cosas útiles para poder dormir en caso de que sea necesario y mas cosas. Se hacer cosas…

—Hablando de eso —interrumpió Steven— ¿dónde queda el refugio?

Los tres venían cargados de cosas, objetos de madera, algunas frutas y plantas. Un a animal muy parecido a un conejo y entre otras cosas.

—No esta muy lejos de aquí, así que no se pongan cómodos —me cruce de brazos—, si necesitan ayuda, puedo ayudar a llevar cosa al refugio. —Tome varias plantas y frutas — Síganme, Cecilia esta allá.

Apague la fogata con el agua que habíamos recolectado antes y los entre en el bosque, los chicos hicieron varias bromas, teníamos una antorcha que iluminaba el camino y pocos minutos después ya estábamos ahí.

—Cecilia estamos aquí —se escuchó el eco de mis palabras.

Una silueta femenina llego corriendo a nuestra dirección.

—No imaginan todo lo que hicimos Eliza y yo para tener esto listo —Cecilia se sacude la tierra de su ropa—. Ya me estresé de estar aquí, además el tiempo pasa tan lento. Parece que ya llevamos casi más de doce horas aquí.

—Descubrí algo mientras estábamos recalentando las cosas —Peter deja las cosas no tan cerca de la fogata dentro de la cueva—, mientras estemos dentro de este simulador el tiempo no pasa afuera. Es como si estuviéramos dentro de un bucle de tiempo. Apenas llevamos como una hora real.

—Pero que no los «bucles de tiempo» son cuando llegas al mismo lugar anterior. —Propone Joshua.

—Estas en lo correcto Joshua —Peter se toca la barbilla pensando—, mi punto era que estamos en cerrados en un «agujero» donde el tiempo pasa de distinta forma, teniendo en cuenta que el tiempo es relativo, puede que en este simulador estemos viviendo «normal» para nosotros para afuera no haya pasado ni la hora. Es como si viviéramos más rápido. —Peter volteo a vernos y vio que casi no entendíamos sus explicaciones, o al menos eso me pareció creer pues de nuevo explico de manera sencilla—, es como si viajáramos en un avión alta velocidad, mientras que adentro estaríamos quietos por fuera el viento pararía rápido y las nubes también. Es mas o menos lo mismo. O como cuando sueñas…